Psicología del Desarrollo I LOS ELEMENTOS FUNDANTES DEL DESARROLLO PSIQUICO Prof. Lic. Leandro M. Sánchez USAL – Sede Pilar 2015

Pulsiones P. del Yo: P. Sexuales: Primera polaridad (1905(1911)) Interés – Objetos del mundo exterior Egoísmo – el propio yo P. Sexuales: Libido objetal Libido yoica Segunda Polaridad (1920) P de Vida P del yo Conservación de la especie Conservación del yo Interés Egoísmo P sexuales Libido objetal Libido yoica P de muerte

INTERES Energía que inviste las representaciones pertenecientes a las pulsiones de autoconservacion del yo. Corresponden en parte al YRI, el que reconoce la realidad rápidamente.

Aparato psíquico

Yo y la libido Yo y el Superyó Yo y la realidad Para Freud todo desenlace psíquico debe ser entendido como producto entre: Yo y la libido Yo y el Superyó Yo y la realidad

El conflicto del yo con la libido nos brinda dos ejes fundamentales a partir de los cuales podemos plantear una teoría del desarrollo psíquico. (Freud, 1911)

LIBIDO Energía psíquica sexual. Transformación que sufre la cantidad de excitación de la energía sexual somática. Al superar cierto umbral, penetra en el aparato psíquico e inviste las representaciones. Entonces se vuelve psíquica y se originan los deseos libidinales.

Si la pulsión se define como un concepto límite entre lo somático y lo psíquico, la libido pertenece exclusivamente al terreno psíquico. "En psicoanálisis, libido significa en primer término la fuerza (concebida como cuantitativamente variable y mensurable) del las pulsiones sexuales... ". (Freud, 1924)

Cuando invista las representaciones-cosa del inconsciente, la libido se desplaza de representación a representación en una forma bastante libre regida apenas por las leyes de la asociación (contigüidad, analógica oposición), formando condensaciones y desplazamientos entre y con las representaciones.

Cuando pasa al preconsciente la libido inviste las representaciones-palabra y alcanza así un nuevo nivel de ligadura, por lo que toma estrictamente las características de energía ligada, es decir como fuerte investidura y débil desplazamiento.

Lo son del Yo o Narcisista, o Lo son de los objetos La libido constituirá entonces la energía sexual psíquica o representacional. Estas representaciones pueden ser de dos tipos: Lo son del Yo o Narcisista, o Lo son de los objetos

LIBIDO YOICA O NARCISISTA La libido que inviste al Yo constituirá la libido yoica o narcisista. En el adulto se satisfará principalmente complaciendo al Ideal del yo merced a lo que aumentara la autoestima. (en parte del narcicismo infantil, en parte de la omnipotencia corroborada por la experiencia, o sea cumpliendo con el ideal, los éxitos; y por ultimo proveniente de los objetos, el ser querido)

La libido narcisista previa a la instalación del superyó y con un yo en formación, se satisfacerá principalmente en el juego autoerótico con las propias zonas erógenas y, luego de los primeros niveles de reconocimiento del objeto como fuente de placer en el vinculo objetal (amor a los padres), con los que en parte va deviniendo libido objetal

La libido narcisista en ínfima parte era objetal desde un principio (las zonas erógenas se estimulaban primero desde el objeto), por su apuntalamiento en la satisfacción de las pulsiones de autoconservacion del yo (por lo tanto no sexuales, no provistas de libido sino de interés)

Sobre las pulsiones de autoconservación va surgiendo el plus libidinal que devendrá en la investidura de las representaciones de los objetos, reconocidos paulatinamente fuentes del placer.

LIBIDO OBJETAL Es la que reconoce al objeto como fuente de placer. El placer ofrecido por el vinculo objetal supera aquí la angustia narcisista de castración que implicaba en la infancia aceptar la diferencia sexual.

YO Instancia, institución y estructura psíquica unificadora y totalizadora del aparato psíquico FREUD lo describió a lo largo de su obra de distintas maneras, atendiendo tanto a los múltiples aspectos que posee como a las diversas perspectivas desde las cuales puede ser visto.

- 1 - Yo construido con representaciones, que se forma paulatinamente a medida que van sucediendo las experiencias que dejan las huellas que ulteriormente devienen en ellas (primero Rep-Cosa, cuando aprende el lenguaje, Rep-Palabra, las que se constituirán en su medula) Las experiencias principales son las vivencias de satisfacción y dolor, las dos formas principales de vínculos con el objeto. Es un Yo inhibidor

- 2 - Consideremos el desarrollo del Yo desde un punto de vista mas ligado con la problemática de la distinción YO-OBJETO. De entrada hay un Yo que reconoce las diferencias entre el yo y el mundo exterior. Es el yo realidad inicial.

Si ante un determinado estimulo basta para dejar de sentirlo un pequeño movimiento, ese estimulo no es yo. Si con ningún movimiento la sensación cede, ésta nos pertenece, es Yo.

Respecto a las pulsiones sexuales, no se acepta así sin mas al objeto como perteneciente al mundo exterior, especialmente si es la fuente de placer, simplemente el objeto pasa a ser considerado el Yo o una parte de él. Por otro lado, todo lo que produce displacer o es indiferente, es considerado mundo exterior. Se constituye así el Yo placer purificado.

Desarrollo En numerosas oportunidades Freud destaco que la teoría psicoanalítica es una teoría que toma en cuenta el desarrollo, aunque su modo de entender este termino no consiste en considerar, ingenuamente, una sucesión lineal de elementos que van desplegando como consecuencia de una maduración progresiva.

Tampoco consiste en una mera descripción de las estructuras sucesivas de las cuales derivan aquellos fenómenos. La teoría freudiana toma en cuenta el hecho de que la constitución de las estructuras psíquicas no siguen un proceso lineal.

Se trata de una secuencia de acontecimientos que no guardan una correlación estricta con la cronología. Sino que suponen distintos momentos en la estructuración del aparato psíquico. Son momentos lógicos, no cronológicos y el pasaje de uno a otro de estos momentos, de un sistema a otro, se compara con una traducción. Freud alude, respecto a la constitución de las estructuras psíquicas, a un proceso de generación del sistema de las representaciones, tal como lo afirma en 1896 (Carta 52)

A partir de estos conceptos referidos a estratificaciones sucesivas, transcripciones que se siguen una a otras, correspondientes a distintos momentos de nuestra vida, rescrituras, “fueros”, diferencia la defensa normal de la patología, analiza la eficacia de los desarrollos de afectos para el surgimiento de las defensas y valora el concepto de lo “a posteriori” y la importancia de la sexualidad en la etiología de las neurosis.

Distingue los estratos de huellas mnémicas por su contenido, pero también por su organización formal, por las relaciones que rigen en cada sistema. Pero además, tal como lo acabamos de transcribir, estos estratos formales diferentes surgen en periodos sucesivos. Su emergencia hace necesaria la traducción del material anterior en los términos formales del nuevo sistema.

Esta hipótesis acerca de las estratificaciones sucesivas nos posibilita entender la evolución del aparato psíquico en términos de la instalación de nuevas leyes, nuevas lógicas para operar con los recuerdos, para reordenarlos, para retranscribirlos.

La temporalidad desde la cual es necesario pensar el desarrollo según la teoría psicoanalítica, supone, algo diverso de las hipótesis evolutivas tradicionales. Implica la idea de fijación, de la permanencia de las estructuras previas una vez que las posteriores se han constituido, y también la idea de la anticipación, es decir que ciertos desarrollos posteriores vienen preparados desde una formalidad previa.

Además, es necesario destacar otro concepto, que consiste en lo que Freud llamo retranscripciones, en la eficacia a posteriori que adquieren ciertas huellas mnémicas, cuando al surgir un nuevo estrato de representaciones, ciertas inscripciones previas se vuelven eficaces. Por lo tanto fijación, a posteriori, son conceptos fundamentales en una temporalidad psicoanalítica.

A todo ello es necesario agregar, como lo postula Freud, una historia diferente, ya no referida a las representaciones, a las funciones y a las identificaciones, sino a la erogeneidad, una historia de las pulsiones, cuya sucesión Freud equipara con las irrupciones de lava o estallidos volcánicos cuyas capas luego sedimentan y combinan de modos diversos.

Freud describe una doble teoría acerca del desarrollo del sujeto Freud describe una doble teoría acerca del desarrollo del sujeto. La sucesión de acontecimientos eficaces en la historia determina una trama, guiada por dos vectores: el libidinal el del Yo de cuyo entrecruzamiento derivan ciertos modos de estructuración del aparato psíquico.

Freud describe una doble teoría acerca del desarrollo del sujeto Freud describe una doble teoría acerca del desarrollo del sujeto. La sucesión de acontecimientos eficaces en la historia determina una trama, guiada por dos vectores: el libidinal el del Yo de cuyo entrecruzamiento derivan ciertos modos de estructuración del aparato psíquico.