Otro Paraguay es posible Diseño: JL Caravias

¿Nos preocupamos en serio por ellos? En nuestro país hay todavía mucha gente sin trabajo ¿Nos preocupamos en serio por ellos? Y muchos niños y ancianos con hambre… Y muchos campesinos sin tierra… Y muchas familias sin una casa digna… Y muchos niños sin suficiente escuela… Y muchos enfermos sin atención médica… Y muchos ancianos abandonados… Y muchos jóvenes sin porvenir…

Sus miradas nos cuestionan. ¿Colaboramos eficazmente para que cambie nuestra realidad?

¿Por qué hay tantos pobres Es indignante nuestra despreocupación ante los millones de personas que mueren de hambre en este planeta tan rico. Peor en Paraguay con esta naturaleza tan exuberante… ¿Por qué hay tantos pobres en este país tan rico?

debemos poner sobre la mesa de la familia paraguaya Para poder hacer un país más humano debemos poner sobre la mesa de la familia paraguaya todo el dolor que hay en el país El dolor debe estar más a la vista… Demasiado se oculta la realidad Su presencia no nos debe molestar

Paraguay es un país inmensamente rico. Debiera haber trabajo y prosperidad para todos. Con excelentes tierras, con abundancia de aguas, con un clima y luminosidad de ensueño, con gente alegre y hospitalaria, con una linda Historia… ¿Por qué nos va tan mal? ¿Por qué tanta corrupción? ¿Por qué tanta falta de conciencia cívica? ¿Por qué tanta miseria?

Los principales culpables son los acaparadores de riquezas y poder. Ellos controlan las Leyes y los Medios. Pero también somos culpables nosotros… Los que nos dejamos engañar e idiotizar por ellos. Los envenenados por la resignación y el pesimismo. Los que nos desanimamos ante sus críticas. Los embrutecidos por sus drogas... Todos los que dan su voto a la mafia… Si no nos desenganchamos de sus engaños y esclavitudes, será imposible construir un Paraguay fraterno. El proceso será largo… Empieza ya a caminar… ¡Pero es imprescindible que nos unamos en serio las personas de buena voluntad!

Pero el capital está en manos de muy pocos En este país tan rico podemos acabar con la desnutrición… Y con la deserción escolar… Podemos conseguir atención médica para todos… ¡Podría haber trabajo para todos! Pero el capital está en manos de muy pocos ¡Y se emplea muchísima plata en gastos secundarios y superfluos! ¡Y muchísimo se roba aun! Falta fe y voluntad política para construir un país para todos Pero se puede

Necesitamos auténticos líderes de la no-violencia activa ¡Otro país es posible! Pero no con los métodos de ellos: MENTIRAS Y VIOLENCIAS. Sino en respeto y complementariedad CON VERDAD Y EN AMOR. Desde abajo… Conscientes. Planificadores. Solidarios. En el Gobierno, con honradez y competencia En el pueblo, con acciones directas no violentas… Necesitamos auténticos líderes de la no-violencia activa

Si quieres la paz, no prepares la guerra, ni hagas la «guerra preventiva», ni siquiera la «guerra contra el terrorismo». Elimina el terrorismo original: HAMBRE MISERIA MARGINACIÓN IGNORANCIA Cualquier otra salida no lo es; es una espiral de violencia terrorista. Pedro Casaldáliga

No se puede suprimir la pobreza sin combatir eficazmente Pero no seamos ingenuos: No se puede suprimir la pobreza sin combatir eficazmente la acumulación de riquezas. Los acaparadores han de tener menos, para que los desposeídos puedan tener más… María ya dijo que Dios se alegra cuando los ricos bajan y los pobres suben… El proyecto de Dios es: ¡PROSPERIDAD PARA TODOS! Esta tarea es para todos los que mantienen la capacidad de querer bien.

Hay que ser conscientes de la dignidad de todo ser humano Todos tenemos la misma dignidad y los mismos derechos LO PRIMERO ES CONVENCERNOS DE QUE Sin este cambio de mentalidad nada se puede hacer Hay que ser conscientes de la dignidad de todo ser humano

Otro mundo es posible desde el Dios de Jesús CAMBIAR DE MENTALIDAD, La afirmación de Jesús de que el Reino de Dios está cerca (Mc 1,15), la podemos actualizar afirmando: Otro mundo es posible desde el Dios de Jesús Pero para ello es necesario: Creer esta Buena Noticia. Y cambiar de comportamiento: “convertirnos”. Necesidad de cambio. Posibilidad de cambio. Cambiar yo mismo... CAMBIAR DE MENTALIDAD, SIN PESIMISMOS

Jesús sintió la necesidad de subvertir el mundo. Busca un mundo nuevo, no a través de amenazas, venganzas y castigos, sino a través de la conversión al amor. No en el sentido de destruirlo y crear otro distinto, sino en el de renovarlo desde sus raíces.

Jesús se solidariza radicalmente con todos. Creer en Jesús es creer en la gente. A él lo encontramos en todos, especialmente en los más despreciados

Lo que le hagan a uno de ellos a mí me lo hacen… Jesús está de nuevo encarnado, esperándonos en los mal alimentados, en los juzgados fraudulentamente, En las víctimas de la violencia… En los enfermos sin atención En los indígenas despreciados En niños abusados En mujeres humilladas En los que no tienen trabajo. En los sin-techo, los sin-tierra… Lo que le hagan a uno de ellos a mí me lo hacen… Cuando los desprecian, a mí me desprecian… Cuando no les ayudan, a mí dejan de ayudarme…

La fe en Jesús, sufriente y exigente en los empobrecidos, encierra una maravillosa fuerza social. Qué he hecho por el pueblo… Qué hago por el pueblo… Qué debo hacer por el pueblo, en el que espera hoy Cristo mi solidaridad eficaz…

¿En qué apoyo mi compromiso socio-político? Seamos consecuentes… ¿En qué apoyo mi compromiso socio-político? ¿De dónde saco las fuerzas? ¿Coincide mi estilo de vida con mis principios? La sociedad será otra en la medida en que cada uno cambiemos. ¿Fortifico mi opción crítica -constructiva para que otro Paraguay sea posible?

Se necesitan compromisos concretos. ¿Respeto la dignidad de todos mi subalternos? ¿Combato la corrupción en mi sector de trabajo? ¿Me esfuerzo en ver y comentar lo positivo? ¿Colaboro para que haya justicia para todos? ¿Ayudo a construir los cimientos del futuro? Se necesitan compromisos concretos. Dialoga. Prepárate mejor. Aporta propuestas creativas. Autentifica tu vida. Únete a otros. Actúa eficazmente.

UNIÓN Se necesita: Sin fanatismos En diálogo permanente Fe en la dignidad humana de todos… Fe creciente en el Dios de todos… Fe en las posibilidades humanas de todos… Sin fanatismos En diálogo permanente

Podemos empezar no aceptando propagandas ofensivas. Podemos no dejar que nos ensucien el amor. Podemos recuperar el habla y la utopía… Podemos no convertirnos en viejos amargados… Podemos respirar y abrir los ojos, descubrir las raíces del horror, inventar paz así sea a ponchazos, entendernos con la naturaleza y con la lluvia y los relámpagos y con el sentimiento y con la muerte… Podemos tender manos que ayudan… Abrir puertas entre el corazón propio y el ajeno. Podemos hacer futuro, a pesar de los ruines del pasado y los sabios granujas del presente. Mario Benedetti

Pero no bastan con pequeñas ayudas… Son necesarias propuestas serias, técnicamente planificadas, a largo plazo. Lo nuevo no vendrá más que si hay muchos y muchas que unidos lo sueñan utópicamente, que se esfuerzan por configurarlo como sueño y proyecto, como esperanza... Para construir un país nuevo, en equipos solidarios hay que poner a trabajar la imaginación, la fantasía y las ciencias, la esperanza y la utopía. Soñar en equipos de trabajo otro país posible es un primer paso para engendrarlo y darlo a luz.

Todos los que creemos en el Dios de la Vida, presente en todo ser humano, debemos comprometerse políticamente. La encrucijada mundial y local es tan grave, que se necesitan muchísimos profesionales competentes, honrados y valientes que incidan creativamente en el cambio. Los políticos corruptos que nos dominan ahora sólo desaparecerán si son sustituidos por otros competentes y honrados… Y para tener buenos políticos es imprescindible un pueblo consciente, que no se deje engañar… Un pueblo valiente, que sepa votar, evaluar y exigir…

Es cada ser humano queriendo humanizarse. Sólo socializando bienes mayores -tierra, salud, educación, comunicaciones, igualdad de oportunidades- podrá haber justicia y paz. Ese ‘otro país’ sólo podrá existir en el clima de una cierta igualdad fraterna que comparta el sol y el pan, el aire y la técnica, la vida… Es una lucha simultáneamente espiritual, política, económica, cultural, religiosa… Es cada ser humano queriendo humanizarse. Un mundo donde quepamos todos y todas, según la talla de la dignidad humana. Casaldáliga

La utopía del mundo nuevo ya nos está empujando y atrayendo. Hay que soñar ese otro país posible, e irlo construyendo ya… Quizás las nuevas generaciones superen los prejuicios y los complejos actuales. La utopía del mundo nuevo ya nos está empujando y atrayendo. Nos vamos comprometiendo en equipos de trabajo a hacer del ideal una creciente realidad. No es una sorpresa que nacerá sola, como una flor sin cultivo, ni un milagro que caerá del cielo sin nuestros esfuerzos. Hay que saber planificar en serio, con los pies en la tierra, pero el ideal siempre alto.

¿Cómo cultivo la espiritualidad de mi compromiso? Necesitamos una espiritualidad madura, para poder perseverar en compromisos serios a favor del pueblo. Es importante experimentar el apoyo del Cristo encarnado en el pueblo ¿Cómo cultivo la espiritualidad de mi compromiso?

La felicidad viene de los hambrientos de Justicia Según Jesús… La felicidad viene de los hambrientos de Justicia De los indignados porque el pan no llega a todos De los que con eficacia planifican dignidad planetaria De los que no se dejan corromper De la mansedumbre de las acciones directas no violentas De los que comparten todo lo que son y tienen De los que saben aguantar calumnias y persecuciones De los constructores de la paz universal, la que es fruto de Justicia para todos los seres humanos Ellos son los verdaderos hijos de Dios Ellos son los constructores de un mundo nuevo

Felices los que no se esclavizan al lujo y a la ostentación. Felices si su ideal no es competir, sino compartir. Felices si no les gustan los chismorreos de la Tele, ni atienden sus machacones anuncios. Felices los que jamás compran algo que no les haga falta. Felices si les asquea la pornografía y nunca beben su veneno. Felices los que consiguen que el pan llegue a todos. Felices los que mantienen la frescura de la conciencia y la creatividad. Felices los que saben crecer constantemente en el AMOR.

Bendito el pueblo consciente y organizado, comprometido y solidario. Feliz el pueblo que conoce sus derechos y obligaciones. Digna es la gente que sabe respetar y se hace respetar. La esperanza está en los que no cometen injusticias, ni dejan que se cometan con ellos. En los que no engañan, ni se dejan engañar. Benditos sean si no creen en horóscopos, ni en falsas promesas, ni en la “mala suerte”. Feliz el pueblo que no se deja embrutecer. Dichosos los que preparan un futuro digno para sus hijos. Felices los que se creen siempre capaces de ser mejores… Felices los que creen de veras en el Dios de la Vida.

Dios, Padre y Madre de todos, actúa en ellos. Benditos sean los profesionales competentes y honrados que se comprometen en funciones públicas. Felices los políticos que no se dejan corromper, ni se acobardan ante críticas sucias. Felices si atienden en primer lugar a los más indigentes. Benditas sean las autoridades que sirven de veras al pueblo. Honor para los congresistas que promueven leyes justas para todos. Bendecidos sean los jueces que no se dejan comprar. Benditos los que construyen cimientos para el futuro del país. Felices los que educan al pueblo para que sea justo. Gratitud a los que promueven energías alternativas. Dios, Padre y Madre de todos, actúa en ellos. Y Dios, agradecido, les sabrá recompensar.

Para quedarnos con sabor bíblico: He visto la humillación de mi pueblo y he escuchado sus gritos; conozco sus sufrimientos. He bajado para liberarlos y hacerlos subir a una tierra que mana leche y miel... Ve, pues; yo te envío... Ex 3,7-10 Amen la justicia, ustedes que gobiernan la tierra, conozcan al Señor según la verdad y búsquenlo con sencillez de corazón. Sab 1,1 Reconozcan que todo el que practica la justicia ha nacido de Dios. 1 Jn 2,29 Esperamos, según la promesa de Dios, cielos nuevos y una tierra nueva en la que reine la justicia. 2 Pe 3,13