La descarga está en progreso. Por favor, espere

La descarga está en progreso. Por favor, espere

Ciclo C Estamos en el ciclo C. Esto quiere decir que la mayor parte de evangelios en los domingos son de san Lucas. Y decir san Lucas significa decir:

Presentaciones similares


Presentación del tema: "Ciclo C Estamos en el ciclo C. Esto quiere decir que la mayor parte de evangelios en los domingos son de san Lucas. Y decir san Lucas significa decir:"— Transcripción de la presentación:

1

2 Ciclo C

3 Estamos en el ciclo C. Esto quiere decir que la mayor parte de evangelios en los domingos son de san Lucas. Y decir san Lucas significa decir: evangelio donde tiene una prevalencia grande la misericordia.

4 Un modo cómo san Lucas nos presenta la misericordia de Jesús es por algunas parábolas. Quizá la más excelsa es la del “Hijo pródigo”, que se puede llamar del padre misericordioso

5 Esta parábola, de la cual habla hoy el evangelio, tiene dos partes: la 1ª se refiere al hijo menor, el pródigo, y la 2ª al hijo mayor, en quien están reflejados los fariseos y escribas con quienes hablaba Jesús.

6 Estos fariseos y escribas murmuraban entre ellos, porque Jesús acogía y trataba bien a publicanos y otros que creían ellos que eran pecadores. Jesús les contó esta parábola. Recordemos qué pasó con el hijo menor.

7 Es palabra de Dios aquella historia de aquel hijo que a su padre abandonó. Automático

8 Y juntando cuanto le pertenecía, a lejanas tierras un día se apartó.

9 Se olvidó de su casa y de su padre y de Dios se apartó por el pecado.

10 Y recordando la abundancia de su casa, desanduvo el mal camino comenzado.

11 El padre no había perdido la esperanza de verle venir.

12 Y un buen día le divisa polvoriento, demacrado como un pobre peregrino.

13 Padre, he pecado contra el cielo y contra ti.

14 Ya no merezco que me llames hijo tuyo.

15

16 pero el padre lo levanta en un abrazo.

17 Que le pongan los anillos en sus dedos y que coman y que bailen mis criados.

18 Haya fiesta y alegría en esta casa, porque ha vuelto mi hijo arrepentido.

19 Es igual que si muerto hubiera estado y encontrado cuando estaba tan perdido. Hacer CLICK

20 Jesús no era como los “santones” de su tiempo, despreocupados del prójimo, sino que era el hombre misericordioso, que se conmovía con el que se arrepentía, y le gustaba estar con los pobres y sencillos.

21 Con esta parábola quiere Jesús explicar cómo es la misericordia de Dios en su trato, primero con el hijo menor y luego con el hijo mayor.

22 El hijo menor, el pródigo, es imagen del joven insatisfecho, que quiere ser independiente, que se cansa de todo: de su padre y su cariño, del trabajo y la rutina diaria, de las normas establecidas. Y se va de casa.

23 Con tanta juerga y banquetes se le acaba el dinero. El ansia de independencia le ha llevado a la más deprimente esclavitud. El estar con los cerdos significaba lo más bajo a lo que podía caer.

24 Esto pasa hoy con algunos jóvenes que piensan que la droga les va a dar la felicidad; pero al llegar a ser drogadictos e infieles a su fe, quedan como aquel hijo pródigo.

25 Lo que le movía no era lo perfecto, como hubiera sido el amor. Era por necesidad material. Dios admite también estas razones secundarias con tal de poder tener al hijo entre los brazos. Aquel joven se arrepintió y decidió ir a su casa.

26 Es Dios que nos espera vigilante, que perdona rápidamente y olvida pronto, el que es fácil para los abrazos y los besos. Hoy el verdadero protagonista de la parábola es el Padre.

27 en primer lugar respeta al hijo. No ata al hijo que se quiere marchar ni le amenaza. Conoce y comprende al hijo. El amor no esclaviza, no es absorbente. Aunque luego sufre. Muchas son las lecciones que nos da este padre:

28 Sufre, porque el respeto no le lleva a la indeferencia. La marcha del hijo le produce una herida en el alma, herida que se hace más dolorosa cada día que pasa.

29 El sufrimiento no le lleva a la depresión o el desencanto. Si el hijo ha roto con él, él no ha roto con el hijo. No dice: “se acabó”, sino que espera que algún día “resucite”. El amor siempre vigila y espera. Luego espera.

30 Y como vigila, cuando el hijo está aún lejos, lo ve. Más bien podíamos decir que lo intuye. Otras veces lo ha visto con el corazón. Ahora ve que sí es el hijo. Se emociona, se llena de alegría.

31 “Y echa a correr”. Es hombre mayor; pero el amor da agilidad, tiene prisas. Y lo recibe con los brazos abiertos. Le da un abrazo cálido y espontáneo, tantas veces deseado.

32 El hijo se arrodilla queriendo hablar; pero el padre lo levanta y lo llena de besos: tantos como los pecados. Así es Dios. Cuando hay arrepentimiento, Dios devuelve más gracias que pecados ha habido.

33 No sólo le recibe en sus brazos, sino que le abre las puertas de casa de par en par, le devuelve al hijo miserable toda su grandeza, todos sus derechos significados por el vestido, el anillo y las sandalias. Y dignifica al hijo.

34 Así se muestra Dios con el pecador que decide volver a la casa paterna. No sólo volvemos a poder tratar a Dios como Padre, sino que nos da a sentir la alegría que hay en el cielo. Y organi- za una fiesta.

35 La alegría más hermosa es la alegría en el perdón. Automático

36 En el cielo hay mucha fiesta cuando vuelve un pecador.

37 Cuando el hijo se fue lejos, triste el padre se quedó.

38 Y qué inmensa su alegría cuando el hijo regresó.

39 Cada día, cada instante por su ausencia se apenó.

40 Y qué inmensa su alegría cuando el hijo regresó.

41 La alegría más hermosa es la alegría en el perdón.

42

43 La alegría más hermosa es la alegría en el perdón.

44 En el cielo hay mucha fiesta cuando vuelve un pecador. Hacer CLICK

45 Pero la fiesta se aguó un poco cuando volvió de su trabajo el hermano mayor. Dice así el evangelio:

46 Su hijo mayor estaba en el campo. Cuando al volver se acercaba a la casa, oyó la música y el baile, y llamando a uno de los mozos, le preguntó qué pasaba. Éste le contesto: "Ha vuelto tu hermano; y tu padre ha matado el ternero cebado, porque lo ha recobrado con salud. “Él se indignó y se negaba a entrar; pero su padre salió e intentaba persuadirlo. Y él replicó a su padre: "Mira: en tantos años como te sirvo, sin desobedecer nunca una orden tuya, a mí nunca me has dado un cabrito para tener un banquete con mis amigos; y cuando ha venido ese hijo tuyo que se ha comido tus bienes con malas mujeres, le matas el ternero cebado. “El padre le dijo: "Hijo, tú siempre estás conmigo, y todo lo mío es tuyo: deberías alegrarte, porque este hermano tuyo estaba muerto y ha revivido; estaba perdido, y lo hemos encontrado."

47 En este hermano mayor estaban identificados los fariseos; pero también los que creemos que la religión se basa en lo legal, que es simplemente el cumplimiento de un deber. Sobre todo si menospreciamos a quien no lo cumple.

48 Aquel hermano mayor creía que todo estaba en la ley, pero no tenía amor y fraternidad. Y no tenía misericordia.

49 Llega a tal extremo que cuando habla con su padre sobre su hermano, no le llama “mi hermano”, sino “ese hijo tuyo”. Es el pecado de los fariseos: el orgullo, el desprecio, el creerse superior y juzgar a los demás.

50 El padre tuvo que tener más paciencia con el hermano mayor. Y le costó más convencerle. Quizá nosotros nos creemos tan suficientes que tengamos muy difícil una conversión a la vida que quiere Dios.

51 Dios sigue siendo el padre misericordioso con unos y otros. Aprendamos su bondad y misericordia. Y terminemos como nos dice hoy el salmo responsorial: Gustad y ved qué bueno es el Señor.

52 Gustad y ved qué bueno es el Señor. Automático

53 Gustad y ved qué bueno es.

54 Dichoso el que se acoge a Él.

55

56

57 Mi alma se gloría en el Señor.

58

59 Gustad y ved qué bueno es el Señor.

60 Gustad y ved qué bueno es.

61 Dichoso el que se acoge a Él.

62 AMÉN


Descargar ppt "Ciclo C Estamos en el ciclo C. Esto quiere decir que la mayor parte de evangelios en los domingos son de san Lucas. Y decir san Lucas significa decir:"

Presentaciones similares


Anuncios Google