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Capítulo 2.- Nuestra espiritualidad

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Presentación del tema: "Capítulo 2.- Nuestra espiritualidad"— Transcripción de la presentación:

1 Capítulo 2.- Nuestra espiritualidad
Hermanas que os llamáis de la caridad, dulcificad las dolencias de la humanidad, socorriendo a todos los pobres necesitados, por amor de Dios. No tengáis otros deseos que los de agradarle a El Beato Juan Nepomuceno Zegrí y Moreno

2 Desgranando la frase… Hermanas que os llamáis de la caridad… Es como una llamada a honrar nuestro nombre… Como si el Padre nos dijera: sí os llamáis de la caridad haced patente esta caridad… Al P. Zegrí le preocupaba mucho la caridad… Dulcificad las dolencias… Para dulcificar tengo que tener un carácter dulce, afable, bondadoso, manso, tierno… ¿He trabajado mi carácter para que mi caridad se manifieste con estas connotaciones de las que habla el Padre? ¿Qué dolencias dulcifico yo cada día? Socorriendo y atendiendo a TODOS LOS POBRES NECESITADOS… Es decir, haciendo de buen samaritano con todos. Me llama la atención la radicalidad de … A TODOS LOS POBRES Y NECESITADOS… Y esto 24 h/sobre 24 horas… siempre. Por amor de Dios, no por filantropía, no porque me lo han mandado, no porque no tengo más remedio. Por amor de Dios. Para ello, TENGO QUE ESTAR LLENA DE AMOR DE DIOS ¿Dónde y de qué manera me lleno de amor de Dios? De lo contrario, ¿Cómo lo podré hacer por amor a Dios? Cotidianamente tengo que abrirme al amor de Dios para hacer realidad el carisma y la misión. Es una exigencia de la vocación. No tener otro deseo que el de agradarle a El… Es importante identificar el mundo de mis deseos ¿cuáles son? ¿He llegado a vivir esta exigencia de mi vocación: no tengáis otro deseo que el de agradarle a él? ¿En qué tramo del camino estoy?

3 6.-La espiritualidad de la congregación brota del carisma
Especialmente de los tres elementos constitutivos: Jesucristo Redentor La caridad Redentora María de la Merced También configuran la espiritualidad los elementos integrantes que constituyen la forma o la manera de vivir los elementos constitutivos.

4 Cinco verbos esenciales
profundizar compartir vivir interiorizar desarrollar Ellos dinamizan nuestra vida y nos exigen una actitud constante de apertura al Espíritu Presentes en la vida de cada hermana En la comunidad En la misión

5 El desarrollo de la espiritualidad…
No compete sólo a las superioras… -- Sino a todas y cada una de las hermanas en su capacidad de vivir y actualizar constantemente los elementos esenciales del carisma -- a las comunidades, en su capacidad de discernimiento, porque el carisma es un don otorgado a cada hermana en comunidad, en familia religiosa -- y a hermanas y comunidades en la misión encomendada, en comunión con las personas a las que somos enviadas y con las que realizamos la acción evangelizadora…

6 7.-Cristo Redentor La acción liberadora de Dios es asumida y realizada en la historia por Jesucristo con toda su vida, pero sobre todo, con su misterio pascual. La cristología de nuestro carisma es esencialmente PASCUAL. Nuestra identidad de hermanas mercedarias de la caridad se fundamenta en en el seguimiento de la persona y de la obra de Jesucristo Redentor.

7 Jesús en su misterio pascual
Nos realizamos en la medida en que: Asumimos Vivimos ESTE MISTERIO DE AMOR Actualizamos Fuerza transformadora del mundo y del ser humano

8 Humanizante y redentor
La gran pregunta: ¿Somos conscientes de que el sufrimiento y el dolor, así como el sentido de la muerte, tienen valor Humanizante y redentor Cuando lo entregamos en nuestra vida?

9 Nuestro carisma nos impulsa a potenciar la vida
En los contextos históricos y culturales en los que estamos insertas, tenemos que desarrollar la capacidad para percibir y potenciar los signos de vida y crearlos donde no existan… Es exigencia de nuestro seguimiento de Jesucristo Redentor, en su misterio pascual, y por amor a los crucificados de la tierra a los que somas enviadas.

10 8.-La caridad redentora…
El gran don de Dios, entregado al mundo en Jesús ES EL AMOR DE CARIDAD El Beato Juan Nepomuceno Zegrí y Moreno así lo entendió, y testimonió este amor con su vida y con su muerte, como fuente que garantiza la comunión hacia dentro y hacia fuera

11 Objeto de la vocación del instituto y de cada una de las hermanas
LA VIVENCIA DE LA CARIDAD REDENTORA. Caridad que la hermana mercedaria debe proyectar: Hacia Dios, primer destinatario de nuestro amor Hacia el prójimo, especialmente hacia los más pobres Hacia las hermanas de comunidad Una comunidad que es gestual, sacramental, tangible, signo inequívoco del don recibido…

12 Nos tiene que golpear siempre el corazón la palabra del P. Zegrí
UNA HERMANA MERCEDARIA DE LA CARIDAD SIN CARIDAD ES UN SER INCOMPRENSIBLE, ES UN CONTRASENTIDO, ES UN ABSURDO…

13 9.- maría de la merced MARÍA ES LA MUJER CREYENTE EN QUIEN NOS MIRAMOS. EN SUS HUELLAS EVANGÉLICAS CAMINAMOS. Pues María, por su fe y por su participación en el misterio de su Hijo, es reconocida como modelo extraordinario de la Iglesia y se convierte en Madre de la humanidad

14 La congregación contempla a María de la merced…
Como MODELO consagración al Padre Como DISCIPULA en el seguimiento del Hijo Siempre en DOCILIDAD al Espíritu Estas tres dimensiones deben marcar fuertemente nuestra vida

15 María es para cada hermana mercedaria
Camino de compromiso en fidelidad a la vocación y ayuda eficaz para vivirla en plenitud COMPROMISO… FIDELIDAD… VIVENCIA DE LA VOCACION EN PLENITUD Tres desafíos de la relación con María que no nos pueden dejar indiferentes

16 Es la mujer nueva… Que nos conduce por un camino de novedad permanente hasta estar junto a Ella al pie de la cruz. La mujer que contemplamos es una mujer entera, íntegra, coherente, entregada y realizadora de la voluntad de Dios hasta la entrega del propio Hijo por amor… Por tanto, no es un figurín de mujer, contemplada en estampas y en capillas. Es una mujer recia, forjada en un camino de fe que le conduce hasta la misma cruz con su Hijo, asumiendo su forma de vida y su destino. Rezarle sólo, y conmovernos con Ella, no es suficiente. Es esencial seguir sus pasos de discípula.

17 Nuestro carisma redentor…
Nos invita a mirar a María a la luz del misterio pascual de Cristo que comienza en la encarnación y termina en pentecostés. Ella integró este misterio en su proceso existencial y lo vivió a la luz de la fe … este es el gran desafío en la devoción a María.

18 ESTO SÍ QUE ES CAMINO DE AUTÉNTICA LIBERACIÓN…
Ella nos muestra el camino del Evangelio hecho: Cercanía Acogida Justicia Misericordia Enseñándonos a acercar a la humanidad el amor que el había venido a revelar. Amor que se concreta, sobre todo, en los que sufren, en los cautivos, los oprimidos y los pecadores… ESTO SÍ QUE ES CAMINO DE AUTÉNTICA LIBERACIÓN…


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