“Si guardareis mis Mandamientos, permaneceréis en mi amor; así como yo he guardado los Mandamientos de mi Padre, y permanezco en su amor” (Juan 15:10)

Entender la armonía existente entre Cristo y su Ley. Comprender el amor en el que se basa la Ley divina. Practicar los dos sentidos de la Ley: el amor a Dios y al prójimo.

Los Diez Mandamientos fueron dados por Cristo –como parte de la Trinidad– en el Sinaí. Cristo no desvalorizaría o cambiaría algo que Él mismo creara.

La Ley y los profetas La Ley de los Diez Mandamientos se definen en dos sentidos: amar a Dios y amar al prójimo. Cuando examinamos los Diez Mandamientos, vemos claramente en los cuatro primeros el amor a Dios, y en los seis últimos, el amor al prójimo. Todo lo que le fue dado a los profetas se resumen en los Diez Mandamientos, lo que se profundizó cuando Cristo vino. La Ley de Dios se resumen en el amor, y eso es lo que Cristo demostró con su vida aquí en la tierra.

Las “reglas” de amor Jesús guardó todos los mandamientos de Dios, por-que amaba a Dios por encima de todas las cosas. Obedeciendo a Dios es como le demostramos nuestro amor a Él. Jesús fue el Ejemplo de cómo debe guardarse la Ley. La Ley expresa el carácter de Dios, y Dios es Amor.

Todas las cosas a todos los hombres Cristo dejó el Cielo y vino a nacer como un humilde ser humano. ¿Cómo esto nos hace entender el sentido del sacrificio y el amor? Pablo entendió el amor que Cristo siente por todos. Pablo usó el amor de Cristo para alcanzar a todos los que pudo. Jamás dejó de guardar la Ley de Dios, puso en práctica esa Ley, sin permitir que nada la comprometiera.

¿Cómo podemos poner en práctica lo que nos enseñó Cristo? Cumplir la Ley de Cristo ¿Cómo podemos poner en práctica lo que nos enseñó Cristo? Dependemos de la misericordia divina, y esta es una verdad que demos transmitir a todos. Debemos amar así como Cristo nos amó. Al andar bajo la Ley, llevaremos al pecador arrepentido a hacer lo mismo.

Cristo se valdrá de la Ley de amor para juzgarnos. Ley y Juicio Cristo se valdrá de la Ley de amor para juzgarnos. El juicio de Cristo será plenamente justo porque Él se familiarizó con la experiencia humana. Al guardar la Ley expresamos nuestro amor a Dios, y la voluntad de vivir a su lado, pues Él es la propia Ley.

La vida de Cristo aquí en la tierra demostró la práctica plena de la Ley. Al guardar la Ley, demostramos amor a nuestro Dios y a nuestro prójimo. La Ley se resumen en el Amor, y el Amor se resume en Cristo.

Adaptación gráfica y textos en español: Coordinación: Departamento de Escuela Sabática de la Unión Sur de Brasil Textos: Pr. Cayan Lucas Oenning de Carvalho Distrito de Vista Alegre - Curitiba Asociación del Centro del Estado de Paraná (Brasil). Programación visual: Adaptación gráfica y textos en español: Rolando Chuquimia Distribución: RECURSOS ESCUELA SABÁTICA © http://ar.groups.yahoo.com/group/Comentarios_EscuelaSabatica http://groups.google.com.ar/group/escuela-sabatica-ppt?hl=es www.escuela-sabatica.com Recursos Escuela Sabática