Los rótulos y las comparaciones son odiosas Según la Psicóloga Annie de Acevedo, manifiesta que no es conveniente rotular a los hijos, pues cada uno nace con sus propias características. Esos rótulos dados por los padres (“el inteligente”, “el tímido”, el perezoso”, etc…), desafortunadamente definen la imagen que un niño tiene de sí mismo, imagen ésta que va a ser determinante en sus actuaciones y motivaciones. Coordinación de Protección y Bienestar Estudiantil
Por eso hay que tener mucho cuidado En establecer estos calificativos, pues expresiones típicas, como: ”este salió malo para los negocios”, “este si va a ser el científico” o “este salió flojo, son dañinas en extremo, porque finalmente el niño termina por creerse todo lo que oye de sus padres o hermanos Coordinación de Protección y Bienestar estudiantil
Pasa lo mismo con las comparaciones Y éstas tienen tanto o más efectos negativos en los niños. Los padres suelen en estas situaciones casi de manera inconsciente: “tú no pareces hijo de tu papá que es un trabajador”, “tú hermano nunca hablaría así”, …, comparar a los hijos solo contribuye a crear conflictos. No hay que olvidar que los hermanos están en permanente “competencia” por el amor de sus padres, razón por la cual son más susceptibles y sensibles ante cualquier comparación. Coordinación de Protección y Bienestar estudiantil
Esforzarse por aceptar a cada hijo como es Con sus defectos y virtudes, es la mejor recomendación para los padres, ante esta situación. Trate de estimular sus talentos y busque siempre la oportunidad de desarrollar su potencial, sin encasillarlos y ayudándolos a crecer libremente Coordinación de Protección y Bienestar Estudiantil