La Trinidad como Misterio e ideal de comunión

Dios, Uno y Trino, en la experiencia de M. Carmen M. Carmen usa más el lenguaje de los místicos, pero no nos deja testimonios propios de sus experiencias, nos quedan los recuerdos de quienes convivieron con ella y los ejemplos que recibieron de ella.

M. Carmen como los místicos gozó de la inhabitación trinitaria, de ahí su constante preocupación para que sus religiosas y niñas no perdiesen la presencia de Dios durante el día Juan Pablo II pone como fundamento de la vocación religiosa a la Trinidad que es quien llama. También Carmen, en sus documentos, lo recuerda a sus religiosas

Consagración a la Trinidad M. Carmen elige para la profesión religiosa oraciones dirigidas a la Trinidad, pues la Consagración se hace a Dios, Uno y Trino. Y lo mismo aconseja al renovar la Consagración a honra y gloria de Dios Padre, Hijo y Espíritu

Trinidad y Comunión Jesús a quien llama lo convoca a vivir con Él y con los demás llamados: apóstoles, primeras comunidades... En el s. XIX dejaban un poco que desear las comunidades religiosas M. Carmen quiere comunidades que se conformen con las de Jesús, siguiendo la vida íntima de la Trinidad

Vida común en M. Carmen Se adelanta a su tiempo y pone la vida en común no, en hacer cosas comunes sino en el “Amor de Dios” “Amor de Dios” no “Amor a Dios” porque es el amor de Dios el que debe iluminar y llenar a las hermanas para abrirse a las demás y a las niñas

El amor que se vive en la comunidad trinitaria necesita ser comunicado porque es perfecto y es el que Carmen quiere que experimenten sus hijas. “Por amor a Jesucristo” y Jesucristo es su “Esposo Redentor”. Amor Redentor que nos deja como fundamento de nuestra vida comunitaria

La Trinidad se nos ofrece como icono de plenitud de vida en comunión M. Carmen nos lo dejó como muy importante en nuestro carisma, pero a veces nos olvidamos y ponemos otras motivaciones por eso hay que volver a recuperarlo contemplando las relaciones interpersonales de la Trinidad

Jesús llama después a la misión, luego la Trinidad es también fundamento de la misión concepcionista Carmen tiene muy claro desde el principio que Dios le llama a educar a jóvenes y niñas

Y quiere para su congregación una dedicación completa a la enseñanza y formación de jóvenes También sus alumnas recuerdan como las animaba a tener devoción y acudir con confianza a la Santísima Trinidad