El País de las Maravillas Nymra Dagil
Había una vez una niña a la que le gustaban mucho los cuentos Había una vez una niña a la que le gustaban mucho los cuentos. Y en el descubrimiento de nuevos horizontes emprendió un camino hacia un mundo lleno de libros y bibliotecas, de autores y escritores, de profesores y maestros.
En ese mundo todos, se movían de acuerdo a ciertos parámetros y nadie se animaba a salir de ese esquema. Hasta que un día vio algo diferente y corrió detrás de ello. Era una docente que rompía con todos los esquemas y parámetros preestablecidos.
Y en ese perseguir se encontró en las practicas profesionales, con personas diferentes, que miraban la docencia desde un lugar otro y que, valoraban además los pensamientos y sentimientos de cada estudiante.
En las clases se compartían pensamientos, sentimientos, el valor humano y entre autores, reflexionaban sobre la practica docente, sobre la profesionalización de la docencia, sobre el hablar, el escribir y las autobiografías de cada estudiante.
También se recuperaban ideas que los llevaban a preguntarse por que estaban allí y en esa búsqueda interior, era fácil preguntarse una y otra vez ¿quien soy? ¿que quiero? y ¿que espero?
Cada docente que dictaba una clase lo hacia con un estilo propio y de manera diferente dejando atrás las practicas tradicionales de enseñanza
También había una puerta mágica que marcaba un antes y un después en cada estudiante, esa puerta conducía hacia las instituciones, fundaciones, etc. donde cada estudiante escogerá el lugar en donde realizará sus practicas.
Esta Historia Continuara