PUNTO DE PARTIDA ¿POR QUÉ nos planteamos este tema?. ¿QUÉ queremos transmitir a nuestros hijos hablando de esto?. ¿QUÉ necesitamos saber o madurar un poco más?. ESQUEMA DEL DOCUMENTO: 1.- Tener claro lo que queremos transmitir, de qué queremos hablar, qué pretendemos comunicar al hablar de este tema. 2.- Partir de la realidad y necesidades de nuestros hijos. 3.- Creación de una atmósfera relajada. 4.- Tomar la iniciativa y/o aprovechar coyunturas favorables. 5.- Dar informaciones precisas, objetivas y claras. 6.- Compartir nuestros valores y fomentar los valores de nuestros hijos. 7.- Toma de decisiones. METODOLOGÍA: Planteamientos teóricos – Dinámicas – Reflexión.

0.- ¿POR QUÉ HABLAR DE SEXO CON LOS HIJOS? 1.Porque hablar de ello es hablar de nosotros mismos: tiene que ver con nuestra identidad, nuestro desarrollo. 2.Porque al hacerlo les ayudamos a entender sus cambios, deseos, sentimientos, relaciones interpersonales y afectivas. 3.Porque necesitan clarificarse, orientar sus apetencias de forma autorrealizante y respetuosa con las demás personas: ello será clave para sus relaciones sexuales. 4.Porque es preferible que sepan de esto por nosotros que no por otros medios nada educativos y sí muy manipuladores, parciales e “interesados”.

1.- ¿QUÉ QUEREMOS LOGRAR CON ESTE DIÁLOGO? OPCIONES: A.Covencerles de que es “muy pronto para hablar de estos temas”. B.Si tiene ya cierta edad y sólo para evitar embarazos no-deseados o E.T.S…. convencerles de que no tengan ningún tipo de relación sexual. C.Administrarles recursos para que pueda evitar esos embarazos no deseados y/o E.T.S. dándole informaciones sobre el cómo usarlos siempre que les apetezca. D.Contribuir a que tengan un desarrollo afectivo-sexual sano, responsable, maduro o adecuado a su verdadero sentir y satisfactorio.

1.2.- HABLAR CLARO: Lo primero que debemos hacer es “examinar nuestras propias convicciones al respecto, dialogar en la pareja sobre ello y compartir unos mismos criterios educativos con los hijos” CLAVES ESENCIALES: A.Considerar la sexualidad como una dimensión más de la persona que tiene un sentido trascendente: no consiste todo en gozar del sexo ni es vanal cualquier gesto de contenido sexual. B.“Hablar de sexo” no tiene porqué ponernos nerviosos ni ridículos: pensemos que nuestros hijos están ahí por nosotros; no debe ser un tema “tabú” ni extraño sino algo de lo que se pueda hablar con toda naturalidad.

2.- PARTIR DE LA REALIDAD Quienes antes sólo eran niños ahora… se despiertan a una enorme efervescencia de “nuevas formas de relacionarse, nuevos sentimientos, actitudes,…” ¿POR DÓNDE EMPEZAR?: La educación afectivo-sexual empieza en el mismo instante en que somos concebidos y nos pasamos la vida entera madurando en ella, pero… ¿qué hacer y cómo a esta “edad del pavo”?. a)Nunca rehuir una pregunta, un comentario,… b)Partir de sus propios intereses, dudas, miedos,… y hacer de ello excusa para un amplio y profundo diálogo.

2.2.- ¿CÓMO CONTINUAR?: Predisposición. Actitud de acogida. Escucha activa. Interés por la persona. Interés por la cuestión. Profundización. En la etapa adolescente nuestros hijos buscan su afirmación, consistencia en sí mismos, tener sus propios criterios,… pero al mismo tiempo se sienten inseguros y necesitan contrastar sus marejadas internas y hallar seguridad. Razón de más para: - Establecer un diálogo honesto. - Ofrecer opiniones coherentes con la realidad.