La descarga está en progreso. Por favor, espere

La descarga está en progreso. Por favor, espere

III MLAGROS.

Presentaciones similares


Presentación del tema: "III MLAGROS."— Transcripción de la presentación:

1 III MLAGROS

2

3 GERASENO

4 MÉTODO

5 HISTÓRICO

6 CRÍTICO

7 Gerasa en el mapa

8

9

10 Cementerio de Gerasa

11 Gerasa

12 GERASA: A la falda de un colina

13 Gerasa una ciudad romanizada

14

15

16 Mc. 5,1-20: LOS PUERCOS SUICIDAS
1. ¿En qué “lugares” acontecen los hechos narrados? 2. ¿Hay “conexión” entre los signos de muerte, impureza y demoníacos. 3. ¿Hay signos de “opresión” militar y económica? 4. ¿Hay en el relato elementos “incoherentes”? 5. ¿Por qué “expulsan” a Jesús del territorio? 6. ¿Qué “predica” el geraseno en tierra pagana?

17 ALIENADO (latín alius = otro). Un hombre dividido, disociado entre su propia verdad y el espíritu impuro que le llena.

18

19 “La Legión” los demonios, buscan un refugio entre los “cerdos”, terminan despeñados, ahogándose en el “mar”... Jesús ha limpiado el lugar de demonios.

20

21

22 Este geraseno (pagano: la persona es más que el CAPITAL), con el leproso de 1, 45 (judío: la persona es más que la LEY), es el primer misionero “ad gentes” de Jesús. No ha tenido más iniciación que su propia experiencia de libertad.

23 LEPROSO GERASENO Mundo religioso Persona + L E Y Mundo secular
Persona + CAPITAL

24 Elementos históricos:
Geografía. 2. Mc. 5,20 y 1,45: “Comenzar a predicar”: judío (Ley) y paganos ($). 3. Del exorcismo a misericordia: v

25 ANÁLISIS

26 NARRATIVO

27 Composición narrativa
I. ANÁLISIS DE LA TRAMA Composición narrativa de la trama: dos niveles Hechos (5,1-13) Interpretación (5,14-20).

28 Nivel de los HECHOS Exposición: 5,1-2a, el escenario y al personaje principal. Puesta en marcha del relato: 5,2b-5: iniciativa del endemoniado y descripción de su situación. Escena 1ª: 5,6-10, diálogo del espíritu inmundo con Jesús. ¡Un demonio con pretensiones de exorcista! El exorcismo: de la violencia (gerasenos) al diálogo (Jesús). Escena 2ª: 5,11-13, el final de los cerdos en el mar. Los cerdos era la riqueza del país. Los cerdos y la Legión.

29 INTERPRETACIÓN Escena 3a: 5,14-17, reacción de los porquerizos y de la gente del lugar. a) vinieron a VER qué es lo que había sucedido b) CONTEMPLARON al hombre sentado vestido en su sano juicio a') los que HABÍAN VISTO lo sucedido al hombre y a los cerdos No sólo han visto los resultados sino la forma en que ha actuado Jesús: el modo da a los gerasenos un feedback sobre la ineficacia de sus propios métodos. Este contraste les altera todos los esquemas. Escena 4a: 5,18-20, reacción del endemoniado curado, respuesta de Jesús y final de la historia. 

30 1. Mc 5,1-20 y el paradigma de exorcismo en Mc
MACRO-TEXTO 1. Mc 5,1-20 y el paradigma de exorcismo en Mc De los cuatro casos de exorcismo en Mc, nuestro episodio corresponde al segundo. Los tres primeros se encuentran en la primera parte del evangelio (1,1-8,30) y sólo el cuarto se localiza en la segunda (8,31-16,8). El episodio n. 3, el de la hija de la sirofenicia, hace de eslabón, entre los de la primera parte y los de la segunda.

31 LA SIROFENICIA Mc.7, 24-30

32

33 P A N ¿JUDÍOS? (Mc.6,43) 12 ¿PAGANOS? (Mc.8,8) 7

34 Mc.7: MUJER Mc.6 Mc.8 12 canastos 7 espuertas Reino para Judíos Reino para Paganos

35 a) Mc.5,1-20: Prepara el marco fronterizo entre judío y pagano del episodio de la SIROFENICIA: Si en el episodio de Gerasa Jesús no se pronuncia sobre el paganismo, en el de la sirofenicia éste es el tema que centra el diálogo entre Jesús y la mujer. El exorcismo queda en un segundo plano (la poseída ni siquiera se encuentra presente).

36 b) Mc. 5,1-20 en relación con Mc 9,14-29:
9,14-29: desarrolla el tema de la misericordia. Jesús interpretó el exorcismo del geraseno como misericordia (5,19c). 9,14-29: el padre del niño apela a este mismo sentimiento de Jesús (9,22). Jesús asocia la fe con la práctica de misericordia.

37 RESUMIENDO Los tres episodios pueden colocarse en serie, que evolucionan a medida que avanza la narración del evangelio. De este recorrido puede deducirse que el tercer episodio arroja luz sobre los otros dos. El exorcismo es importante por establecer una relación entre misericordia, palabra y poder sobre los espíritus. 

38 5,18-19: inversión con el esquema vocacional de Marcos: incluye
2. LA ANTI-LLAMADA 5,18-19: inversión con el esquema vocacional de Marcos: incluye iniciativa de Jesús (1,16-20; 2,14), los llamados que dejan familia y trabajo (1,20 y 2,14) la compañía de Jesús.

39 En el episodio del geraseno:
Es él quien toma la iniciativa de seguir a Jesús. Jesús también invierte el esquema, en lugar de aceptar la renuncia a la familia, reenvía al curado a la suya y a su ambiente Para contar lo sucedido: algo que se opone a lo que sucede en otras historias de curaciones: leproso (1,44), hija de Jairo (5,43), sordomudo (7,36), ciego de Betsaida (8,26). 

40 ANTROPOLOGÍA

41 CULTURAL

42 I. VOCABULARIO Y CONTEXTO DEL RELATO

43 El vocabulario, subraya la impureza: territorio pagano (impuro),
el espíritu es impuro, las tumbas, los cerdos... El tema de las normas de pureza se muestra decisivo a la hora de interpretar el relato marcano, como parece confirmar, además, el contexto donde está situado. Veamos la siguiente panorámica:

44 3,7 Jesús se retira a orillas del mar con sus discípulos
3,7 Jesús se retira a orillas del mar con sus discípulos. Cura y expulsa demonios. 4,1 A orillas del mar, enseña: 4,35 el paso a la otra orilla: tempestad calmada 5,1 Jesús y sus discípulos llegan a la otra orilla cura a un endemoniado 5,21 Jesús pasa de nuevo a la otra orilla (judía) y cura a la hemorroísa y a la hija de Jairo 6,1-6a Va a Nazaret: duda sobre él. Hace pocas curaciones y se maravilla de su falta de fe.

45 Primera parte del evangelio (1,1-8,30):
Marcos utiliza el mar y sus orillas como escenario de: las curaciones los exorcismos, la enseñanza y del discipulado. Es ahí donde aparece el tema de las normas de pureza y las separaciones que éstas establecen. Lo hace de forma que queda subrayado narrativamente por la localización de la acción y la enseñanza de Jesús "a orillas del mar".

46 El significado de la tierra y el mar como símbolos del orden y el caos es reemplazado por el simbolismo entre tierra judía y tierra extranjera -debido a la cualidad del mar de Galilea de frontera entre el territorio judío y el pagano.

47 Jesús, hace de mediador entre un extremo y otro, tanto en cuanto:
SIGNIFICADO natural de caos y orden: calma la tormenta [4,39], anda por el mar [6,48], cambiando el caos en orden. SIGNIFICADO de oposición entre tierra extranjera/tierra judía: Jesús viaja de una a otra orilla, alimenta a la gente en una y otra orilla [6,35-44/8,1-9], Sana y exorciza en una y otra orilla [3,7-8]).

48 En Marcos, el mar y sus orillas opuestas se encuentra incluido en otro más amplio como es la oposición entre Galilea y Jerusalén: La oposición de caos/orden va cediendo ante otra que va manifestándose progresivamente como más fundamental e insuperable, la que hay entre Galilea y Jerusalén.

49 Jerusalén aparece como el centro del orden religioso oficial,
Mientras que en Galilea Jesús proclama un nuevo orden que llega a cuestionar al antiguo y que, desde entonces, pasa a ser percibido como el verdadero caos.

50 Esta oposición que se hace evidente en su controversia con los líderes y representantes del orden religioso de Jerusalén, le llevará a la muerte; y, aunque es central en la última parte del Evangelio,

51 Se encuentra anticipada en su enfrentamiento con los escribas, durante una visita que realizan éstos a Galilea, con motivo de un exorcismo (3,22) y la discusión sobre las normas de pureza ritual (7,1ss).

52 Es evidente que ambos hechos suponen un reto al orden establecido representado por los escribas, a la vez que ponen de manifiesto una interpretación alternativa de las normas de pureza por parte de Jesús.

53 Precisamente, en ese territorio fronterizo, tanto a un lado como al otro, es donde Jesús aparece enseñando y curando. La frontera es donde aparecen claramente los criterios de pertenencia que incluyen o excluyen de un colectivo y ordenan la vida de los "propios" frente a los "extraños".

54 Es evidente que la orilla del mar como "frontera" entre lo extranjero y lo propio, entre lo impuro y lo puro, corrobora la intuición acerca de que las curaciones, exorcismos y enseñanzas que Jesús realiza en su entorno están en relación con su crítica al sistema de pureza oficial que establece un orden socio-religioso.

55 La actuación y la enseñanza de Jesús en la orilla, están relacionadas con ese orden que él critica y con el nuevo que proclama como el propio del reino de Dios. La orilla, la frontera, se convierte así en el lugar de la posibilidad más que de peligro.

56 y por lo tanto al orden social.
La enseñanza y las acciones sanadoras de Jesús hicieron surgir, la pregunta por su autoridad, porque, constituyen un reto a las enseñanzas tradicionales sobre las normas de pureza, y por lo tanto al orden social.

57 Este cuestionamiento de la autoridad de Jesús, según avanza su actividad sanadora-exorcizadora y su enseñanza, se convierte en descalificación y en acusación de ser agente de Satanás (actúa por el espíritu de Satanás: 3,22-30). Lo que Jesús propone se ve como contrario al orden establecido y, por tanto, contrario a Dios según la interpretación de quien dicen ser los representantes oficiales cualificados. Una de las actuaciones que más suscita las iras de aquellos representantes oficiales son los exorcismos de Jesús.

58 De los cuatro exorcismos descritos por Marcos, tres de ellos están en la primera parte (1,23-28; 5,1-20; 7,24-30). Mientras el cuarto se encuentra al comienzo de la segunda (9,14-28), donde la acción sigue centrada en Galilea (cc. 1-9) y donde aún resuena el tema de las normas de pureza. Dos exorcismos son realizados a varones adultos (1,23-28; 5,1-20) y dos a niños (niña en 7,24-30; niño en 9,14-28); Dos de ellos se sitúan en territorio pagano o fronterizo (5,1-20; 7,24-30), y otros dos en Galilea (1,23-28; 9,14-28). La acción liberadora de Jesús se ejerce sobre un niño y un adulto galileos, y sobre una niña y un varón adulto paganos.

59 II. ANTROPOLOGÍA TRANS-CULTURAL

60 1. Las posesiones como estrategia indirecta de protesta
Las posesiones afectan sobre todo a ciertos tipos de personas como son las mujeres con grandes cargas familiares, los niños y algunos varones -que se encuentran en situaciones de subordinación y opresión extrema, bien dentro del grupo familiar, bien en el ámbito social o político.

61 MUJERES Las posesiones afectan sobre todo a aquellas que viven una situación familiar caracterizada por grandes cargas familiares, o bien sufren problemas afectivos y relaciónales: jóvenes obligadas a casarse, mujeres que han sido repudiadas o relegadas a segundos y terceros lugares, viudas o divorciadas cuyas vidas se presentan difíciles y sin salida, mujeres estériles, mujeres que viven sometidas a sus suegras o familias políticas, esclavas...

62 VARONES Que sufren posesiones, se dan siempre en menor número: una subordinación extrema y atípica en el grupo familiar y de parentesco, una situación de opresión socio-política como la que se da en el colonialismo.

63 las situaciones opresivas en que se encuentran éstas,
Los demonios que hablan por la boca de las personas poseídas suelen denunciar: las situaciones opresivas en que se encuentran éstas, piden aquello que les falta (ropas, respeto, comida, atención...).

64 Como se entiende que la persona poseída no es responsable de lo que dice o hace porque son los espíritus o demonios quienes se apropian de su persona, ésta puede, sin recibir ninguna sanción, expresar opiniones y juicios que no serían aceptados de otra forma porque suponen una crítica, un reto y una exigencia respecto a los que mantienen el control familiar o social.

65 De alguna forma, la libertad de expresión y de acción aumenta en las personas poseídas, puesto que no van a tomar represalias contra ellas; muy al contrario, en ese estado aumenta el grado de atención recibida, de la que no gozan normalmente.

66 Lo mismo pasa con los NIÑOS, quienes, en este estado pueden protestar por situaciones de opresión, abusos... y expresar a sus padres o tutores mayores lo que de otra forma sería imposible.

67 Consiguen escapar de la situación conflictiva y disminuyen la culpabilidad al proyectar la culpa sobre el espíritu o demonio. Se trata de un mecanismo inconsciente para hacer frente a los problemas. Se da en personas subordinadas que no tienen otra forma de responder a situaciones de opresión, a agresiones y abusos.

68 2. Las normas de pureza y su significación socio-política
Las normas de pureza establecen cuál es el sitio, lugar y tiempo adecuado a cada cosa, acto y persona, según un orden determinado por cada grupo social; por ello, esas normas varían de una sociedad a otra, de una época histórica a otra. Establecen una especie de líneas que delimitan, definen y ordenan la realidad, a la vez que adjudican diferentes valores a cada área.

69 Una estructura social que requiera un alto grado de control de la consciencia mostrará un alto grado de formalidad, una aplicación implacable de las normas de pureza. Cuanto más estructurada, formalista, rígida y jerárquica sea una sociedad, mayor será el control ejercido sobre el cuerpo humano, y mayor la intransigencia respecto al abandono corporal en la vida y en el ritual donde la dimensión social se halla sometida a un control estricto el trance se considerará amenazador y peligroso; cuanto menor sea la tolerancia respecto a los extraños y más estricta sea la vigilancia respecto a las fronteras, mayor será la vigilancia respecto a los límites y a los orificios corporales -qué se come, con quién se casan…

70 El cuerpo físico es un microcosmos de la sociedad
El cuerpo físico es un microcosmos de la sociedad. Así como para expresar jerarquización se utiliza la des-corporeización en las relaciones, también se puede utilizar el cuerpo para expresar la protesta contra ese mismo, sistema social y sus sistemas de clasificación y control o presión: La falta de aseo, la largura de pelo o el descontrol corporal son expresiones de protesta contra el orden social. El trance se entiende como un tipo de descontrol corporal.

71 Se produce una rebelión contra las normas de pureza que establecen las líneas ordenadoras de la sociedad. Aquellos que han dejado de sentir como adecuado, el sistema de clasificaciones públicas, pero siguen experimentando la presión del grupo, protestan de esta forma contra ello. La sociedad ve el cuerpo personal como contrario a los intereses del cuerpo social, éste se convierte en un medio simbólico para protestar contra aquélla.

72 LECTURA DE Mc 5,1-20 DESDE ESTE MODELO
Los síntomas y el diagnóstico El contexto temático en el que se encuentra el relato (1-8,30) y el término "espíritu impuro" que utiliza Marcos, en lugar de “demonio” (Mt; Lc), parecen estar señalando las normas de pureza como clave hermenéutica del texto.

73 Jesús ha curado y ha exorcizado, ha enseñado y ha discutido sobre las normas de pureza en la orilla judía del lago, y ahora se encuentra en la orilla pagana. En el límite, al cruzar la frontera que suponía el lago con ocasión de la tormenta, Jesús ha demostrado su autoridad y su poder al establecer la paz y su orden sobre el caos. Jesús aparece cruzando en varias ocasiones la frontera, los límites (6,45-53; 7,24; 7,31). Y como colofón, aparece discutiendo con los fariseos sobre las clasificaciones socio-religiosas y la ordenación pública a la que daban lugar (7,1-22).

74 Del hombre que sale al encuentro de Jesús se dice que tiene un espíritu Impuro. Está poseído sino por espíritu impuro; es decir, por un espíritu que le hace actuar de forma inadecuada, contraria a las normas sociales. El judaísmo denominaba así a los espíritus o demonios extranjeros y hostiles a las normas de pureza religiosa y moral judías (cf. Zac. 13,1-21 Mc 3,11,30). El mismo Jesús es acusado (3,30) de estar poseído por uno de ellos, por cuestionar dichas normas.

75 La alusión a cadenas, grilletes y a la desnudez, deducida del v
La alusión a cadenas, grilletes y a la desnudez, deducida del v. 15, refuerzan la idea de que este hombre no aceptaba los límites socio-religiosos que establecían las normas de pureza. El caso es presentado como grave porque, después de ver las tentativas de acomodo y sujeción (cadenas y grilletes), había sido expulsado del grupo familiar y social; esto es algo que no se produce en los otros casos de posesión, donde las personas posesas aparecen en el seno de la familia y la comunidad, como sucede con el endemoniado curado en la sinagoga, la hija de la sirofenicia, o el niño epiléptico (1,23-28; 7,24-30; 4,14-28).

76 Por medio de los demonios o espíritus que le poseen, la persona afectada expresa indirectamente y sin peligro las quejas que tiene contra su ambiente. La crítica no debe ser demasiado clara y evidente, y que no adquiera excesivo poder; de lo contrario, el grupo social o familiar pasa a la acción defensiva para eliminar el peligro. Ésta es la situación en la que parece hallarse este hombre: apartado del grupo y marginado a un espacio de ausencia de vida social y religiosa; lo que hace suponer que su queja y su comportamiento eran excesivamente contrarios y peligrosos para el orden grupal. Se trata de un caso de marginación total, producida muy probablemente por un desacuerdo, desacato y rebeldía contra las normas socio-religiosas. Desacuerdo expresado por medio de los demonios y no directamente, pues de haberlo hecho se habría dado su eliminación física.

77 Aunque al principio no se menciona que el poseso estuviera DESNUDO, si se alude a su estar vestido como uno de los indicadores y consecuencias de su curación (v. 15): Un significado profundo porque, en aquel contexto cultural, la desnudez estaba unida con la vergüenza; significaba la falta completa de honor (era castigo de prisioneros, mujeres adúlteras...). La desnudez podía ser también una forma de protesta contra los límites impuestos por la sociedad y, por tanto, contra su ordenación socio-religiosa. Como un muerto social habitaba en el lugar de los muertos.

78 ¿Cuál es la situación sociohistórica en la que puede situarse. G
¿Cuál es la situación sociohistórica en la que puede situarse? G. Theissen piensa que la petición del espíritu impuro (que se llama Legión) se refiere al poder dominador romano, que era quien no quería abandonar la región. La opresión romana sería la causa de esos demonios que oprimen a este hombre y lo deshumanizan. Al pasarlos a los cerdos (alusión de la Legión X Fretensis, estacionada en Siria, el símbolo que aparecía en sus estandartes, el jabalí) que se hunden en el mar, la perícopa de Marcos habría tomado un tono de crítica política al poder colonial romano.

79 Mary Douglas, el poseso y el BANDOLERO tienen una forma parecida, aunque opuesta, de reaccionar ante la situación de injusticia producida por la ordenación social: Ambos están en una posición baja en la línea de las categorías sociales. Ninguno de los dos tiene una conciencia política expresa, pero ambos captan la injusticia y muestran su disconformidad con la organización y las categorías sociales vigentes. Mientras el primero dirige la agresividad hacia fuera y controla el grupo, el poseso la dirige hacia sí mismo y es controlado y anulado por éste. Ambos surgen debido a la ineficacia de las instituciones y su incapacidad para resolver los problemas. Pero, así como la represión brutal de ciertos gobiernos podían evitar, al menos de momento, que apareciera el fenómeno del bandolerismo no podían hacer lo mismo con el de las posesiones, que, al contrario, parecían multiplicarse.

80 Transfiguración en los Evangelios

81

82 Contexto inmediato Monte Padre (cielo) Hijo amado (Jesús) Llano
Escribas “discuten” Discípulos Valle (humano) Hijo (sordo-mudo)

83

84 ENFERMEDADES ORGÁNICAS
FRENTE A ENFERMEDADES PSICOLÓGICAS

85 ( A ) CLASIFICACIÓN DE LOS DESEQUILIBRIOS ANORMALES
1. NEUROSIS Anormalidades poco severas, con origen de factores psicológicos: 1) ansiedad: Ataques agudos de ansiedad; 2) fobias: el miedo provocado por una clase restringida de estímulos, 3) obsesión: pensamientos obsesivos, no deseados; impulsos irresistibles a repetir ciertos actos; 4) depresión: pérdidas como la muerte de uno de los padres o cónyuge, la ruptura de una relación amorosa, etc., 5) histéria: se dividen en reacciones de “conversión” y reacciones “disociativas”; implican síntomas corporales y huidas de los estados normales de conciencia. Se consideran neuróticas cuando son extremas.

86 retirándose a su propio mundo de fantasía,
2. PSICOSIS Anormalidades más severas: son conocidas popularmente como locos. Ha perdido contacto con la realidad: retirándose a su propio mundo de fantasía, experimentar ilusiones ficticias (ser Napoleón) alucinaciones (oír voces imaginarias). Su origen es bio-genético y psico-genético, pueden estar implicados factores biológicos, psicológicos y socioculturales.

87 DESEQUILIBRIOS CEREBRALES ORGÁNICOS
Desequilibrios, debido a una anormalidad en la estructura orgánica o bioquímica de los tejidos cerebrales. Incluyen la mudez, sordera, epilepsia, intoxicación alcohólica, intoxicación por drogas, meningitis, enfermedad cerebral senil, enfermedad de Parkinson, y otras. Su causa es ORGÁNICA, no puramente psico-genética, la mayoría de los casos de posesión de los Evangelios pertenecen a esta categoría.

88 CLASIFICACIÓN DE LAS POSESIONES
1. Muy concretas y definidas Los síntomas son muy claros y la diagnosis se establece explícitamente en los Evangelios. Posesos de esta categoría: mudos (Lc 11,14; Mt 9,32-33), ciegos y mudos (Mt 12,22), sordomudos (Mc 9,25), epilépticos (Mc 9,14-29; Mt 17,14-20; Lc 9,37-43). Todos son ejemplos de lo que los psiquiatras y psicólogos clínicos han clasificado como desequilibrios cerebrales orgánicos.

89 2. Menos concretas y definidas:
Dados los escasos datos, las enfermedades a que aluden son difíciles de diagnosticar y clasificar: Es sólo probable que el endemoniado de la sinagoga sufriera de epilepsia, ya que el demonio «convulsionaba» al paciente haciéndole gritar (Mc 1,26). Lo mismo respecto a la hija de la mujer cananea, ya que Mateo escribió de ambos (la muchacha y el muchacho epiléptico) que sufrían «malamente» o «terriblemente» (15,22; 17,15). Pero esta evidencia es muy leve e inconclusa. El endemoniado de la región de los gergesenos pueda haber sido un psicótico que sufría de reacciones afectivas de tipo maníaco, pero no hay un acuerdo respecto a la diagnosis.

90 Curados por los apóstoles (Mc 6,13) y por otros (Mc 9,38; Lc 9,49).
 3. Vagas y generales Curados por Jesús (Mt 4,24, 8,16; Mc 1, ; 3,11; Lc 4,41; 6,18; 7,21; 8,2; 13,32), Curados por los apóstoles (Mc 6,13) y por otros (Mc 9,38; Lc 9,49). En todos estos ejemplos no sabemos qué enfermedades particulares afligían a esas personas.

91 DESEQUILIBRIOS CEREBRALES ORGÁNICOS
Los desórdenes cerebrales mencionados en los Evangelios: La descripción de la enfermedad del muchacho lunático (Mc 9,14-29) es muy concreta, el muchacho presenta todos los síntomas de un grave ataque generalizado de EPILEPSIA. La epilepsia no es un desequilibrio puramente psíquico. El conocimiento de los cambios patológicos y químicos del cerebro implicados en la epilepsia son reconocidos por los psiquiatras y están de acuerdo en dos puntos principales:

92 1) los factores psicológicos no pueden por sí solos causar la epilepsia.
Ningún epiléptico ha sido jamás curado únicamente por medio de la terapia verbal.

93 2) Causas de epilepsia: lesión cerebral durante el nacimiento o posteriormente durante la vida, defectos congénitos, enfermedades infecciosas en la infancia, meningitis, encefalitis, abscesos cerebrales, infecciones de parásitos, trastornos endocrinos, accidentes cerebro-vasculares y tumores cerebrales. Todas estas causas resultan de afecciones orgánicas o fisiológicas.

94 MUDEZ y SORDERA: Los trastornos más severos del habla son «de origen orgánico». Las lesiones en áreas del hemisferio cerebral provocan pérdidas del habla. En cuanto a la sordera, se deben a una diversidad de causas similares a las de la epilepsia (hereditarias, congénitas, infecciones por virus, etc.) que, producen lesiones en el oído interno. Los datos de los Evangelios no nos permiten asumir que todos los mudos y sordos descritos como poseídos por demonios eran sólo casos de sordera o mudez histéricas.

95 Desequilibrios HISTÉRICOS
Debemos tratar esta categoría de desequilibrios para arrojar luz sobre los llamados casos de posesión. Es habitual subdividir los síntomas de la histeria en dos clases: reacciones de conversión y reacciones disociativas. Los desequilibrios son definitivamente de origen psicogenético, no orgánico.

96 «No hay ninguna patología orgánica subyacente».
Reacciones de conversión La energía psíquica se «convierte» en síntomas corporales. Estos síntomas corporales afectan a la musculatura corporal y a funciones sensoriales tales como las siguientes: parálisis de brazos, piernas, u otras partes del cuerpo; anestesias o analgesias (ciertas partes del cuerpo pierden el sentido del tacto o el sentimiento de dolor); trastornos en la visión y el oído, incluyendo ceguera o sordera; trastornos en el habla, incluyendo mudez y afonía; «nudos en la garganta»; con­tracciones musculares o tics; simulación de falsos síntomas de embarazo, y muchas variedades de impedimentos sexuales, tales como algunos casos de frigidez e impotencia. «No hay ninguna patología orgánica subyacente».

97 Reacciones disociativas
Separación del estado normal de conciencia. Deriva de la idea de que una parte de la «mente», se disocia de otra parte. Tipos de reacción disociativa: amnesia, implica la pérdida de la memoria. Fuga, se da una huida real y física del presente. múltiple personalidad, personalidades distintas se desarrollan dentro de la misma persona.

98 UN CASO DE HISTERIA DE CONVERSIÓN Una joven muchacha, KATE FOX, de 13 años y medio de edad. Fue admitida en el hospital con una parálisis parcial en la pierna izquierda, nerviosismo extremo y marcada falta de apetito. Cuando se le preguntaba por la razón de estas dificultades, la muchacha no encontraba ninguna explicación.

99 Kate comenzó a hablar acerca de la situación hogareña
Kate comenzó a hablar acerca de la situación hogareña. Unos tres años antes de que fuese admitida en el hospital, su madre empezó a tener relaciones con un inquilino de la casa y finalmente huyó con él. Pocos días más tarde, el padre, Kate y sus tres hermanas, encontraron a la madre y la persuadieron de que volviese a casa. Siguió una escena violenta y llena de insultos que hizo que Kate llegase a darse cuenta más claramente de lo que su madre había hecho. También oyó a su madre acusar a su padre de haber flirteado con otra mujer.

100 Las discusiones nocturnas de este tipo que continuaron durante varias semanas resultaban muy enojosas para Kate y sus hermanas. En un momento dado, los padres se decidieron por el divorcio, pero una de las hermanas mayores amenazó con suicidarse, y finalmente cambiaron de parecer. Surgieron otras complicaciones. El inquilino anterior regresó y tomó residencia al otro lado de la calle. El padre le amenazó con dispararle si se acercaba a la casa. Más tarde, un amigo del anterior inquilino amenazó con disparar al padre de Kate, y sobrevino una pelea. Después de todos estos trastornos, al menos superficialmente, las cosas comenzaron a marchar más suavemente en casa.

101 Kate contó que después de estos episodios llenos de tensión no podía soportar pensar en ellos, y se hizo cada vez más retraída e incomunicativa en casa. Al principio, la escuela constituía un alivio, pero antes de un año comenzó a sentir aversión a las relaciones sociales con sus compañeros de clase, probablemente debido a la vergüenza y al pensamiento de que sus amigos se pudiesen enterar o pudieran ya saber algo de su situación hogareña.

102 Se concentraba en sus estudios, pero se volvía temerosa según se acercaba la hora del recreo, y frecuentemente se quedaba en su pupitre y estudiaba mientras los otros niños se iban afuera a jugar. Su parálisis inicial se produjo justo antes de uno de los recreos. El terapeuta, impulsándola a volver a contar los penosos episodios, fue capaz de extirpar completamente sus síntomas en varias semanas. Como se puede ver, estos síntomas, la parálisis inclusive, tenían causas emotivas o psicológicas.  

103 UN CASO MODERNO DE POSESIÓN Y EXORCISMO Psicólogo P. Janet
UN CASO MODERNO DE POSESIÓN Y EXORCISMO Psicólogo P. Janet. Este relato es clarificador. Como el título indica, en siglos anteriores el paciente habría sido considerado sin ningún género de dudas como poseído por los demonios. El tratamiento escogido podría muy bien haber sido el exorcismo eclesiástico.

104 ACHILLES, era un hombre de 33 años cuando fue admitido a un famoso hospital de París. Procedía de una familia algo supersticiosa. Su PADRE había sido acusado de haberse entregado al diablo y de haber recogido un honorario del «enemigo de la humanidad» en un viejo árbol todos los sábados, historia de la que el padre se reía, aunque era de hecho supersticioso.

105 Achilles había sido estudioso, aunque no muy brillante, y había ido al instituto local. Janet acentúa como posibles premoniciones del problema posterior el hecho de que tendía a no hacer amigos, aunque era afectuoso; le molestaba de que los otros estudiantes se metían con él, y de que a veces había tenido dolores de cabeza. A pesar de todo ello, Achilles se estableció en un pequeño negocio al salir de la escuela, se casó a los veintidós años y vivió felizmente con su devota esposa, no habiendo sufrido enfermedades graves hasta algunos meses antes de que entrase en el Salpetriére. Tenía una hija, una niña normal.

106 Achilles llegó al hospital en un estado de furiosa agitación, golpeándose repetidamente, profiriendo blasfemias y hablando a veces con la voz del diablo, que alternaba con la suya propia. J. M. Charcot pidió a Janet que tratase a este paciente, y afortunadamente Janet fue capaz de apreciar las complejidades y asombrosas manifestaciones de una aparente posesión diabólica con el ojo frío de la ciencia y de la razón. El cambio en Achilles había comenzado seis meses antes, después de un viaje de negocios que lo mantuvo fuera de casa durante algunas semanas. A su vuelta, su mujer advirtió que estaba preocupado, melancólico, taciturno y que les prestaba poca atención a ella y a la niña. Después de algunos días tenía dificultades cuando intentaba hablar. Los doctores que lo examinaron no podían encontrar nada anormal, aunque uno de ellos apuntó varias enfermedades, diabetes inclusive. Pronto recuperó el habla, pero comenzó a quejarse de dolor, fatiga, sed e incapacidad para comer. Los medicamentos no surtieron efecto.

107 Un mes más tarde otro doctor concluyó que sufría de angina de pecho
Un mes más tarde otro doctor concluyó que sufría de angina de pecho. Inmediatamente desarrolló todos los síntomas correspondientes, se aficionó a la cama y se hundió en una profunda desesperación. Su dormir era irregular, murmuraba palabras incomprensibles y sus ojos se llenaban de lágrimas. Un día abrazó a su mujer y a su hija como si les estuviese diciendo adiós, se estiró en la cama y se quedó inmóvil. Durante dos días pareció estar al borde de la muerte.

108 Después, repentinamente, se incorporó, con los ojos muy abiertos, y estalló en un espantoso ataque de risa, que duró dos horas, y proclamó que había visto el infierno, a Satanás y a los demonios. Poco después de esto, se ató las piernas y se arrojó a un estanque, del que fue rescatado, y dijo que ésta había sido una prueba para asegurarse de si estaba o no poseso. Continuó en esta condición de posesión diabólica durante algunos meses, hablando constantemente de los demonios que se encontraban alrededor y dentro de él, atormentándolo, forzándolo a blasfemar contra Dios y retorciendo su cuerpo convulsivamente. Después de meses fue llevado al hospital, donde los demonios lo invadían tan horrorosamente como de costumbre.

109 Un rasgo peculiar de su conducta, era que la voz con la que pronunciaba las palabras del diablo era apreciablemente distinta de la voz con la que expresaba sus propios pensamientos. Con palabras de Janet: «Murmuraba blasfemias con una voz de bajo profundo: "Maldito sea Dios", decía, "maldita sea la Trinidad, maldita sea la Virgen"; luego, con una voz de tono más alto y con lágrimas en los ojos: "Yo no tengo la culpa de que mi boca diga todas estas cosas horribles. No soy yo, no soy yo. Aprieto los labios para que no salgan las palabras, para que no se oigan; no sirve de nada, el diablo dice igualmente estas palabras dentro de mí, realmente siento que las dice y que hace que mi lengua se mueva a pesar mío"».

110 Los esfuerzos por ejercer algún tipo de control se enfrentaron con una resistencia extrema. El capellán del hospital no tuvo ningún éxito. Achilles se negaba a hablar con Janet y demostró que era imposible hipnotizarlo. Pero entonces Janet se aprovechó de las distracciones del paciente, colocó un lápiz en su mano, y le susurraba preguntas por detrás. Según la mano comenzaba a escribir respuestas, Janet susurraba: «¿Quién eres?» La escritura contestó: «El Diablo», y Janet replicó: «Entonces podemos hablar los dos», y pidió como prueba de la identidad del diablo que levantase el brazo del paciente contra la voluntad del mismo, y el diablo así lo hizo.

111 Janet estaba ahora en comunicación, por así decirlo, con el diablo, y cuando éste aseguró que era más fuerte que Janet y que no le obedecería, se aprovechó de la «vanidad» del diablo y le desafió a que probase su "poder haciendo que el paciente se durmiese y, más tarde, lo pusiese en situación hipnótica, lo que también hizo. Una vez hipnotizado, Janet pudo comunicar libremente con él acerca de sus sentimientos y de su pasado. Janet se enteró de esta manera de hechos acerca de él que nadie más sabía y que en estado de vigilia Achilles mismo no reconocía. La esencia de estos hechos era que durante su viaje de negocios, hacía seis meses, había sido infiel a su mujer. Había intentado olvidar el incidente, pero se dio cuenta de que era incapaz de hablar. Comenzó a soñar con el diablo con gran insistencia, después de lo cual se encontró repentinamente poseso. 

112 Como Janet explica, las falsas creencias del paciente eran algo más que el simple desarrollo de sus sueños imaginarios y de sus ideas obsesivas. «Es la combinación, es decir, la reacción de dos grupos de pensamientos que dividen su pobre mente; es la mutua interacción del sueño que tiene y de la resistencia de la persona normal.» Continúa brillantemente: «Se tiene que buscar el hecho básico que se encuentra en el origen de la falsa ilusión... La enfermedad de nuestro paciente no estriba en el pensamiento del demonio. Ese pensamiento es secundario y es más bien la interpretación provista por sus ideas supersticiosas. La enfermedad auténtica es el remordimiento».

113 Janet aseguró al paciente hipnotizado el perdón de su esposa, y trajo a ésta a una de las sesiones. La falsa ilusión desapareció exteriormente, pero permanecía en los sueños, de los que a su vez tuvo que ser expulsada. Cuando se publicó el caso por primera vez, en 1894, Janet dijo que el paciente había permanecido curado hasta el momento por tres años. Posteriormente, en el prólogo a Névroses et idees fixes, menciona que Achilles gozaba todavía de buena salud siete años después de la curación.

114 Su conclusión: «El hombre, demasiado orgulloso, se figura que él es el dueño de sus movimientos, sus palabras, sus ideas y de sí mismo. Es quizá en nosotros mismos donde tenemos la más pequeña autoridad. Hay multitud de cosas que operan dentro de nosotros sin nuestra voluntad.» Añadió que los seres humanos tienen una tendencia a consolarse contra la realidad monótona o amenazante contándose bellas historias. En algunas personas estas historias adquieren un relieve extraordinario, hasta el punto de que asumen más importancia que la misma realidad.

115 CONSIDERACIONES Hay que prestar atención a las palabras y acciones de Janet. Dice que la explicación era simple: Achilles sufría de culpa y remordimiento, pero Janet actuó como si los demonios fuesen reales; conversaba con ellos, intentaba enredarlos con diversas tretas, e incluso trajo a la esposa de Achilles para combatirlos mediante el perdón del pecado de su marido. Primer nivel trataba las experiencias de su paciente como si fuesen literalmente ciertas: trataba a los demonios como demonios. Eran reales para Achilles. Segundo nivel consideraba a los demonios como poderosas ideas inconscientes y persistentes, o como sueños, que simbolizan la emoción del remordimiento. Aquellas ideas subconscientes pusieron en evidencia los síntomas, los actos y palabras del paciente.

116 Tercer nivel, consideró la idea obsesiva, la posesión: como una idea fija que es capaz de crecer y de «convertirse» en muchos síntomas y manifestaciones. Tal idea es un entramado de una multitud de imágenes distintas, visuales, auditivas, etc., que, si llegase el caso, podrían ser aisladas por un terapeuta experto, y descompuestas.

117 CONSIDERACIONES MÁS GENERALES:
a) Las neurosis están causadas por factores psicológicos (ideas, emociones, supersticiones, a menudo producidas o incrementadas por acontecimientos traumáticos o aterradores), y pueden ser curadas. b) Se debe hacer una distinción importante entre los posesos de los Evangelios y los posesos y exorcizados en los siglos posteriores, inclusive el actual. La mayor parte de los casos descritos en este capítulo son ejemplos de neurosis, y presentan muchas similitudes con las reacciones histéricas. Esto es particularmente cierto en el caso de Achilles tal y como lo describe e interpreta P. Janet. El procedimiento terapéutico que utilizó, podrían muy bien ser el mejor «exorcismo» para los que se consideran a sí mismos posesos, c) En cuanto a los posesos de los Evangelios, la mayoría sufrían de enfermedades que no tenían nada que ver con las reacciones neuróticas. Muchos sufrían de enfermedades orgánicas debidas a lesiones cerebrales orgánicos (o de reacciones psicóticas). Los desórdenes cerebrales orgánicos, no pueden ser curados únicamente por medio de terapia verbal, y mucho menos por exorcismo. 

118 EL EPILÉPTICO «POSEÍDO POR DEMONIOS» Conclusión del último capítulo: algunas enfermedades consideradas en los Evangelios como «posesión» son enfermedades reales con base orgánica, no de origen puramente «mental» o «psicológico». Este capítulo se concentrará en las narraciones evangélicas relativas al muchacho epiléptico. Como introducción, debemos decir algo acerca de la epilepsia.

119 EPILEPSIA La epilepsia comprende un grupo de desequilibrios caracterizados por episodios pasajeros y recurrentes de pérdida del conocimiento, a veces con movimientos convulsivos producidos por trastornos en las descargas eléctricas de las células cerebrales. Las causas, al menos en los casos más graves, dan como resultado lesiones cerebrales orgánicas. A menudo parece existir un elemento hereditario.

120 La palabra misma (epilepsia) se deriva del término que se utiliza en griego para «atacar», a menudo nos referimos a sus síntomas como «ataques». La enfermedad puede comenzar antes de los quince años. Hoy, gracias a las drogas (Phenobarbital, Dilantin, Mesantoin, Mysolina, Peganona, etc.), relativamente pocos casos requieren internamiento y solamente el 1,4% de las admisiones a los hospitales psiquiátricos.

121 Los accesos epilépticos, pueden ser agrupados en cuatro categorías:
grand mal, se caracteriza por las convulsiones epilépticas clásicas; petit mal, por pérdidas pasajeras del conocimiento y por no presentar convulsiones; accesos jacksonianos: conducta convulsiva localizada, psicomotor, por una diversidad de conductas no-convulsivas con trastornos del conocimiento. La forma de epilepsia más común, típica e impresionante, que ocurre en un 60% de los casos, es el grand mal. 

122 LA GRAN ENFERMEDAD: «GRAND MAL»
El tipo de onda cerebral característico de esta forma del desequilibrio está formado por una serie de picos acentuados. La mitad de estos accesos empiezan con un aviso o “aura”, generalmente demasiado breve para permitir que el individuo se prepare. A continuación siguen las fases tónica y convulsiva que concluyen con el coma posconvulsivo.

123

124 1. AURA El término se refiere al aviso o síntomas premonitorios subjetivos de que un acceso es inminente. Esta señal tiene lugar desde varios segundos antes de la pérdida del conocimiento, es la primera manifestación de la descarga neuronal. El aura puede consistir: en entumecimiento, picazón, sensaciones incómodas, sentimiento de angustia, puede que adopte la forma de una alucinación de ciertos sentidos, tales como «flashes» de luz, ruidos, o alucinaciones olfatorias. El aura es por lo general desagradable.

125 2. FASE TÓNICA Se da una pérdida de conocimiento repentina y total. El paciente se derrumba al instante. Raramente existe la posibilidad de que se proteja, y puede recibir heridas graves. Mientras cae, toda la musculatura voluntaria sufre una contracción continua, permaneciendo en esta fase tónica de diez a veinte segundos. Los músculos del pecho se contraen a menudo al mismo tiempo que los de la laringe; el aire es por tanto expulsado violentamente y da como resultado un sonido peculiar conocido como el grito epiléptico. Al principio la cara está pálida, pero según los músculos van contrayéndose rígidamente, las venas superficiales se hinchan. Al mismo tiempo el pecho adquiere una posición fija y la oxigenación de la sangre se detiene, aumentando así la cianosis (color azulado o morado) de la cara. Durante esta fase tónica, las pupilas se dilatan, no reaccionan a la luz, y no hay reflejo córneo. 

126 3. FASE CONVULSIVA Son contracciones musculares intermitentes o convulsivas, rápidas al principio pero que van gradualmente decreciendo en frecuencia. La cabeza golpea el suelo, las piernas se convulsionan hacia arriba y hacia abajo y las mandíbulas se abren y se cierran tan violentamente que se genera una mezcla espumosa de aire y saliva. Si en este momento ocurriese que la lengua cayera entre los dientes durante una relajación, podría ser mordida durante una contracción convulsiva posterior. Los espasmos musculares agudos pueden durar uno o más minutos.

127 4. COMA POS-CONVULSIVA Las pupilas están rígidas, no hay reflejos en los tendones, la respiración con ronquidos, la cara está congestionada y cubierta de sudor, y los labios están azulados. Si se levanta un brazo o una pierna y a continuación se deja caer, lo hace pesadamente, como en un estado de parálisis. Si se le deja tranquilo, el paciente cae en un sueño profundo que puede durar una o dos horas, quejándose, al despertar, de dolor de cabeza, fatiga y, quizá, de dolor en la lengua. Según va el paciente saliendo del estado de coma, se encuentra a menudo desconcertado y puede que realice actos semiautomáticos, que deambule sin objetivo fijo, que mueva la mandíbula como si mascase, que se rompa la ropa, o que intente quitársela. Las convulsiones pueden ocurrir durante el sueño así como durante las horas de vigilia, mientras que en algunos pacientes siempre ocurren de noche. Muchos tienen los accesos exactamente en el momento en que se están quedando dormidos.

128 LA HISTORIA DEL MUCHACHO EPILÉPTICO Para demostrar claramente que al menos algunos de los casos de posesión de los Evangelios son realmente orgánicos y no enfermedades puramente psicológicas, presentaremos ahora la narración del endemoniado epiléptico. Se encuentra en los tres Evangelios sinópticos. Para nuestra finalidad es mejor presentar un texto armonizado en el que los pasajes correspondientes se fusionen en una narración única.

129

130 Mt 17,14-18; Mc 9,14-27; Lc 9,37-43 «Mc. (Lc) Al día siguiente, cuando [Jesús y algunos apósto­les] (Lc) hubieron bajado de la montaña, y regresado con los otros discípulos, vieron una gran multitud que los rodeaba y a algunos escribas discutiendo con ellos. Al ver a Jesús, toda la multitud, presa de turbación, corrió a su encuentro. Jesús les preguntó [a sus discípulos]: "¿Qué estáis discutiendo con ellos [los escribas]?" Un hombre del gentío le contestó: "Maestro, te he traído a mi hijo. Está poseído por un espíritu mudo. Siempre que se apodera de él, lo arroja al suelo (Lc) y hace que se convul­sione; y el muchacho lanza gritos repentinos, echa espuma por la boca, rechina los dientes, y se queda rígido. (Lc) Cuesta mucho trabajo que el espíritu lo suelte, y lo hace sólo después de dejarlo lleno de contusiones. Pedí a tus discípulos que lo arrojasen, pero no pudieron hacerlo."

131 (Mt) El hombre se acercó a Jesús, cayó de rodillas ante él, y dijo: "Maestro, ten piedad de mi hijo, pues tiene epilepsia y sufre mucho: muchas veces se cae al fuego y otras muchas tam­bién al agua. (Lc) Mira a mi hijo, te imploro, pues es mi único hijo." Jesús les dijo [a la multitud y a los escribas]: "¡Qué ge­neración tan incrédula (Mt) y pervertida! ¿Cuánto tiempo ten­dré que estar con vosotros? ¿Cuánto tiempo he de soportaros?" Luego [volviéndose hacia el padre] añadió: (Lc) "Trae aquí a tu hijo." Y así, le trajeron al hijo. Apenas vio el espíritu a Jesús, co­menzó a convulsionar al muchacho, y éste cayó al suelo y se revolcaba echando espuma por la boca. Jesús preguntó al padre: "¿Cuánto tiempo hace que le pasa esto?"

132 Respondió: "Desde que era un niño; y muchas veces el espí­ritu lo ha lanzado al fuego o al agua para acabar con él. Pero si tú puedes, ¡apiádate de nosotros y ayúdanos!" Jesús dijo al padre: "¿Si puedes? ¡Todo es posible para el que cree!" El padre del muchacho inmediatamente exclamó: " ¡Creo! ¡Ayuda mi poca fe!" Jesús vio que la multitud se estaba amontonando rápidamen­te, e increpó al espíritu impuro, diciendo: "Espíritu mudo y sordo, te lo ordeno: ¡sal de él y no vuelvas a entrar en él!" Después de gritar muy fuerte y de convulsionar terriblemente al muchacho, el espíritu —(Mt) el demonio— salió (Mt) de él; y el muchacho se quedó como un cadáver, de manera que la mayoría decía: " ¡Está muerto! " Pero Jesús tomó su mano, lo levantó, y él se puso de pie. (Lc) Una vez que hubo curado al muchacho, Jesús lo devolvió a su padre. (Mt) Desde ese mismo momento el muchacho quedó curado. (Lc) Y todos los presentes se quedaron maravillados ante la grandeza de Dios.»

133 Diversas consideraciones
Aunque los tres evangelistas atribuyen la enfermedad a un demonio, están todos describiendo un caso de ataque de grand mal de epilepsia. La narración expone las características de las etapas básicas. 

134 a) Fase tónica Se indicó que en esta fase se produce una pérdida de conocimiento y que el paciente se desploma. Leemos: «Siempre que se apodera de él, lo arroja al suelo» (Lc 9,42; Mc 9,18), «el muchacho cayó al suelo» (Mc 9,20). El paciente puede recibir heridas graves: «le deja lleno de contusiones» (Lc 9,39), «muchas veces se cae al fuego y muchas veces también al agua» (Mt 17,15; Mc 9,22). También en esta fase el aire es expelido violentamente, lo que tiene como consecuencia el sonido peculiar conocido como grito epiléptico: «el muchacho lanza gritos repentinos» (Lc 9,39), «después de gritar muy fuerte...» (Mc 9,26). 

135 b) Fase convulsiva Ya hemos dicho que esta etapa es la más típica, pues la epilepsia es conocida como el desequilibrio convulsivo. En ella Jesús les dijo a todos ellos: "¡Qué gente tan incrédula sois! ¿Cuánto tiempo he de permanecer con vosotros? ¿Cuánto tiempo he de soportaros? ¡Traedme al muchacho!" Y se lo llevaron. Apenas vio el espíritu a Jesús, comenzó a convulsionar al muchacho, y éste cayó al suelo y se revolcaba echando espuma por la boca. Jesús preguntó al padre: "¿Cuánto tiempo hace que le pasa esto?"

136 Respondió: "Desde que era niño; y muchas veces el espíritu lo ha lanzado al fuego y al agua para acabar con él. Pero si tú puedes, ¡apiádate de nosotros y ayúdanos!“ Jesús dijo: "¿Si puedes? ¡Todo es posible para el que cree!" El padre del muchacho inmediatamente exclamó: "¡Creo! ¡Ayúdame a aumentar mi fe!"

137 Jesús advirtió que la multitud se estaba amontonando rápidamente, y se dirigió ásperamente al espíritu impuro, diciendo: "Espíritu mudo y sordo, te ordeno que salgas del muchacho y que no regreses más a él.“ Después de gritos muy fuertes y de terribles convulsiones, el espíritu salió. El muchacho se quedó como un cadáver, de manera que la mayoría decía: "¡Está muerto!" Pero Jesús tomó la mano del muchacho, lo ayudó a levantarse, y él se puso de pie.»

138 Tienen lugar las contracciones musculares intermitentes o convulsivas
Tienen lugar las contracciones musculares intermitentes o convulsivas. Leemos: «hace que se convulsione» (Lc 9,39), «comenzó a convulsionar al muchacho» (Mc 9,20), «después de convulsionar terriblemente al muchacho» (Mc 9,26). Las mandíbulas se abren y cierran tan violentamente que se genera una mezcla de aire y saliva: «hecha espuma por la boca» (Mc 9,18), «se revolcaba echando espuma por la boca» (Mc 9,20), «rechina los dientes» (Mc 9,18). 

139 c) Faseposconvulsiva Las pupilas están rígidas, los reflejos de los tendones están ausentes... como en un estado de parálisis. La narración dice: «el muchacho se queda rígido» (Mc 9,18). Si no se le molesta, el paciente cae en un sueño profundo. «El muchacho se quedó como un cadáver» (Mc 9,26). Algo similar está implícito cuando se dirige al demonio como «espíritu mudo y sordo» (Mc 9,25), es decir, el demonio privaba al muchacho del habla y del oído.

140 Mateo escribió explícitamente seleniathetai, esto es, «sufre de epilepsia» (Mt 17,15). La traducción literal de la palabra griega es «lunático», pues existía la creencia en aquel tiempo, confirmada por Galeno en el siglo II d. C, de que las fases de la luna ejercían, influencia sobre los ataques de epilepsia. Mateo también dice que el muchacho fue curado porque «el demonio salió de él» (Mt 17,18). Parece obvio que, en aquella época, los actos dementes y la conducta inexplicable se atribuían a los demonios. Puesto que los epilépticos pertenecían a esta categoría, también eran concebidos como poseídos por demonios.

141 La palabra «lunático» o «epiléptico» aparece una vez más en Mateo:
«Las noticias acerca de Jesús se extendieron a lo largo de toda la región de Siria; y la gente le traía a todos los que estaban enfermos con todo tipo de enfermedad, y a los aquejados con toda suerte de males: endemoniados, epilépticos y paralíticos. Jesús los sanaba a todos» (Mt 4,24). Puede ser significativo que en este pasaje la mención de los epilépticos vaya inmediatamente después de los poseídos por demonios, como si fueran una categoría especial de endemoniados.

142 Hemos seleccionado este episodio ya que los síntomas descritos en las narraciones corresponden a los de la epilepsia, que se da una «unanimidad sorprendente» entre estudiosos de la Biblia, médicos y teólogos, en que el muchacho sufría realmente de epilepsia.


Descargar ppt "III MLAGROS."

Presentaciones similares


Anuncios Google