Trinidad

Celebramos hoy la fiesta de la Santísima Trinidad, Esta fiesta no es una invitación para descifrar el "Misterio", que se esconde tras "un Dios en tres personas", sino una oportunidad para contemplar a nuestro Dios, y purificar nuestro corazón de falsas ideas sobre Dios. El Dios cristiano no es solitario, es amor, es familia, es comunidad y creó a los hombres para hacerlos partícipes de ese misterio de amor.

LA SANTÍSIMA TRINIDAD por su grandeza, por nuestra pequeñez y No es fácil hablar de Dios... por su grandeza, por nuestra pequeñez y por la idea que nos inculcaron en la infancia, de que ese "Misterio" es una cosa difícil que no podemos entender. Nunca podremos comprender en plenitud, pero podemos crecer en el conocimiento del Misterio... La misma Biblia es una continua y progresiva revelación de Dios. Y este Misterio sólo fue revelado por el proprio Cristo.

Las lecturas de hoy profundizan el tema: La 1ª Lectura muestra un Dios compasivo y misericordioso. (Ex 34,4b-6;8-9) Dios se revela en el "Monte" oculto en la "Nube". Dios es un Padre que cuida con ternura de sus hijos, comprende sus errores incluso cuando pecan... - Moisés intercede por el pueblo, que se olvida de Dios y de la Alianza. "Dios misericordioso y clemente, paciente y rico en bondad y fiel... Perdona nuestros pecados... Camina con nosotros...".

DIOS LA TRINIDAD PADRE HIJO ES NO ES NO ES DIOS ES ES ESPÍRITU SANTO Hch 10,38 HIJO NO ES Y Dios renueva la Alianza con Israel. El Antiguo Testamento no tenía conocimiento del Misterio de la Trindad. Lo más importante en esa etapa de la revelación era la UNIDAD y ESPIRITUALIDAD de Dios, así como sus atributos de OMNIPOTENCIA y MISERICORDIA, como nos muestra el texto de hoy.

La 2ª Lectura muestra a un Dios próximo, "coN nosotros". Pablo saluda a los primeros cristianos con una fórmula trinitaria, que repetimos también hoy al comenzar la Misa: “La gracia de Nuestro Señor Jesucristo, el amor del Padre y la comunión del Espíritu Santo estén con vosotros". (2Co 13,11-13) Ese saludo atribuye a cada persona de la TrinIdad una función, aunque toda acción salvadora sea común en la Santísima TrinIdad:

- El PADRE es quien que tomó la iniciativa de salvar a los hombres, destinándolos a una felicidad eterna, en su familia; - El HIJO es el que realizó esa obra de salvación, con su venida al mundo y su fidelidad hasta la muerte; - El ESPÍRITU, el Amor que une al Padre con el Hijo, es el que fue infundido en el corazón de todos los cristianos en el Bautismo.

El Evangelio presenta un Dios que salva. (Jn 3,16-18) Dios no es un ser solitario y mudo, sino por ser trinitario es amor y alteridad. - “Tanto amó Dios al mundo que ENTREGÓ A SU HIJO Único..." - "Dios no lo envió al mundo para CONDENAR al mundo, sino para que se SALVE por Él". - "Quien no cree, YA ESTÁ CONDENADO". El juicio se hace AHORA por el proprio hombre, toda vez que acoge o rechaza la propuesta de salvación que DIOs le hace.

- En nosotros está el HIJO, que entregó su vida por nosotros. ¿Por qué Dios ha revelado este Misterio? Ciertamente, no ha sido para crear un problema en su comprensión. Porque nos ama, Él nos revela los secretos íntimos de la vida divina y nos INTRODUCE EN SU FAMILIA. - En nosotros está el PADRE, que nos llamó de la nada, nos insufló el soplo de la vida, nos dió un nombre, nos confió una misión. - En nosotros está el HIJO, que entregó su vida por nosotros. - En nosotros está el ESPÍRITU SANTO que nos ilumina y forta-talece en los caminos de Dios.

Y toda esta maravilla nos ha venido hasta nosotros por el BAUTISMO. Tener ese tesoro precioso dentro de nosotros es una dignidad, que debe provocar en nosotros tres actitudes: - ADORACIÓN: ¿Cómo no dar gloria, agradecer al huésped divino, que hace de nuestra alma un verdadero Santuario? - AMOR: Dios, a pesar de su grandeza, queda con nosotros como un padre amoroso. ¿Cómo no corresponder? - IMITACIÓN: El Amor nos llevará a la imitación de la Santísima Trinidad, dentro de lo posible en nuestra pequeñez.

¿Por qué esta Fiesta? No es tanto para desenvolver la doctrina de la Trinidad, misterio central de nuestra fe y de nuestra vida cristiana, sino un momento para recordar de dónde venimos y la comunión que debemos restaurar entre nosotros, para que seamos de hecho a su image y semejanza.

Estamos llamados a ser reflejos de la Santísima Trinidad, signos de comunión, de participación y esperanza, en un mundo tan dividido, individualista y desesperanzado. Renovemos nuestra fe, recibida en el Bautismo en nombre de la Trinidad. P. Antonio Geraldo Dalla Costa CS - 19.06.2011

Traducción: José Luis Uranga, CMF MI DOMINGO Con la Palabra de Dios Meditada por: P. Antonio Geraldo Dalla Costa CS Ilustración: Nelso Geraldo Ferronatto Traducción: José Luis Uranga, CMF Música: Música e Letra: Haydn CD: A SS Trindade no terceiro milênio Coral Palestrina de Curitiba Paulus Acceso a la Dirección: http://www.buscandonovasaguas.com