San José de Calasanz (1556-1648)
Fundador de las Escuelas Pías, es el padre indiscutible de las escuelas populares de todo el mundo cristiano, creador de la escuela primaria y uno de los más profundos educadores españoles de todos los tiempos.
"Es necesario padecer en la tierra, para entrar en la gloria eterna" "Es necesario padecer en la tierra, para entrar en la gloria eterna". (Lc. 24,26).
Su padre deseaba que fuera militar, pero los religiosos que lo instruyeron en su niñez lo entusiasmaron por la vida sacerdotal, y pidió que le dejaran hacer estudios eclesiásticos. Desde muy pequeño su gran deseo era poder alejar el mal y el pecado de las almas de los demás.
En el colegio se burlaban de él los compañeros, porque les perecía demasiado piadoso, pero poco a poco con su amabilidad los fue ganando a su favor.
El señor obispo de Urgel lo nombró su vicario general, el más alto puesto en la diócesis después del prelado.
Empiezan los dolores: El padre Calasanz tenía una gran fuerza y un día se echó sobre sus espaldas una pesadísima campana y se subió por una escalera para llevarla a la torre. Pero la escalera se partió y él cayó con la campana y se rompió una pierna. Duró varios meses en cama entre la vida y la muerte y desde entonces su falta de salud lo hizo sufrir mucho. Pero los mayores sufrimientos le iban a llegar de otra manera totalmente inesperada.
El 25 de agosto del año 1648, a la edad de 92 años pasó este gran apóstol a la eternidad, a recibir el premio de sus grandes obras apostólicas y de sus muchísimos sufrimientos.
Actualmente, en nuestro municipio, disponemos de un centro de Educación primaria, en honor a San José de Calasanz
Muchas asociaciones como los grupos Scout, tienen el nombre, o algunos lemas de Calasanz