Mensaje Hno. Isaías Rodríguez A.

Dignos de Arrepentimiento Título Frutos Dignos de Arrepentimiento

Introducción Mateo 3… Juan Bautista “Y salía a él Jerusalén, y toda Judea, y toda la provincia de alrededor del Jordán, y eran bautizados por él en el Jordán, confesando sus pecados.”

“Haced, pues, frutos dignos de arrepentimiento.” Texto Mateo 3:7-11 “Haced, pues, frutos dignos de arrepentimiento.”

¿Cuáles son esos frutos dignos de arrepentimiento? Interrogación ¿Cuáles son esos frutos dignos de arrepentimiento?

¿Puedo ver en mi vida este ‘fruto digno de arrepentimiento’? Transición Pregúntate: ¿Puedo ver en mi vida este ‘fruto digno de arrepentimiento’?

Digno de Arrepentimiento I. El Primer Fruto Digno de Arrepentimiento A. Consideremos el Contexto 1. ¿Quiénes eran los fariseos? 2. ¿Quiénes eran los saduceos? B. ¿Y cuál era el motivo que les hacía venir a Juan el Bautista? 1. Dice que “…venían a su bautismo” 2. El bautismo de Juan era un bautismo que trascendía

Digno de Arrepentimiento I. El Primer Fruto Digno de Arrepentimiento C. ¿Cuál fue la acusación de Juan contra fariseos y saduceos? D. ¿Cómo se manifiestan esos frutos en nuestra vida? 1. El Inaceptable = Orgullo 2. El aceptable = Humildad E. ¿Cuál de estos frutos estás viendo en tu vida?

Digno de Arrepentimiento II. El Segundo Fruto Digno de Arrepentimiento A. Todos mostramos una actitud peligrosa ante la necesidad del arrepentimiento. B. ¿No hay prisa realmente? ¿Acaso no sabes lo que te espera si llegaras a morir sin arreglar tus cuentas con Dios?

Digno de Arrepentimiento II. El Segundo Fruto Digno de Arrepentimiento C. ¿Cuál sería el fruto digno de arrepentimiento sugerido por el texto? D. ¿Cómo se manifiesta en nuestra vida este fruto ‘digno de arrepentimiento’? E. ¿Estás viendo en ti este fruto ‘digno de arrepentimiento’?

Digno de Arrepentimiento III. El Tercer Fruto Digno de Arrepentimiento A. “por tanto, todo árbol que no da buen fruto es cortado y echado en el fuego.” B. Las encuestas no encuentran diferencias significativas entre creyentes y no creyentes por lo que toca a buenas obras. C. Un fruto digno es una vida transformada…

Digno de Arrepentimiento IV. El Cuarto Fruto Digno de Arrepentimiento A. Depender de uno que es “…más poderoso que yo.” B. ¿Estás tratando de vivir una vida victoriosa con base en tus propias fuerzas? C. ¿Estás tratando de resolver tu problema de pecado, sin Cristo Jesús en tu vida?

Conclusión Si ya eres creyente, ven al Señor y muéstrale tu arrepentimiento por el pecado que te aqueja. Si aún no conoces a Jesucristo como Salvador, ven a él y muéstrale tus frutos ‘dignos de arrepentimiento.’ Dile que venga a tu vida y te transforme.

Oración Final