En tiempos remotos, las gentes se comunicaban entre sí por medio de mensajes de diversos tipos pero, en caso de emergencias, especialmente por las noches, lo hacían por medio de fogatas. Una fogata de cierto tipo advertía al siguiente pueblo en el camino del avance…

En las noches de la primavera y del verano del año 586 a. C., las fogatas surgieron con urgencia transmitiendo un mensaje de fatalidad… Finalmente, los Babilonios llegaron hasta Jerusalén, y la ciudad ofreció una brava defensa.

Jeremías 39:1-3a

D IOS L LAMÓ A J EREMÍAS A COMUNICAR S U P ALABRA A S U PUEBLO.

Jeremías registró lo que sintió durante el “holocausto”, el cual él sobrevivió. Más aún, él explicó en sus escritos las razones de ese holocausto, y eso hace de su palabra escrita algo muy precioso para Israel, y para la iglesia, porque lo que más quiere saber la gente cuando experimenta una catástrofe como la que experimentó el pueblo de Dios es, “¿Por qué? ¿Por qué a mí? ¿Por qué esto? ¿Por qué a mí? ¿Por qué esto? ¿Por qué ahora?”

A. D IOS HABLÓ A S U PUEBLO CUANDO LA VIDA EN J UDÁ PARECÍA ESTAR EN SU APOGEO. Que los escritos de Jeremías surgieron directamente del corazón y de la mente de Jehová, es innegable. Que los escritos de Jeremías surgieron directamente del corazón y de la mente de Jehová, es innegable. Casi en todas las páginas de su profecía leemos frases tales como “Vino a mí palabra de Jehová, diciendo…”, “Me dijo Jehová…”, “… dijo Jehová el Señor”, “Así ha dicho Jehová de los ejércitos…”.

¿Dónde inició Jeremías su carrera profética? ¿Qué convicciones, qué experiencias lo lanzaron a la vida pública? ¿Puede la Palabra de Dios ser proclamada de igual manera en nuestro día? A fin de obtener las mejores respuestas, tenemos que dejar que Jeremías responda personalmente. Sus respuestas las encontramos en el primer capítulo de su profecía.

B. D IOS ESTABA HABLANDO CUANDO J EREMÍAS SE DIRIGIÓ A LAS CIRCUNSTANCIAS DE SU DÍA. Y es en medio de todo esto, con la nación de Judá viviendo una época que ellos creían era de apogeo, que viene la palabra de Jehová a Jeremías (1:2). Son tres los reyes en cuyas épocas profetizó Jeremías…

Ahora, ¿qué queremos decir con eso de que “Cuando Jeremías hablaba, era Dios quien estaba hablando”? ¿A qué nos referimos hoy día cuando decimos que “Dios está hablando”? 1. Las circunstancias humanas contienen un mensaje divino. 2. Jeremías interpretó esas circunstancias al pueblo. “Vino, pues, palabra de Jehová a mí, diciendo: Antes que te formase en el vientre te conocí, y antes que nacieses te santifiqué, te dí por profeta a las naciones.”

C. E L LLAMADO DE D IOS IMPLICA UN PROFUNDO E INTENSO SENTIMIENTO, ASÍ COMO UN REVERENTE TEMOR. 1. Ese sentimiento te dice que Dios te llamó desde antes de nacer. 2. Ese temor te hace sentir que no estás calificado para la tarea. … “¿Quién soy yo para que vaya a Faraón, y saque de Egipto a los hijos de Israel? (Éx. 4:11).

E L M ENSAJE D EL V ERDADERO P ROFETA D EMUESTRA E L L LAMADO DE D IOS.

Y es así que el interprete está listo. La voz de Dios ha sido liberada ahora en la tierra. Pero ¿cómo sabemos que es la voz de Dios la que habla? Hay tantos que hablan, tantos que contradicen, tantos con voz suave como con voz airada. A. Su mensaje es confiable. B. Su mensaje juzga nuestro pecado. C. Su mensaje genera oposición.

C UANDO L A P ALABRA DE D IOS SEA P ROCLAMADA, N OSOTROS D EBEMOS E SCUCHAR.

¿Quién escuchaba la Palabra de Dios en aquellos días?, preguntamos. No muchos, si leemos la narración del Antiguo Testamento. Jeremías reporta que la resistencia a la Palabra de Dios fue tan fuerte que sobrevivió la destrucción de Jerusalén, y aun entre los restos de la sociedad judía que se exiló en Egipto.

A. Muchos se rehúsan a escuchar, y rechazan la verdad. y rechazan la verdad. B. La verdad es proclamada para que nosotros, humildemente la aceptemos y gobernemos nuestra vida con base en ella. Dios está hablando hoy.

¿Escuchas tú lo que Él te está diciendo a ti y a nuestra generación? De pie, en el centro de este mundo que gira, nosotros debemos esperar la palabra de ese Dios que se quiere comunicar con nosotros. ¡Aquí! ¡Ahora! Dios habla hoy a través de Su Palabra y de Sus siervos, los modernos profetas pero, ¿quién está escuchando?