EL FUNDAMENTO DE LA MORALIDAD ¿Porqué la persona humana ha de conducirse éticamente y cuál es el fundamento de la moralidad?

MORAL Y RELIGION Coexisten dos tendencias: 1ra: Se reserva la palabra Etica para significar la teoría racional (Filosofía) y Moral para la doctrina religiosa (Teología). 2da: Se niega el caracter de ciencia a toda Moral de origen religioso.

Etimologias Los términos “Etica” y “Moral” tienen el mismo origen etimológico: “Etica” se deriva del griego “éthos”y significa “costumbre”, “Moral” deriva del latín” “mos” que significa “costumbre.”

Relación entre Religión y Moral Corrientes antiguas fundamentaban la ciencia ética de un modo racional y consideraban éticamente “bueno” aquello que era lo “mejor” para el H pues respeta su naturaleza específica. En el siglo XX surgen tres teorias: Etica y Religión: 1ro: No se distinguen. 2do:Se contraponen y niegan una a la otra. 3ro: Tienen múltiples puntos de relación.

Origen religioso de la moral León XIII: “…la moralidad es un elemento que entra como componente en todos los actos humanos, implica necesariamente la existencia de Dios y con la existencia de Dios la de la religión, lazo sagrado cuyo privilegio es unir con anterioridad a todo otro vínculo moral, al hombre con Dios…”

Origen religoso de la moral Pio XI: “Sobre la fe en Dios, genuina y pura, se funda la moralidad del género humano.” Pio XII: “Cuando temerariamente se niega a Dios, todo principio de moralidad queda vacilando y perece, la voz de la naturaleza calla o al menos se debilita paulatinamente.” Juan XXIII: “La base de los preceptos morales es Dios. Si se niega la idea de Dios, estos preceptos necesariamente se desintegran por completo.”

El Hombre es un ser moral por natulaleza El H es un animal, pero se distingue de los demás animales porque piensa, porque es social y porque debe vivir éticamente. La Revelación enseña que la razón de la eticidad del H deriva de que ha sido creado a imagen y semejanza de Dios y ocupa un lugar destacado en el cosmos por lo que su conducta ha de conformarse con singular naturaleza. Esto demanda que el H se relacione con Dios de un modo adecuado y que tenga a Dios como fin último de su vida.

Unidad radical de la persona En el ser humano confluyen dos elementos, que se distinguen entre sí, pero que no pueden separarse: cuerpo y alma. Cuerpo y alma constituyen una unidad radical de la persona y cuando se separan sobreviene la muerte.

El pecado y la redención El pecado de origen y la redención marcan los límites del ser humano: su debilidad y su grandeza. En virtud del pecado original, todo H esta inclinado al mal y al pecado, pero, en razón de la dignidad alcanzada por la redención, es capaz de aspirar a las más altas cumbres de la perfección y de la santidad.