EL IMPERIO HISPÁNICO En el siglo XVI, España se convirtió en un gran imperio, el más extenso hasta el momento. A lo largo del siglo XVII se fragmentó y España perdió la superioridad en Europa y se vio acosada por otras naciones europeas.
Los territorios del imperio El imperio hispánico estaba formado por territorios diferentes en Europa, América, África y Asia. En 1580 se añadió el reino de Portugal. Los territorios conservaban sus instituciones pero tenían un solo rey. Éste no tenía poder absoluto, nuevos impuestos o nuevas leyes tenían que ser aprobadas por los Parlamentos. Algunas instituciones controlaban al rey, como el Justicia de Aragón. El rey dirigía el ejercito, declara la guerra y firma la paz, organizaba instituciones y establecía impuestos.
El reinado de Carlos I (1516-1556) Era nieto de los Reyes Católicos, hijo de Juana I “la Loca” y Felipe I “el Hermoso”. Fue rey de España y Emperador del Sacro Imperio Germánico (Carlos V) Fue educado en Flandes y desembarcó en Tazones. Para gobernar se rodeó de consejeros extranjeros, lo que no gustó y en 1520 se produjo la revuelta de las Comunidades que duró hasta 1522. Acabó con la ejecución de los cabecillas de la revuelta: Padilla, Bravo y Maldonado. Otras revueltas de campesinos en Valencia y Baleares Carlos V (Tiziano) Ajusticiamiento de los capitanes comuneros en Villalar
El reinado de Carlos I (1516-1556) En política exterior se enfrentó a los franceses por el poder en Europa. A los turcos por el control del Mediterráneo y el comercio con Italia. A los luteranos que no aceptaban la autoridad del Papa. Decepcionado por no poder controlar la expansión luterana, en 1556, repartió sus territorios: a su hermano, Fernando I, le cedió los territorios del centro de Europa y el resto a su hijo, Felipe II. Se retiró al monasterio de Yuste (Cáceres) donde moriría en 1558 Monasterio de Yuste Carlos V en Yuste (Delacroix)
El reinado de Felipe II (1556-1598) Para mantener la integridad del imperio tuvo que enfrentarse a varios problemas. Derrotó a los franceses en la batalla de San Quintín en 1557. Después, 1571 venció a los turcos en la Batalla de Lepanto. En 1566 se sublevaron los Países Bajos iniciando una larga y costosa guerra: la guerra de Flandes. Inglaterra apoyó a los sublevados y Felipe II envió contra ellos “la Armada Invencible”, sin embargo fue derrotada en 1588. Batalla de Lepanto La rendición de Breda (Velázquez)
El reinado de Felipe II (1556-1598) Todas las guerras en las que se vio envuelto el imperio supusieron un gasto enorme que se pagaba con el oro y la plata que venía de América, pero llegó el momento en que bajó la cantidad de ellos que llegaba y algunos productos se encarecieron. La población se empobreció.