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La CLADE

Quienes somos La Campaña Latinoamericana por el Derecho a la Educación (CLADE) es una articulación plural de organizaciones de la sociedad civil que actúa en defensa y promoción del derecho a una educación pública y gratuita para todos y todas, de responsabilidad del Estado, que responda a las dimensiones de asequibilidad, accesibilidad, aceptabilidad, adaptabilidad y rendición de cuentas. Quiere promover una transformación con miras a la implantación de un nuevo modelo de desarrollo que responda al buen vivir, a la justicia social, a la dignidad humana y a la relación armónica con el medio ambiente en los países de América Latina y el Caribe.

Quienes somos Articula: 14 Foros Nacionales, 8 redes regionales, 5 organizaciones internacionales y mantiene alianza estratégica con 7 instituciones Redes regionales: ALER, CEAAL, Federación Internacional Fe y Alegria, FLAPE, Marcha Global contra el Trabajo Infantil, REPEM, PIDHDD, PEM Organizaciones internacionales: ActionAid Américas Asociación Alemana para la Educación de Adultos (AAEA), Ayuda en Acción, Save the Children UK, PLAN Internacional Alianzas estratégicas: Campaña Mundial por la Educación, CCONG, UNESCO/OREALC, Consejo Asesor Metas 2021, ICAE, Foro Mundial de Educación, UNESCO

Qué hacemos? Incidencia en políticas públicas Movilización social; Exigibilidad política y jurídica; Articulación interinstitucional con actores regionales, internacionales y con los foros nacionales; Producción de conocimiento e investigación; Comunicación y sensibilización.

Consagración de la educación como un derecho humano

Construcción Histórica El Derecho a la Educación está consagrado en una amplia red de tratados internacionales, a empezar por la Declaración Universal de los Derechos Humanos (1948), en el art. 26. Este reconocimiento ha sido el resultado de una larga construcción histórica signada por luchas y reivindicaciones y por la intención por llevar a la esfera jurídica los ideales de dignidad humana, igualdad y solidaridad. Durante la segunda mitad del siglo XX, muchos otros instrumentos fueron desarrollados haciendo mención expresa a la realización del DHE. En América Latina y el Caribe, el derecho a la educación quedó consagrado en la Convención Americana sobre Derechos Humanos (Pacto de San José de Costa Rica) y en el Protocolo Adicional a la Convención en materia de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (conocido como Protocolo de San Salvador), entre otros.

El sentido de la Educación Respecto al sentido del derecho a la educación, el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales (PIDESC, 1966) prescribió que la educación debe orientarse hacia el pleno desarrollo de la personalidad humana y del sentido de su dignidad, y debe fortalecer el respeto por los derechos humanos y las libertades fundamentales. Determinó, además, que la educación debe capacitar a todas las personas para participar efectivamente en una sociedad libre, favorecer la comprensión, la tolerancia y la amistad.

Estatuto especial del DHE Posteriormente, en las Observaciones Generales 11 y 13 del Comité DESC, se reconoció el carácter multidimensional y multiplicador del DHE, y se le clasificó simultáneamente como derecho económico, social y cultural, así como derecho civil y político. “La educación es un derecho humano intrínseco y un medio indispensable de realizar otros derechos humanos” (Obs General 13) “se ha clasificado de distinta manera como derecho económico, derecho social y derecho cultural. Es todos esos derechos al mismo tiempo. También es un derecho civil y un derecho político, ya que se sitúa en el centro de la realización plena y eficaz de esos derechos. A este respecto, el derecho a la educación es el epítome de la indivisibilidad y la interdependencia de todos los derechos humanos.” (Obs. General 11 DESC)

El Estado como garante del DHE Distintos marcos jurídicos internacionales afirman que el derecho a la educación solo se cumple cuando esta es universal, obligatoria y gratuita. Además, es obligación del Estado respetar, proteger y cumplir este derecho respondiendo a sus cuatro dimensiones interrelacionadas: disponibilidad, accesibilidad, aceptabilidad y adaptabilidad.

Las 4 “As” de Katarina Tomasevski Disponibilidad (availability) Instituciones y programas suficientes; Infraestructura y mobiliario adecuado; Personal docente preparado; Equipo y materiales didácticos. Accesibilidad (accessibility) No discriminatoria; Gratuita (acceso económico); Distribución geográfica apropiada de las instituciones educativas; Medios de transporte estudiantil; Servicios de alimentación.

Las 4 “As” de Katarina Tomasevski Aceptabilidad (acceptability) Currículo pertinente, orientado a la realización del conjunto de derechos humanos, al desarrollo pleno de las potencialidades de todas las personas, a la dignidad humana y al buen vivir; Experiencias de aprendizaje significativas. Adaptabilidad (adaptability) Flexibilidad curricular; Currículos diferenciados al contexto del estudiante. La “5ª A”: accountability Las 4 “As” deben ser garantizadas por el Estado. Cualquier situación que viole una o más dimensiones del DHE es un obstáculo a su plena realización y puede ser justiciable. Cabe a la sociedad hacer el seguimiento para que el DHE sea efectivamente cumplimentado.

Implicaciones fundamentales de la educación entendida como un derecho La importancia de reconocer la indivisibildad de los derechos humanos y de articular distintas políticas sociales para garantizar el DHE. Revisar el modelo de desarrollo económico y hacer con que las políticas económicas y tributarias apunten para mayor igualdad social. Profundos cambios sociales deben tener lugar en conjunto con los cambios en el sistema educativo. El sentido de la educación es clave: derechos humanos, participación social y buen vivir x capital humano. Reconocer niños, niñas y adolescentes como sujetos de derecho en el tiempo presente. La no discriminación como problemática a ser superada y que atraviesa todas las cuatro dimensiones del DHE.

Implicaciones fundamentales de la educación entendida como un derecho Rol de la sociedad civil y de los sujetos de la comunidad educativa, en espacios de debate y toma de decisión. Los estados deben garantizar la existencia de espacios de participación, que garanticen la autonomía de los sujetos. OJO: no confundir los roles de la sociedad civil, de la familia y del Estado en la realización del derecho. La importancia de que los niños y niñas, en siendo sujetos de derecho, tengan también el derecho a expresar su opinión libremente en todos los asuntos que le afecten y a que ésta se tenga en cuenta.

Agenda Política de CLADE

Dos ejes centrales de incidencia: Afirmar la educación como un Derecho Humano a lo largo de toda la vida (2) Fortalecer la democracia activa y participativa en los países de América Latina y el Caribe 17

Afirmar la educación como un derecho a lo largo de la vida Superación de todas las formas de discriminación, garantizando la universalización del derecho; Gratuidad de la educación pública; Cumplimiento del derecho de los grupos etarios más desfavorecidos; Contenido educativo en consonancia con los derechos humanos, la dignificación de la vida y reconocimiento de la diversidad; Financiamiento público que garantice la realización del DHE. Incidencia sobre las problemáticas de la enseñanza superior y sus relaciones con la educación básica. 18

(2) Fortalecer la democracia activa y participativa Desarrollo de espacios consultivos y deliberativos en donde la sociedad civil y la comunidad participen de procesos de debate y toma de decisión sobre los marcos legales y políticos; Participación en espacios de incidencia ya existentes a nivel nacional, regional e internacional; Promoción de espacios de debate, articulación y aprendizaje colectivo en pro del cumplimiento del DHE Impulso a procesos de Justiciabilidad Análisis crítico sobre el rol de la cooperación internacional en educación 20

Muchas gracias Laura Giannecchini laura@campanaderechoeducacion.org www.campanaderechoeducacion.org 21