Mensaje Conoced que Yo Soy Dios Hno. Isaías Rodríguez

A. “Vivimos en una carrera de ratas en la que las ratas van ganando la carrera.” Lo vemos en las calles… Lo vemos en las tiendas… Lo vivimos tanto en la casa como en el trabajo… Cuando llega fin de la semana … Tal parece que no podemos quedarnos quietos ni un minuto.

B. ¿Qué significa la frase, “Estad quietos” B. ¿Qué significa la frase, “Estad quietos”? Literalmente significa “deja de luchar”. ¿Qué es lo que estamos haciendo cuando Dios nos ordena hacer algo y nosotros lo ignoramos? ¿O cuando Él nos dice que algo debe ser hecho en cierta forma y nosotros nos empeñamos en hacerlo a nuestra manera? ¿No es eso ‘luchar’?

Texto Salmo 46. Como texto base, el versículo 10, que dice: “Estad quietos, y conoced que yo soy Dios.”

¿Qué Dice? Dios nos está diciendo que Él es nuestro amparo y fortaleza, y en el versículo clave claramente nos dice que tenemos que detener el carrusel para percibir quién es Él verdaderamente

Proposición Dios tiene maneras especiales para ponernos quietos y mostrarse ante nosotros en todo su poder.

Pregunta ¿Cuáles son algunos de los aspectos de la naturaleza de nuestro Dios de los que nos habla este pasaje?

Transición Hay cuatro aspectos de la naturaleza de Dios revelados en este pasaje; necesitamos tomar nota de ellos, recordarlos y ponerlos en práctica en nuestra vida diaria.

Transición Así nos será más fácil dejar de luchar y estar quietos. El primer aspecto nos dice que …

I. Dios es nuestro Protector A. Los seres humanos ponemos nuestra confianza en cosas que realmente nos dan una falsa seguridad.

I. Dios es nuestro Protector B. Nuestra única esperanza de verdadera seguridad es nuestro Dios. Recordemos las palabras del Salmo 91.

II. Dios es nuestro Proveedor A. Es un hecho que nosotros, muchas veces, nos consideramos autosuficientes.

II. Dios es nuestro Proveedor B. Dios es nuestro proveedor La fe de Hudson Taylor

II. Dios es nuestro Proveedor C. ¿Y qué es lo que Dios provee? Descanso y provisión. Salmo 23:2. Alimento. Salmo 36:8.

Transición Dios es nuestro protector, y también nuestro proveedor. ¡Qué más es Él para nosotros, según este salmo?

III. Dios es la fuente de nuestro Poder A. Ilustración B. Sólo debemos recordar que esa fuerza debe ser usada conforme a la voluntad de Dios y con los propósitos adecuados.

Transición Hemos visto que el Señor es nuestro protector, nuestro proveedor y nuestra fuente de poder. Consideremos el cuarto y último aspecto de la naturaleza de Dios revelado en este Salmo.

IV. Dios es nuestra Paz A. ¿Qué me contestarías si te preguntara: Tienes verdadera paz en tu vida? ¿No hay preocupación? ¡No hay estrés? La paz a veces tiende a eludirnos.

B. Pero Dios dice, “Estad quietos”. IV. Dios es nuestra Paz B. Pero Dios dice, “Estad quietos”. 1. La traducción literal de esta expresión es “Relájate, descansa, reposa, cesa de luchar, etc.” El concepto principal es que los músculos deben estar en un estado de relajamiento.

B. Pero Dios dice, “Estad quietos”. IV. Dios es nuestra Paz B. Pero Dios dice, “Estad quietos”. 2. En otras palabras, nada en ti puede alcanzar este propósito, es todo de Dios. Por tanto, “Estad quietos”.

IV. Dios es nuestra Paz C. Pero hay ciertas condiciones que Dios ha establecido para que se produzca esa verdadera paz.

IV. Dios es nuestra Paz 1. Nuestra mente tiene que confiar en Dios. Dice Isaías 26:3, “Tú guardarás en completa paz a aquel cuyo pensamiento en ti persevera; porque en ti ha confiado.”

IV. Dios es nuestra Paz 2. Nuestra paz debe estar centrada en Cristo Jesús. Juan 14:27 dice, “La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón ni tenga miedo.”

IV. Dios es nuestra Paz 3. Esa paz verdadera y duradera sólo viene a nuestra vida cuando hemos recibido a Cristo Jesús como nuestro Salvador personal. Romanos 5:1, dice: “Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro Señor Jesucristo.”

IV. Dios es nuestra Paz 4. Y esa paz debe ser la que gobierne en la iglesia del Señor. Colosenses 3:15, dice: “Y la paz de Dios gobierne en vuestros corazones…”

Dime honestamente, ¿estás luchando con Dios? Conclusión Dime honestamente, ¿estás luchando con Dios? ¿En qué área estás luchando? Escucha, Dios quiere que estés quieto y le conozcas más a fondo.

Oración Final

Oración Final