TEMA 7: LIBERALISMO Y NACIONALISMO

1. LA REVOLUCIÓN FRANCESA

A. Causas. Filosóficas: Políticas: desarrollo del pensamiento Ilustrado, que defiende: igualdad de los seres humanos libertad de los seres humanos división de poderes soberanía nacional Políticas: revolución e independencia americana constitución de los EE.UU.

Sociales: Económicas: reivindicaciones de la burguesía, contraria al modelo de sociedad estamental revueltas provocadas por las duras condiciones de vida de la población (carestías, hambrunas, etc.) Económicas: alza de los precios de los alimentos básicos crisis de financiera de la monarquía: Luis XVI quiere subir los impuestos, pero la nobleza se niega y pide la convocatoria de los Estados Generales.

B. Desarrollo. Antecedentes En los Estados Generales: se reúnen los tres estamentos: nobleza, clero y tercer estado (burguesía y campesinado) se vota por estamento cada estamento tiene el mismo número de representantes El tercer estado pide: representación proporcional para cada estamento voto por persona Se rechazan las reivindicaciones del tercer estado, que decide reunirse por su cuenta en el pabellón del juego de la pelota de París, inaugurando la Asamblea Nacional.

Primera etapa (I): La monarquía constitucional (1789 – 1792). El rey y la nobleza aceptan la Asamblea Nacional e intentan llegar a un acuerdo con el Tercer Estado para construir una monarquía constitucional y parlamentaria. En 1791 se redacta una constitución que establece: Separación de poderes Igualdad legal de los ciudadanos Soberanía nacional, pero con limitaciones Sufragio censitario indirecto Derecho de veto real Una vez aprobada la constitución, la Asamblea Nacional pasa a llamarse Asamblea Legislativa, y redacta nuevas leyes: la nobleza debe pagar impuestos Expropiación (desamortización) de bienes de la Iglesia (intento de solucionar la crisis financiera) Nuevo ejército para defender la revolución: la Guardia Nacional Constitución Civil del clero (separación Iglesia – Estado)

Primera etapa (II): La monarquía constitucional (1789 – 1792). La monarquía constitucional fracasa por la oposición de varios sectores: del rey, que huye de París para unirse a un ejército austriaco que planeaba invadir Francia de los nobles (por la obligación de pagar impuestos) del clero (por la desamortización) de los sectores populares (por la restricción del sufragio y los elevados precios provocados por la crisis)

Segunda etapa (I): La república democrática (1792 – 1794). En abril de 1792 los sectores populares asaltan el Palacio Real, encarcelan al rey y proclaman la república. La República democrática se divide en dos fases: Dominada por los girondinos (burgueses moderados, defensores de la propiedad privada) Convocatoria de elecciones por sufragio universal para elegir una nueva asamblea (Convención Nacional) Juicio contra el rey, que es condenado junto a su mujer a muerte en la guillotina (alianza de las monarquías europeas contra Francia para frenar la revolución) Conspiraciones contrarrevolucionarias dentro de Francia, invasión de ejércitos de las monarquías europeas para acabar con la revolución.

Segunda etapa (II): La república democrática (1792 – 1794). Dominada por los jacobinos (burgueses radicales, defensores de la igualdad por encima de la libertad y de la alianza con las clases populares. Nueva constitución en 1793, que introduce el sufragio universal directo Gobierno en manos de un COMITÉ DE SALVACIÓN PÚBLICA, dirigido por Robespierre: política del terror (dictadura y represión contra todos los que discrepen). Ley de sospechosos y tribunales revolucionarios para condenar a los sospechosos de conspiración y contrarrevolución. Leyes para favorecer a las clases populares: Ley de Maximum La radicalización de la revolución y el Terror provocan la oposición de la mayor parte de la población y un golpe de estado que acaba con el gobierno jacobino en julio de 1794 (Golpe de Termidor).

Tercera etapa: La república burguesa (1794 – 1799). La burguesía conservadora vuelve a controlar el poder para evitar una radicalización de la revolución como la ocurrida en la etapa anterior. Nueva constitución en 1795: Poder ejecutivo en manos del Directorio, un órgano de gobierno colegiado formado por varias personas (objetivo: evitar dictaduras como la de Robespierre) Poder legislativo en 2 cámaras (Consejo de los Quinientos y Consejo de Ancianos) Recuperación del sufragio censitario Represión contra los jacobinos En 1799 Napoleón Bonaparte, un general del ejército, da un golpe de estado e inaugura el Consulado. ¿Por qué se acepta el golpe de Napoleón? Porque podía poner orden en las revueltas dentro de Francia y vencer a la alianza de potencias absolutistas en el exterior.

2. EL IMPERIO NAPOLEÓNICO

En 1799 Napoleón es nombrado cónsul, y va a intentar: Consolidar los logros de la revolución y evitar la vuelta al absolutismo Evitar los radicalismos que se habían producido en la revolución Gracias a sus éxitos militares, el poder y el prestigio de Napoleón crecieron mucho, y en 1804 es nombrado emperador. En 1811 el Imperio Napoleónico había alcanzado su máxima extensión y se encontraba en el momento de mayor esplendor.

La ocupación de muchos territorios por parte del ejército napoleónico favoreció la aparición de sentimientos nacionalistas que querían expulsar al invasor. Se produjeron varios levantamientos contra Napoleón animados por los ideales revolucionarios que el mismo ejército francés había extendido por Europa. En 1808 estalla en España uno de los más importantes: la Guerra de Independencia. En 1815, Napoleón es derrotado de manera definitiva en la batalla de Waterloo, y fue desterrado a la isla de Santa Elena, en medio del Atlántico.

3. LA EUROPA DE LA RESTAURACIÓN

Entre 1814 y 1815 los estados vencedores de Napoleón (Austria, Rusia, Prusia e Inglaterra) celebraron el Congreso de Viena, donde acordaron: Restaurar las monarquías que habían sido derrocadas por Napoleón. Devolver a Francia a sus fronteras de 1792. Se crean nuevos países en los territorios que habían sido conquistados por Napoleón para “frenar a Francia” (Reino de los Países Bajos, Reino del Piamonte, Luxemburgo). Se firma la Santa Alianza, un tratado de ayuda militar entre las monarquías europeas en caso de amenaza de revolución liberal.

A pesar de todo, era imposible devolver a Europa a la situación anterior a la Revolución Francesa: el liberalismo se había extendido por muchas zonas y comenzaba a hacerlo el nacionalismo.

4. LAS REVOLUCIONES LIBERALES Y NACIONALES.

El liberalismo establece: El liberalismo y el nacionalismo se extendieron por todo el continente europeo como consecuencia de las conquistas napoleónicas (sometimiento de muchos territorios y pueblo) y de la Restauración (creación de países nuevos sin contar con sus habitantes). El liberalismo establece: Separación de poderes, Soberanía nacional, Derecho a la propiedad privada, Igualdad de derechos de los ciudadanos.

El nacionalismo establece: El derecho de cada pueblo a decidir sobre su futuro, El derecho de la naciones a construir sus propios estados independientes. Se van a producir tres oleadas revlucionarias en Europa: 1820: Grecia consigue su independencia del Imperio Turco. 1830: Francia, Bélgica (se independiza del Reino de los Países Bajos). 1848: Francia, Austria, Prusia, Italia (introducción de los ideales democráticos: las clases populares y obreras quieren cambios que las revoluciones anteriores no les habían traído).

La unificación italiana: La península Itálica se encontraba dividida en varios estados independientes. Liderada por el Reino del Piamonte. Principales protagonistas: Víctor Manuel I, Cavour, Garibaldi. La unificación se completa en 1871 con la anexión de los Estados Pontificios.

La unificación alemana: Alemania estaba dividida en 36 estados independientes. Liderada por Prusia, que crea el zollverein o unión aduanera. Principales protagonistas: Guillermo I y Otto von Bismarck. Tras una guerra con Austria y otra con Francia, la unificación se completa en 1871.