Jesucristo, una presa difícil: los debates cristológicos del siglo V

Presentación del tema: "Jesucristo, una presa difícil: los debates cristológicos del siglo V"— Transcripción de la presentación:

1 Jesucristo, una presa difícil: los debates cristológicos del siglo V
                                                      Templo de Aghios Georgios, Tesalónica Plano de la antigua basílica de San Pedro, Roma Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos

2 Índice El imperio romano de Oriente durante el siglo V
Villas romanas en Éfeso Índice El imperio romano de Oriente durante el siglo V El concilio de Éfeso (431) Las tensiones inter-eclesiales y el ‘latrocinio’ de Éfeso Buscando un lenguaje adecuado: Calcedonia (451) La problemática del mundo latino: el ascenso de Pedro y la pérdida de Occidente Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos

3 Constantinopla se protege
Durante la primera mitad del siglo V, la corona de la Nueva Roma la tiene Teodosio II ( ), nieto del emperador del mismo nombre e, igual que él y el resto de su familia, fuerte defensor de los dogmas trinitarios (incluso persiguiendo judíos) Teodosio II será recordado como el primer gran compilador del derecho romano promulgado después de Constantino y, especialmente, por las valiosas murallas que rodearán la ciudad de Constantinopla y que la protegerán de los ataques de pueblos recién llegados a los Balcanes permitiéndole sobrevivir por siglos, después de la caída de la antigua Urbe romana Ciertamente, para lograr la estabilidad para construir y gobernar, este emperador sobornó a los invasores hunos con grandes pagos de oro, aceptó la intervención de mercenarios godos y germanos cerca de la Corte y, prácticamente, abandonó al Augusto de Occidente y a la ciudad de Roma a su suerte Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos

4 La dinastía de Teodosio: defensores de la Trinidad
Moneda con la efigie de Aelia Pulcheria, Pulcheria, hermana de Teodosio II, será la piedra de apoyo para Cirilo de Alejandría y su lucha contra el patriarca Nestorio de Constantinopla, hecho que abrirá la puerta al primer gran concilio cristológico (Éfeso 431). Paradójicamente, la esposa del emperador apoyará el bando monofisita después del concilio de Éfeso como rechazo al influjo de su cuñada Debido a que Teodosio no tiene descendencia, Pulcheria, a pesar de su voto de virginidad, aceptará casarse con el general Marciano para favorecer una transición pacífica a la muerte de su hermano ( ). Resultando, este general, una opción excelente tanto por su buen manejo administrativo como por su celo para proteger el imperio Marciano vivirá, también, el concilio de Calcedonia. Por los resultados, pareciese que Alejandría y Constantinopla (Antioquía) no eran piezas fáciles para reunir. El cuarto concilio terminará con una enorme polémica y el primer gran cisma dentro de la Cristiandad (origen de las llamadas iglesias orientales: etíope, eritrea, siria, copta, siro-malankar, armenia) gestando un conflicto con connotaciones políticas también Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos

5 Índice El concilio de Éfeso (431): compartir resultados de lectura
Icono conocido como Theotokos Blachernitissa Índice El imperio romano de Oriente durante el siglo V El concilio de Éfeso (431): compartir resultados de lectura Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos

6 María en el centro de la discusión: concilio de Éfeso (431)
Díptico de mármol al modo de las placas romanas Representando a Cristo y a María, del siglo VI Retomando una discusión entre escuelas: Antioquía (y un extraño aristotelismo) contra la neoplatónica Alejandría y su necesidad de unificar para no caer en herejías Nestorio critica el empleo del término “madre de Dios” aplicado a María... Tras este comentario está la visión antioquena: María es madre de Jesús, Dios no puede tener progenitora. Notemos el énfasis en la precisión lingüística y en la distinción Cirilo de Alejandría, apoyado por los legados romanos, insistirá en la “comunicación de personas” ¿Cuál es el fondo antropológico de la discusión? ¡dos tendencias cristológicas! Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos

7 Las limitaciones del lenguaje
Tanto Nestorio como Cirilo se sienten custodios de la ortodoxia; ambos, menos santamente, defienden los derechos patriarcales de sus sedes. Más aún, tanto el patriarca constantinopolitano, pero estudiado en Antioquía, como el alejandrino, buscan apoyo del obispo de Roma (Celestino I) Ahora, ¿podrán los latinos captar todos los matices y diferencias entre naturaleza, esencia, sustancia y persona? (explicar partiendo de la lectura) El mal karma de Nestorio: desde malas traducciones hasta el temperamento de Cirilo, todo el proceso celebrado en durante el tercer concilio (Éfeso) condujo a la condena de Nestorio y su posterior exilio en un oasis (¡en tierras de Cirilo de Alejandría!) ¿Defendía Nestorio dos personas en Cristo en lugar de dos naturalezas?, ¿fue todo un error de interpretación al exagerar la distinción? Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos

8 Índice Las tensiones inter-eclesiales y el ‘latrocinio’ de Éfeso
El imperio romano de Oriente durante el siglo V El concilio de Éfeso (431) Las tensiones inter-eclesiales y el ‘latrocinio’ de Éfeso Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos Biblioteca de Celso, Éfeso

9 Un concilio sin terminar...
La condenación a Nestorio concluyó los asuntos inmediatos del Concilio pero, la parte doctrinal quedó un tanto en el aire. Ahora, el tema a discutir ya no es la Trinidad sino la naturaleza de Jesús-Cristo. Por poco más de diez años, las escuelas de Antioquía y Alejandría parecían acercarse teológicamente. Muy probablemente, gracias a la moderación y prudencia de los patriarcas de Constantinopla Para el 448, el patriarca Flaviano se topa con la crítica y la oposición del archimandrita Eutiques. Éste, protegido por el favorito del emperador y teológicamente respaldado por Alejandría (y su tendencia a la fusión de naturalezas), decide que las definiciones de Éfeso se quedaban cortas y logra que Teodosio II convoque un segundo concilio en la misma ciudad (explicar con lectura) Durante el concilio el patriarca de Alejandría se encarga de quitar a Flaviano y al obispo de Antioquía, y se niega a escuchar la carta enviada por el obispo de Roma (¡a quien el obispo de Jerusalén, excomulga!) Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos Icono del monasterio en el Sinaí

10 Recurriendo a Roma... El siglo V, que presenció el fin del imperio romano de Occidente, atestiguó la transformación de los obispos romanos en referencias de facto para la población de la ciudad A Celestino I ( ) no le resultó nada sencillo verse involucrado en los pleitos cristológicos entre Nestorio de Constantinopla y Cirilo de Alejandría Años después, sin embargo, los tiempos habían cambiado. Desde el año 440 ocupaba la sede de Pedro, León I. Hans Küng ha llamado a León I Magno ( ), el “primer papa auténtico”. Su visión jurídica y su fascinación por su educación romana le trasformarían en el primer “pontífice máximo” de la Iglesia cristiana León tenía una clara visión de un modelo trinitario y cristológico: desde antes de ser obispo había denunciado errores pelagianos, maniqueos y priscilianistas entre creyentes italianos y galos Además, ya como obispo, se veía como sucesor de Pedro y cabeza de una sola y única iglesia, tratando de regular las prácticas de sedes tan distantes como Iliria o Mauritania. Teniendo ya, sus primeros roces, con Alejandría Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos

11 El primado romano... Pedro aprende teología
A diferencia de otros occidentales, León parece más sutil en su visión cristológica; así lo demuestra su Tomo a Flaviano de Constantinopla. En ese escrito, el papa apoya la condenación del sínodo contra Eutiques y su tendencia monofisita o miafisita Con horror se entera de la resolución del segundo concilio de Éfeso (449) de defender a Eutiques (archimandrita) y de deponer al obispo Flaviano y a algunos otros obispos de la ‘escuela’ antioquena. Se dice que el papa, al enterarse, calificó a la reunión conciliar de latrocinium (robo) La salvación llegará con la muerte del emperador y la sucesión en manos de Pulcheria. El Tomo será leído en Constantinopla y reconocido; la primacía romana parece imponerse (frente a una iglesia que parecía dividirse) El concilio de Calcedonia, validado y reconocido por León, será el siguiente paso en este ascenso disciplinar y teológico del sucesor de Pedro. Aunado a la fama (¿merecida o no?) de que el obispo de Roma había impedido el paso de Atila hacia la ciudad y había salvado del saqueo a la Urbe Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos

12 Índice Buscando un lenguaje adecuado: Calcedonia (451)
Panel de sarcófago, s. V Crucifixión y muerte de Judas Índice El imperio romano de Oriente durante el siglo V El concilio de Éfeso (431) Las tensiones inter-eclesiales y el ‘latrocinio’ de Éfeso Buscando un lenguaje adecuado: Calcedonia (451) Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos

13 “Pedro habló por boca de León” y con ayuda del emperador
La postura imperial tuvo la ventaja de que forzó a los participantes a redactar de modo indiscutible su fe en Cristo (exponer con lectura y buscar precisión dogmática actual) que básicamente repetía lo que decía León. Si bien, al concluir se añadió el famoso canon 28 sobre la dignidad de la sede de Constantinopla, evidentemente, rechazado por Roma La confesión de Calcedonia: “En comunión con los Santos Padres, nosotros unánimemente enseñamos y confesamos al único y mismo Hijo, nuestro Señor Jesucristo: perfecto en divinidad y perfecto en humanidad, verdaderamente Dios y verdaderamente hombre, en su alma racional y en su cuerpo; consustancial con el Padre en su divinidad y consustancial con nosotros en su humanidad, en todo menos en el pecado. Engendrado por el Padre antes de todos los siglos en cuanto su divinidad y, en estos días, por nosotros y por nuestra salvación, nacido en cuanto su humanidad de la virgen María, Madre de Dios. Confesamos que uno y el mismo Cristo, Señor, e Hijo unigénito, debe ser reconocido en dos naturalezas sin confusión, cambio, división o separación (in duabus naturis inconfuse, immutabiliter, indivise, inseparabiliter). Distinción de naturalezas que no desparece por su unión sino que el carácter propio a cada una de esas naturalezas fue preservado al unirse en una sola persona (prosopon) y una hipóstasis” Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos

14 Los cánones de Calcedonia
Mientras los obispos tratan de imponer orden en la estructura eclesial delimitando sus área de influencia, procurando someter a clérigos y monjes a la disciplina de la diócesis, un grupo de creyentes opta por romper la unidad con las sedes ortodoxas Los intentos disciplinarios chocarán contra ciertas iglesias locales que, si bien rechazan las afirmaciones de Eutiques, consideran la redacción de Calcedonia confusa o errónea Una vez manifestada la confesión de fe, uno de los legados romanos quiso someter a juicio al patriarca de Alejandría, Dióscoro. Casi la mitad de los 350 obispos presentes se negaron a asistir e, incluso, algunos de los presentes en la sesión, se negaban a condenar a aquel obispo Las crecientes tensiones y acusaciones llevarían, por un lado, a la primera gran ruptura de la cristiandad (entre las iglesias monofisitas y las que sostienen la doble naturaleza de Jesucristo). Por otro lado, a un prestigio creciente de Alejandría entre las iglesias orientales (miafisitas). Si bien actualmente se han abierto canales de diálogo, especialmente entre las iglesias de rito oriental y las iglesias ortodoxas orientales, la comunión no ha sido restablecida Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos

15 Se forja un rostro ¿complejo o deforme?
Del uno y trino... a las dos naturalezas Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos

16 Los cambios dinásticos en Constantinopla
Cúpula del bautisterio arriano en Rávena, Italia Los cambios dinásticos en Constantinopla Aunque Pulcheria había resuelto temporalmente el problema de la sucesión, su fidelidad a su voto no le permitirá tener hijos. Así, desaparece la casa de Teodosio y, una nueva familia asumirá el poder con León I, de origen tracio. La nueva dinastía que gobierna desde la segunda mitad del siglo quinto vivirá en una constante lucha por quitarse de encima los ataques de pueblos ‘bárbaros’ por lo que serán mucho menos exigentes en cuestiones de fe El emperador Zenón ( ) buscará redactar una especie de ‘compromiso de fe’ buscando la reconciliación entre los grupos cristianos a favor y en contra de los cánones de Calcedonia. No olvidemos que dos formas de fe provocan dos formas de adhesión política, debilitando a un ya débil imperio Paradójicamente los nuevos emperadores apoyarán la invasión de Italia por ostrogodos ¡que eran de fe arriana! Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos

17 Motivos ornamentales en el Mausoleo de Galla Placidia
Índice El imperio romano de Oriente durante el siglo V El concilio de Éfeso (431) Las tensiones inter-eclesiales y el ‘latrocinio’ de Éfeso Buscando un lenguaje adecuado: Calcedonia (451) La problemática del mundo latino: el ascenso de Pedro y la pérdida de Occidente Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos

18 Roma para su obispo: un papa para el mundo
León I puede ser considerado el primer papa-político con conciencia de ser primado de toda la Iglesia. Será considerado el salvador de Roma frente a Atila pero, no puede evitar el saqueo de los vándalos en el 455 Mientras tanto, débiles emperadores de Occidente caerán, cada vez más, bajo el influjo de los grupos ‘bárbaros’. Primero, Milán será abandonada por la corte; posteriormente, la ciudad costera de Rávena dejará de ser la cabeza imperial de Occidente Mausoleo de Galla Placidia, Ravenna Los siguientes obispos de Roma (Hilario y Simplicio) verán caer la ciudad en poder de bárbaros en 476. Las antiguas provincias de Occidente se verán envueltas en conflictos entre generales romanos tratando de defenderse y los nuevos grupos arrianos que llegan Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos

19 Guardando las formas: Italia, ¿imperial?
Hemos comentado en sesiones anteriores que la debilidad de Occidente llevó a los últimos emperadores a confiar el mando del ejército a foederati de origen germánico. Uno de estos jefes, Odoaker decidió en 476 quitar la corona imperial a Rómulo; sin embargo, él se sigue considerando un confederado de Constantinopla Los temores en Constantinopla provocaron que el emperador oriental logrará que otro grupo de federados, los ostrogodos de Teodorico, se dirijan hacia Italia y la conquisten ( ) Empero, el respeto mostrado por los invasores al Senado romano, a su administración y al sistema legal, logró que la ciudad de Roma y sus alrededores recuperasen cierta tranquilidad Casi como nota curiosa únicamente: estamos en los tiempos de Benito de Nursia, sin embargo, de él sabremos hasta medio siglo después gracias a los escritos de otro brillante romano, Gregorio, obispo de Roma, apodado el Grande Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos

20 Roma y los bárbaros: un diálogo
Las tensiones entre los mismos grupos ‘bárbaros’ permitirá a los obispos de Roma transformarse en la auctoritas independiente de la potestas política Es interesante notar la velocidad con que Roma se acomoda a la situación: el papa Símaco ( ) recibe la noticia del bautizo de Clovis, rey de los francos, en el credo niceno (no arriano como la mayoría de los bárbaros); asimismo, el papa dialoga y negocia con Teodorico, el nuevo rey godo de Italia Teodorico ( ), ahora ‘rey’ de Italia, sabrá rodearse de dos de los pensadores y escritores romanos más brillantes a pesar de ser él mismo, de credo arriano. Así, nombra primero magister officiorum al filósofo Boecio y, cuando en el 525 sospecha de la traición de este filósofo y lo encierra (probable fecha de composición de su famosa obra Consolatio Philosophiae), el puesto de confianza será ocupado por otro romano y niceno Casiodoro Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos

21 La convivencia Roma y los godos
Es relevante señalar que tanto Boecio como Casiodoro pueden conciliar su fe trinitaria con un soberano de convicción arriana. Las cartas de Casiodoro muestran una constante preocupación por conservar en el poder a los nuevos gobernantes godos Como nota curiosa, durante el primer cuarto del siglo VI, un compañero de Casiodoro, un monje de nombre Dionisio, apodado “el exiguo”, introduce un cambio en la forma de señalar los años (anno domini) que se popularizarán en el siglo siguiente Igualmente, este monje, es el responsable de la primera gran traducción de leyes del griego al latín (servirá de base para la conformación del Derecho eclesiástico medieval) Mientras Símaco ( ) tomaba distancia de Constantinopla arguyendo que “el papa no puede ser juzgado sino por Dios”; pronto veremos al papa Juan I ( ) andar de mensajero de Teodorico en Constantinopla, ¡defendiendo intereses arrianos! Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos Mausoleo de Teodorico en Rávena

22 ¿César impone el orden? Notemos lo paradójico del siguiente decreto:
“El defensor de la Iglesia romana (se refiere al papa Juan II, ) nos ha informado con lágrimas en los ojos que, últimamente, quienes presiden al clero buscan la silla papal ofreciendo largas sumas de dinero a los pobres a cambio de la promesa de respaldarle como candidato.” “Que aún, vergonzoso es decirlo, andan poniendo a la venta los vasos sagrados para conseguir el dinero necesario. Por lo mismo, dejo a su Santidad saber que, por este decreto, que obliga también a todos los Patriarcas y las iglesias metropolitanas (de Italia), confirmamos la sabia ley pasada por el Senado en tiempos del muy santo padre Bonifacio ( ). Por lo cuál todo contrato o promesa hecha por una persona con el fin de obtener un obispado es declarado inválido y nulo” Decreto de Teodorico escrito y conservado por Casiodoro Estamos atestiguando el vicio denominado simonía que tanto daño provocará durante la temprana Edad Media Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos

23 A dos fuegos: el obispo de Roma
Mosaico en la basílica de San Lorenzo, fuera de muros, Roma. El papa Pelagio II ofrece el templo a Cristo A dos fuegos: el obispo de Roma Curiosidad: el papa Juan II (533-35) es el primer papa en emplear “nombre de reinado” debido a que su nombre real era Mercurio, ¿imaginamos un papa católico con el nombre de un dios romano? Los conflictos hereditarios entre los ostrogodos habían trasformado a Italia en un polvorín y permitido a los romanos orientales, ahora bajo el emperador Justiniano el invadir de nuevo la península; los godos solicitarán apoyo incluso de los pontífices (caso del papa Agapito en 536) para interceder y pedir paz en Constantinopla El general Belisario, defensor de Nicea y Calcedonia, mientras tanto maltratará al papa Silverio (536-37), -lo que le provocará la muerte-, e impondrá a un candidato, Vigilio, confidente de la emperatriz Teodora, con la finalidad de firmar un acuerdo que permitiese el acercamiento con los monofisitas Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos

24 El rostro señorial de Jesús: Justiniano
Imagen del buen pastor en el Mausoleo de Galla Placidia El rostro señorial de Jesús: Justiniano En el arte cristiano, simbólicamente, iremos presenciando la transformación del ‘buen pastor’ en una nueva auctoritas señorial A inicios del siglo VI, Justiniano ( ), logrará restablecer el poder militar de Constantinopla. Reconquistará (gracias a sus generales, Belisario y Narsés) buena parte de Italia, partes de España y el norte de África. Todo ello, además, con un gran desembolso económico que, lamentablemente, se cobrará a los habitantes del Imperio En la práctica, Justiniano y su esposa se transformarán en el modelo ‘de corte’ que será proyectado también en el ámbito celestial Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos

25 Así en el cielo El rostro más común de la divinidad cristiana es ahora el de un Emperador (Señor o Kyrios). Incluso en aquellas regiones que no eran parte del Imperio romano Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos

26 Justiniano en los mosaicos que ‘decoran’ los laterales del ábside de San Vital, Rávena
Como en la tierra… El sueño de renovar el imperio irá aparejado, bajo Justiniano, con una intensa actividad de recopilación legal: el famoso Código de Justiniano sentará las bases del derecho canónico posterior Autores de la época, como Procopio, nos dejan testimonio escrito del esfuerzo de Justiniano por embellecer la ciudad de Constantinopla (Santa Sofía, el Gran Palacio). Este mismo autor, sin embargo, no podía evitar criticar al emperador por haberse casado con Teodora, ¡una actriz! Como parte de los incansables intentos imperiales por reconciliar a los partidos monofisitas y a los de Calcedonia, Justiniano quiere forzar a Roma a anatematizar las ideas de Teodoro de Mopsuestia y algunas tesis de Teodoreto de Cyro e Ibas de Édesa Ni en Constantinopla ni en Roma encontrará mucho apoyo pero, todos temen a Justiniano. La condenación forzada únicamente provocará nuevas crisis entre los patriarcados sin lograr convencer a ningún monofisita para integrarse al cuerpo cristiano de nuevo Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos

27 La disputa sobre los Tres Capítulos
En el 553, Justiniano cita a concilio en Constantinopla (segundo en esa ciudad). A pesar de que se condenan algunas afirmaciones de Teodoro, su persona y los otros padres pasan el escrutinio de ortodoxia El sucesor del criticado papa Vigilio, Pelagio I, sobrevivirá con el apoyo de Constantinopla en una Roma en que todos le odiaban Si bien existirán nuevos intentos por lograr conciliar ambas partes de la comunidad cristiana, estamos ante las últimas manifestaciones de crisis dogmática en términos de Cristología Un nuevo intento tratará de defender a Calcedonia mientras se trata de dar por su lado al monofisismo declarando que las dos naturalezas de Jesucristo solamente tenían una voluntad (monotelismo); sin embargo, no se trata de verdaderas discusiones teológicas sino de intentos de acomodos políticos Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos relicario en forma de cruz, del emperador Justino II (568-74)

28 Cubierta de libro con motivos cristianos
¿siglo V? Aviso Nuestra próxima sesión tendremos un examen recuperando lo visto desde el examen anterior Es necesario poner atención tanto a la parte histórica como a la evolución teológica Igualmente, no olvides repasar nuestros vocabularios Los mil rostros de la divinidad Los debates cristológicos