PRIMER ENCUENTRO DE COORDINADORES PARROQUIALES DE PASTORAL

Carta del Sr. Arzobispo a los párrocos, del 25 de enero del presente año “La vicaría de pastoral, con todo su equipo, quiere continuar ayudándolos en la dinamización de la pastoral de sus parroquias e instituciones, sobre todo con la opción que tenemos por la Misión Continental desde la Nueva Evangelización. Entre varios puntos que tenemos en la programación pastoral queremos insinuar los siguientes, con miras a recibir apoyo por parte de todos los párrocos:

“En cuanto a la preparación de agentes para la dinamización de la pastoral, este año vamos a continuarla, pero con algunas variantes: queremos que todos los párrocos nos presenten dos laicos, de su entera confianza, que puedan servirles a su vez de coordinadores generales de la pastoral parroquial, que multipliquen con los demás agentes de su parroquia, los principios pastorales diocesanos. Esto nos permitirá trabajar por la unificación de criterios, de la cual tanto hablamos. Buscaremos la mejor forma de trabajar con ellos, que les resulte lo menos gravoso posible y que, al mismo tiempo, puedan ir poniendo en práctica lo que vayan recibiendo”. Gonzalo Restrepo Restrepo Arzobispo de Manizales

El Papa Pablo VI habló de "una Iglesia evangelizada y evangelizadora", lo cual supone que para evangelizar, antes se debe estar evangelizado. No puede haber una Nueva Evangelización sin Nuevos Evangelizadores que hayan vivido su Pentecostés personal. Evangelizar, sin antes ser evangelizado, sería construir sobre arena.

El principal problema pastoral de la Iglesia no es que no evangelice, sino que evangelizan quienes no están evangelizados. Tenemos muchos Nicodemos, maestros en Israel, que no han nacido de nuevo.

 En nuestra Iglesia existen muchas personas que han recibido los sacramentos, pero no han sido evangelizadas. El mandato de Jesús de ir y evangelizar a toda la creación, se ha trasformado hoy en "Id y evangelizad a los bautizados".

La Nueva Evangelización sólo será fruto de Nuevos Evangelizadores que ardan con el fuego de la Palabra de Dios, más que ilustrar con argumentos de catequesis. Necesitamos personas cuyo rostro resplandezca con el fulgor de la zarza ardiente, como Moisés.

El mundo de hoy no se opone ni rechaza el Evangelio El mundo de hoy no se opone ni rechaza el Evangelio. Al contrario, tiene hambre y sed de la Palabra de salvación. Lo que no aceptan es la forma como lo presentamos. Urge una Nueva Evangelización: pero que en realidad sea Nueva y que sea Evangelización; con testigos, más que maestros con sabiduría humana. Precisamos personas que antes de cualquier título o función en la Iglesia, hayan pasado por la escuela del discipulado. 

El Evangelio es vida, y esta vida tiene un nombre y un perfil: se llama Jesús de Nazaret, que murió y se entregó por ti. Pero debe ser proclamado por personas que hayan experimentado la vida en abundancia, porque sólo el convencido, convence; únicamente el motivado motiva; pues no puede dejar de hablar y testificar lo que ha visto y ha oído.

El principal problema pastoral en la Iglesia no es que no se evangelice, no; sino que evangelicen personas que no están evangelizadas.

Condiciones que requiere el evangelizador Vivir el Evangelio Celo por el Evangelio Análisis de la realidad Experiencia de salvación

Experiencia de salvación Sin una verdadera experiencia de salvación, podemos estar basando nuestra fe y nuestra evangelización sólo en la doctrina que aprendemos, y no en la experiencia del Dios vivo que nos llama. Hch. 4, 20; Jn. 3, 3; Mc. 5, 20; Hch. 9, 1- 31

¿Reconocemos algún momento en nuestras vidas en que pusimos trabas a los demás por manifestar su fe? ¿Qué hacemos en nuestros momentos de confusión? ¿Recordamos el proceso que vivimos para llegar a tener una experiencia de salvación en nuestras vidas?

Experiencia de salvación Celo por el Evangelio Cuando hemos experimentado la salvación en nuestras vidas, es imposible callar “lo que hemos visto y oído” de parte del Señor, y es entonces cuando la experiencia de salvación se convierte en un anhelo por que todos los hombres la experimenten y lleguen al conocimiento de Dios. Jn. 2, 17; Ef. 6, 15; 1Cor 9, 16; 2Cor. 11, 16-29

Nuestro celo por el evangelio debe llegar a convertirse en una Pasión, pero no una pasión de fin de semana, sino de 24 horas, 7 días, 12 meses… toda la vida. ¿Alguna vez tuvimos la necesidad de defender el Evangelio con uñas y dientes? ¿Cómo nos sentimos cuando “Hablan mal” de la Iglesia o del Evangelio?

Experiencia de salvación Análisis de la realidad Celo por el Evangelio Análisis de la realidad Decía acertadamente san Agustín: “No podemos ser peregrinos del cielo si somos fugitivos de la tierra”. El que sigue a Cristo no puede ser alguien que vive huyendo de la realidad (de su realidad); el mismo Jesús nos colocó en este lugar: “ No te pido que los saques del mundo, sino que los preserves del maligno”, es él quien nos pide, le pide al Padre, que nos quedemos en el mundo. Sólo estando en el mundo podemos conocer a los hombres y mujeres que viven en él y así, como el Buen Pastor, poder llamarlos por su nombre. Pero no podremos llamar a nadie si no sabemos donde están, y ésto no se refiere solamente a su ubicación física, sino más bien a su situación, su entorno, su realidad, etc.

Jn. 10, 14; Jn. 17; Rm. 16; 1Cor. 9, 19 ss. Cuando nos acercamos a alguien para hablar con él, ¿tenemos en cuanta su situación?

Experiencia de salvación Análisis de la realidad Celo por el Evangelio Vivir el Evangelio Análisis de la realidad Esta es, quizá, la condición más importante para nuestro tiempo, ya que “el estilo de vida del evangelizador determina (positiva o negativamente) el mensaje que transmite”. Vivir el evangelio implica en primer lugar creer en él, pero no como un mensaje bonito que es bueno transmitir, sino como “El Mensaje que transformó mi vida”. Ef. 4, 1; Lc. 11, 37 ss; 1Cor. 11, 1

“Cree lo que lees, enseña lo que crees y practica lo que enseñas”, ésto es un hermoso resumen de lo que significa ser coherentes entre lo que creemos, enseñamos y practicamos. Quien no vive lo que predica, lo que anuncia, aunque lo haga con las palabras mas conmovedoras, no es un buen evangelizador. ¿Y por casa como andamos?

Itinerario formativo del evangelizador: 1. PROCESO GLOBAL DE EVANGELIZACIÓN 1. Acción Misionera 1. Pastoral profética 2. Pastoral litúrgica 2. Acción Catequética 2. VISIÓN INTEGRAL DE LA PASTORAL 3. Pastoral social 3. NUEVA EVANGELIZACIÓN 3. Acción Pastoral 4. Pastoral comunitaria 4. PLAN PASTORAL 2015 – 2020 ARQUIDIÓCESIS DE MANIZALES