¿Cómo se unen los átomos entre sí?
Metal-no metal Metal: pierde electrones (catión) No metal: capta electrones (anión) NO se forman moléculas Se forman sales (estructura cristalina).
Sulfato de cobre II: CuSO 4 Sal común: NaCl
Sólidos a temperatura ambiente. Altos puntos de fusión y ebullición: necesitamos bastante energía para romper la estructura de red cristalina. Conducen el calor y la electricidad sólo en estado líquido o en disolución, nunca en estado sólido (aislantes). Duros pero quebradizos.
Los compuestos iónicos se disuelven bien en agua y otros disolvente POLARES:
No se disuelven bien en disolventes apolares como aceite y gasolina.
No metal-no metal. Tendencia a ganar electrones. Los electrones se comparten. Los electrones compartidos se sitúan en un nuevo orbital común a los átomos enlazados, que posee menor energía que los dos orbitales atómicos por separado.
Normalmente los electrones que forman el enlace están desapareados. En algunas ocasiones un átomo aporta un par de electrones y el otro no aporta ninguno (enlace covalente coordinado o dativo). En ocasiones los números de oxidación de algunos elementos se explican a través de estados excitados de los mismos.
Es un enlace direccional: el par de electrones compartidos afecta a un par de átomos en concreto. La mayoría forman moléculas; aunque algunas forman redes (grafito, diamante, cuarzo, etc.) Hay que distinguir entre fuerzas intramoleculares e intermoleculares.
Fuerzas intramoleculares Mantienen unidos los átomos de una molécula. Son muy difíciles de romper: enlaces QUÍMICOS. Es necesaria mucha energía para separar los átomos de una molécula. Fuerzas intermoleculares Mantienen unidas las moléculas entre sí. En general son débiles y fáciles de romper: uniones FÍSICAS. Puntos de fusión y ebullición bajos.
Cuarzo: SiO 2
Carbono en forma de diamante Carbono en forma de grafito