Jesus me llama para ser su amigo. Catequesis de primer año de comunión. Encuentro 1

Jesus me llama para ser su amigo. Este encuentro nos invita a mirar nuestro bautismo. ¡¡Qué importante es saber el lugar, la fecha, el sacerdote que fue instrumento de Dios el dia de mi bautismo!! Ese día comenzó para nosotros en nuestra historia una nueva vida, la Vida de hijos de Dios. No significa que ese día empezamos a existir para Dios…. Es hermoso ver lo que dice el Señor por boca del profeta Jeremías: “Antes de de formarte en el vientre yo ya te conocí, antes que salieras del seno yo ya te consagré” (Jer 1,1). Es muy importante que siempre volvamos a este pasaje de la Escritura. Él nos eligió desde toda la eternidad, en su proyecto eterno de amor nos pensó.

Dios nos habla: Mc 10, 13-16. También el día de nuestro bautismo nos llevaron a la Iglesia para pedir algo mas que una bendicion: ¿Qué piden a la Iglesia para este niño? Pedimos el Bautismo, la Vida eterna, la Fe.. Luego se nos trazó en la frente la señal de la Cruz: signo del amor de Dios manifestado en Jesús. Somos salvados por la vida entregada de Jesús en la cruz. Por eso ¡qué hermoso que no dejemos de bendecirnos con la señal de la cruz! ¡Gesto tan simple, tan sencillo!… hacerlo con fe es mas que andar en la vida pendientes de la sola “suerte”.

Yo te bautizo en el nombre del padre….. Después de que resucitó Jesús , sus 11 discípulos se fueron a Galilea, al monte que Jesús les había dicho. Ahí, Jesús les dijo: ¨ Vayan, entonces, y hagan que todos los pueblos sean mis discípulos, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo¨. .. Mateo 28,19. A partir de este mandato de Jesús celebramos el Bautismo como inicio del camino de discípulos, amigos de Jesús. Se me dio el regalo de la Fe: la Fe para que pueda ESCUCHAR y CONOCER a Dios. Recordemos que se trata de un conocer en el sentido bíblico del termino: No se trata de un concocimiento meramente intelectual. Quien más conoce a Dios vivirá cada día más como un hijo de Dios. Jesús nos dice: El que me ama (me conoce) será fiel a mi palabra. Es decir que puedo saber muuuucho de Dios y de la Biblia pero si no vivo fielmente a su palabra demuestro que solo sé pero no que amo y vivo como hijo de Dios, hermano, amigo y discípulo de Jesús. (Ver Juan 14, 23-24)

Se me dio la fe como una semillita… Toda semilla que se planta debe regarse para que a su tiempo dé un buen fruto. La fe es un regalo de Dios pero también es responsabilidad de nuestra parte. El día de nuestro Bautismo tres gestos nos hacían ver esta dimensión de responsabilidad con la fe: La vestidura blanca: revestidos de Cristo, signo de nuestra dignidad bautismal…para que con la ayuda y el ejemplo de tus familiares logres mantenerla sin mancha hasta la vida eterna. La Luz: a cada uno se le entregó una vela encendida en el cirio pascual, signo de Cristo resucitado, y se nos dijo: Reciban la Luz de Cristo, a ustedes (familia) se les confía la misión de hacer crecer esta luz (La fe) en el alma de estos niños…..para que este niño pueda vivir siempre como hijo de la luz y perseverando en la fe un día salga al encuentro del Señor cuando vuelva con todos sus santos. El efetá (ábrete): el sacerdote toca nuestros oidos y labios para que pronto puedas escuchar su Palabra y proclamar la fe para gloria y alabanza de Dios.

tareas Ademas de las mencionadas en el libro: Cada día dar gracias por el regalo del Bautismo. Averiguar la fecha de mi bautismo y celebrarlo cada año. Pedir a Dios conocerlo más para amarlo más. Compartir la fe con los hijos desde los gestos simples.