la América hispana en el siglo XVIII España en el siglo XVIII: entre luces y sombras:: El canto del cisne del Imperio español la América hispana en el siglo XVIII
1. Pocos hombres para tanto espacio 2. Esto vale un Potosí 3. Criollos, mestizos y mulatos y otras gentes del lugar 4. Los que mandaban y los que querían mandar
1. Pocos hombres para tanto espacio La expansión española en América nunca se detuvo. Aunque había un problema grave: la falta de colonos. Había mucho espacio conquistado, pero sin capacidad para controlarlo completamente. A este problema se le suma el de la ambición, cada vez mayor de Inglaterra y Francia en la zona. Soluciones que plantea la Corona: Creación de dos nuevos virreinatos: Virreinato de Nueva Granada (1717), con capital en Santa Fe de Bogotá Virreinato del Río de la Plata (1776), cuya capital correspondió a Buenos Aires.
1.1. La conquista del Oeste España intensifica durante el siglo XVIII su avance por tierras norteamericanas. Se encuentra con dos enemigos: Los indios norteamericanos que destruyen pueblos, minas y misiones españolas. El interés de grandes potencias en la zona: Gran Bretaña, Francia, Rusia y, cuando se independiza, EE. UU. La solución de España fue doble: Reforzar la presencia española en la zona ya conquistada. Intento de colonizar nuevas zonas antes de que otros lo hicieran. Sainte Agustine. Florida
2. Esto vale un Potosí La economía americana estaba organizada para producir para la metrópoli. Dos elementos clave: La minería: se mantiene como el principal objetivo económico, sobre todo la plata, ahora en México La agricultura: las plantaciones se convierten en prioritarias. Liberalización del comercio: se termina con el monopolio del puerto de Sevilla y se abre el comercio a 13 puertos españoles más. Potosí
3. Criollos, mestizos, mulatos y otras gentes del lugar 3.1: La organización racial: la desigualdad de las castas. Sociedad americana del siglo XVIII era jerarquizada e inamovible. Cada grupo social tenía su función que se definía según su riqueza y su origen. La sociedad se organiza de la siguiente manera: Peninsulares. Emigrados desde España Criollos: Americanos hijos de padres españoles o de origen español Mestizos: nacidos de la unión entre un español y una india Las castas: formado por distintas razas según el origen de sus padres. esclavos: Capa social más baja Las castas en América
3. Criollos, mestizos, mulatos y otras gentes del lugar (Cont.) 3.2 La Iglesia en América. El segundo poder. La iglesia presenta una doble cara en América La que apoya a los conquistadores justificando sus abusos La que defiende los derechos de los indios y se pone del lado del débil. La labor fundamental la llevaron a cabo las órdenes religiosas, sobre todo jesuitas y franciscanos. Destacando las misiones jesuíticas. 3.3 Las revoluciones sociales: la necesidad de libertad o de poder. Rebeliones sociales constantes en América. Dos motivaciones: Deseos de autonomía e independencia: eran rebeliones lideradas por la clase criolla que ansía más poder. Lucha por mejorar las condiciones de vida básicas de los indígenas. Éstas tenían un carácter mucho más social.
4. Los que mandaban y los que querían mandar España se encuentra con dos grupos de enemigos: Exteriores: Gran Bretaña, que desea en control del comercio con América que monopoliza España, así como el control sobre ciertas colonias en Norteamérica. Interiores: La elite criolla desea más cuota de libertad y autonomía tanto política como económica Barco Covadonga. Guerra de la oreja de Jenkins. 1743