Comunicación ANUAL: muestreos y resultados. SITUACIÓN EPIDEMIOLÓGICA DE LA TULAREMIA EN CASTILLA Y LEÓN Fernández Salazar, M.; Fernández Calle, L.M.; González González, Y.; Mínguez González, O.; Álvarez Pérez, FJ.; Martínez González, J Fernández Salazar, M.; Fernández Calle, L.M.; González González, Y.; Mínguez González, O.; Álvarez Pérez, FJ.; Martínez González, J. Cadáver de liebre Resultados y Conclusiones: Los hallazgos ponen de manifiesto la existencia de una zona con prevalencia endémica de tularemia en liebres. Estas áreas coinciden con seroprevalencias en el ganado ovino extensivo y perros pastores sin seroconversiones que impliquen infecciones activas en estas especies. El número de ovinos analizados (97.186) distribuidos en explotaciones, así como de canidos de estas explotaciones (1.000 perros) se considera significativo de ausencia de infección activa. La prevalencia en el topillo campesino no varia a lo largo el periodo de referencia y no se han encontrado un número significativo de roedores positivos. No se ha logrado aislar la bacteria en el resto de animales y sustratos analizados. Introducción: La tularemia es una enfermedad septicémica propia de lagomorfos y pequeños roedores provocada por Francisella tularensis. Material y métodos: Desde el año 2004 en Castilla y León se han venido desarrollando planes de vigilancia epidemiológica en fauna silvestre que incluyen la Vigilancia Epidemiológica de la Tularemia. y otras zoonosis trasmitidas por roedores. Desde el año 2007 se puso en funcionamiento el PROCEDIMIENTO INTEGRAL DE INVESTIGACIÓN EPIDEMIOLÓGICA DE TULAREMIA Y OTRAS ZOONOSIS ASOCIADAS A ROEDORES SILVESTRES Y LAGOMORFOS que establece un sistema de vigilancia y monitorización en las especies susceptibles que son sometidas a un muestreo prefijado con la finalidad de obtener la información sanitaria necesaria para conocer y predecir la distribución de la Tularemia en nuestro territorio y su variación espacio-temporal. Área de Estudio: A partir de la información obtenida en los años anteriores se estableció un área de especial riesgo para la presencia de Tularemia, área en el cual se desarrollaron las labores de vigilancia activa y pasiva. Esta área se amplió a partir de los supuestos contemplados en el Procedimiento Integral de Investigación y en virtud de la Coordinación entre las Consejerías de Agricultura y Ganadería, Sanidad y Medio Ambiente detallada en el Procedimiento. Transmisión: - Contacto directo con el animal enfermo o muerto. -Ingesta de carne de animal enfermo poco cocinada. - A través de la picadura de artrópodos. - Vía aerógena poco implicada en los contagios. (Riesgo: Inhalación de polvo o partículas de sustratos contaminados como forrajes y henos.) MUY INFRECUENTE Trascendencia Internacional: esta contemplada como una enfermedad de interés socioeconómico y veterinario por la Organización Mundial de Sanidad Animal (antigua Oficina Internacional de Epizootias) incluida en la Lista B de enfermedades de notificación en su Código Zoosanitario Internacional, siendo por tanto de gran importancia realizar el control por parte de los Servicios Veterinarios Oficiales. Comunicación anual a la Organización Mundial de Sanidad Animal a través de la Red de Alerta Sanitaria Veterinaria RASVE, dependiente del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino. RASVE CRITERIOS DE MODIFICACIÓN DEL AREA DE ESTUDIO: Un único resultado positivo de Tularemia en Vigilancia Activa o pasiva. Recomendación de la Consejería de Sanidad, a través de la Dirección General de Salud Pública e Investigación, Desarrollo e Innovación. Recomendación del Instituto Tecnológico Agrario de Castilla y León motivada por densidad de la plaga de Microtus arvalis. Basada en la recogida de muestras consistentes en liebres, conejos y topillos hallados muertos. RECOGIDA: Consejería de Medio Ambiente: Agentes Medioambientales y celadores de Medio Ambiente. Consejería de Agricultura y Ganadería: técnicos pertenecientes a los Servicios Veterinarios Oficiales, Controladores Pecuarios y Técnicos Veterinarios de campo adscritos a la Dirección General de Producción Agropecuaria. VIGILANCIA ACTIVA: tres líneas de actuación. 1 - Captura de topillos vivos: Dos trampas por Unidad Veterinaria. Muestreo finaliza tras dos periodos de 4 días (total 8 días) o la captura de 11 individuos. Revisión diaria. Dos muestreos al año: Primavera y Verano-otoño. Captura máxima de 22 topillos x 2 muestreos = 44. Supone estimar la prevalencia de estas Unidades Veterinarias con un nivel de confianza de un 99%, un error máximo de un 5 % para una prevalencia de Tlaremia esperada de 1,7% (datos 2007) (supeditado a la presencia de topillos en campo) 2 - Serovigilancia epidemiológica en ganado ovino y cánidos domésticos: Ovino: se chequearon un nº de rebaños por U.V. que garantizan con un grado de confianza del 95% la detección de la enfermedad suponiendo una prevalencia interebaño del 5%. De cada rebaño se obtienen sueros en un número que permita detectar la enfermedad con una confianza de un 95% suponiendo una prevalencia intrarebaño de un 20%. Cánidos: perros pastores y de caza. Basado en cánidos identificados se chequearan 60 animales por provincia repartidos por todas las Unidades Veterinarias. Detectándose la enfermedad con una confianza de un 95% para una prevalencia de la enfermedad estimada de un 5%. 3 – Otras analíticas: Basado en estudios y bibliografía especializada se tomaron muestras de Agua, Cangrejos y Sustratos vegetales como elementos de relevancia en la permanencia del agente en el medio y con el fin de evaluar su papel transmisor. Se contó con la colaboración de los Agentes Medioambientales y celadores de Medio Ambiente VIGILANCIA PASIVA