(Ap 19:7 [LBLA]) Regocijémonos y alegrémonos, y démosle a El la gloria, porque las bodas del Cordero han llegado y su esposa se ha preparado.

Cantares nos ofrece el crecimiento del cristiano pero no partiendo de bebes espirituales, sino desde que se aviva ese primer amor que habíamos perdido.

(Ap 2:4 [RV60]) Pero tengo contra ti, que has dejado tu primer amor.

Cnt. 1:2 ¡Oh, si él me besara con besos de su boca! Porque mejores son tus amores que el vino. El gozo que ofrece el mundo es nada, comparado con tenerte a ti.

La amada del Señor conoce el olor de EL

Cnt 1:3 Tus ungüentos tienen olor agradable, tu nombre es como ungüento purificado; por eso te aman las doncellas. La presencia del Señor, lleva consigo la hermosa fragancia de su naturaleza.

Sal 45:8 Mirra, áloe y casia exhalan todos tus vestidos; Desde palacios de marfil te recrean. La presencia del Señor, lleva consigo la hermosa fragancia de su naturaleza. Mansedumbre Dominio Propio Humildad

El Señor desea que estemos impregnados de Su olor

Cnt 1:4 Atráeme; en pos de ti correremos. El rey me ha metido en sus cámaras; Nos gozaremos y alegraremos en ti; Nos acordaremos de tus amores más que del vino; Con razón te aman.

Solo podemos conducir a otros al Señor, si nosotros estamos permitiendo que Dios guie nuestras vidas.

Cuando somos atraídos por Dios, los que nos rodean se benefician de esa fructificación.

Cnt 1:5 Morena soy, oh hijas de Jerusalén, pero codiciable Como las tiendas de Cedar, Como las cortinas de Salomón. Tener la revelación de la belleza del Señor, nos hace consientes de nuestras imperfecciones.

Is 6:1 En el año que murió el rey Uzías vi yo al Señor sentado sobre un trono alto y sublime, y sus faldas llenaban el templo. Is 6:5 Entonces dije: ¡Ay de mí! que soy muerto; porque siendo hombre inmundo de labios, y habitando en medio de pueblo que tiene labios inmundos, han visto mis ojos al Rey, Jehová de los ejércitos.

Cnt 1:6 No reparéis en que soy morena, Porque el sol me miró. Los hijos de mi madre se airaron contra mí; Me pusieron a guardar las viñas; Y mi viña, que era mía, no guardé. Es un error tremendo abandonar nuestra viña (corazón) por las obras!

La Sulamita pudo reconocer esto, solo cuando tuvo la experiencia de tener comunión intima con el Señor (Vs.2)

Cnt 1:7 Hazme saber, oh tú a quien ama mi alma, Dónde apacientas, dónde sesteas al mediodía; Pues ¿por qué había de estar yo como errante Junto a los rebaños de tus compañeros?

(Cnt 1:8) Si tú no lo sabes, oh hermosa entre las mujeres, Ve, sigue las huellas del rebaño, Y apacienta tus cabritas junto a las cabañas de los pastores.

Congregate!

(Cnt 1:9 [RV60]) A yegua de los carros de Faraón Te he comparado, amiga mía.

Los caballos de Egipto eran muy preciados, todos los reyes de la epoca y Salomon mismo exportaba de esos caballos (2º.Cr.1:16-17), porque eran de sangre pura, hermosos y valientes!

Pero aquellos que tiraban de los carros de Faraon, tambien debian ser mansos, dociles y obedientes.

Así como las yeguas de Faraón, estaban dedicadas a llevar solo al Rey, la amada del Señor debe solo dejarse conducir por el Espíritu Santo!

Crecimiento Espiritual de la Amada de Señor

El olor de Cristo (Mansedumbre, humildad y Dominio propio) deben ser características de la Iglesia

Mientras mas comunión tenemos con el Señor, mas reconocemos nuestra imperfecciones y debilidades

Para crecer espiritualmente es necesario congregarse

Debemos tener comunión intima para poder tener el olor de los ungüentos de Cristo.

Así como las Yeguas de Faraón, la amada debe ser dócil y dejarse conducir por el Señor.