Imaginémosnos que todo nuestro Universo conocido, tanto material como espiritual, tanto exterior como interior, fuese la evolución y el desarrollo de una "semilla" en la cual, desde un principio, estaba grabada toda su potencialidad. La ley, ese código inscrito en la semilla, tiene como esencia una voluntad que la impulsa a su propio cumplimiento. Es decir, la semilla de una rosa tiene como ideal el ser una rosa. Esta es su verdadera voluntad. Y así ocurre con todo. El Universo entero, así como sus infinidades-infinitas manifestaciones, sigue y cumple un plan de desarrollo y funcionamiento que expresa una ley omniabarcante. Se puede decir que el ideal, es decir, la voluntad individual inscrita en cada detalle del universo, no solo se limita a cumplir su misión individual, sino que automáticamente aporta su necesaria contribución al funcionamiento de todo lo demás. Esto es, todo está, inseparablemente relacionado con todo de tal manera que el buen funcionamiento de casa cosa individual es necesario para la salud del organismo en su totalidad. Observando éste funcionamiento en la Naturaleza podemos decir que, en general, el noventa y nueve por ciento de las manifestaciones sigue fielmente su ideal sin apartarse del camino trazado por él. Parece ser que sólo el hombre es la gran excepción. Este hecho nos sitúa en una posición respecto al ideal y la voluntad universal, ya que el ser humano es el único que tiene libertad de ir incluso en contra de su propio bien y por tanto de su propio ideal y de su verdadera voluntad. De hecho, esto es lo que más le caracteriza. Infinita - Mente. 2013

El hombre se aparta del mundo, se vive así mismo como algo escindido y comienza a sufrir. Ya sólo es capaz de identificarse consigo mismo, con una parte, en lugar de con la totalidad. ¡Pero es justamente éste olvido de la totalidad, éste aislarle y separarse del gran cuerpo cósmico, lo que ha hecho al hombre, hombre.! Sólo a partir de ésta posición especial, a partir de la conciencia del sufrimiento que trae a separación, puede él ahora, animado por un anhelo implacable, sustentado por un recuerdo paradisiaco y con el fuego ardiente de un amor que todo lo vence, volver a conquistar la conciencia de su totalidad. Si llega a conseguirlo, entonces ha alcanzado su verdadera meta y con ello ha cumplido con el ideal inscrito en la semilla de su ser. Let us imagine that our entire known universe, both material and spiritual, both exterior and interior, was the evolution and development of a seed which, from the outset, was recorded all its potential. The law, the code on the seed, is essentially a will that drives their own compliance. The rose seed has as a rose perfect being. This is your true will. And so it goes with everything. The whole Universo and its infinities - infinite manifestations, continues and meets a development plan and operating expresses an encompassing law. One can say that the ideal, ie registered individual will in every detail of the universe, not only limited to fulfill its individual mission, but automatically provides the necessary contribution to the functioning of everything else. That is, everything is inseparably connected to everything so that the proper functioning of every single thing necessary for the health of the whole organism.

Noting this operation in nature can be said that, in general, ninety nine percent of demonstrations faithfully follows his ideal without departing from the path by. It seems that only man is the great exception. This puts us in a position key from the ideal and universal will, and that man is the only one who has the freedom even go against their own good and therefore his own ideal and his true will. In fact, this is what he characterized. The man from the world, they also live as something split and begins to suffer. It is only able to identify himself with one hand, instead of the whole. But's just forget it all, this isolated and separated from the great cosmic body, which made man, man! Only from this special position, from the awareness of the suffering that brings separation, can he now animated by a relentless desire, supported by a memory heavenly and the burning fire of a love that conquers all, reconquer the consciousness in its entirety. If you come to get it, then it has achieved its real goal and thus has complied with the ideal inscribed on the seed of his being. Roberto Ibiricu Coto.

La semilla cósmica Pintura/oro rojo/Lienzo. 130 x 97 cms.

La semilla cósmica Pintura/oro rojo/vinilo/Lienzo. 130 x 97 cms.

El ombligo del mundo Pintura/Lienzo. 260 x 97 cms.

Universo compartido Pintura/Lienzo. 260 x 97 cms.

Renacer Pintura/plata/Lienzo. 130 x 97 cms.

Al final del cielo Pintura/plata/Lienzo. 194 x 130 cms.

La vida en un cuerpo deshabitado Mixta/Lienzo. 130 x 97 cms.

La vida en un cuerpo deshabitado Mixta/Lienzo. 130 x 97 cms.

en tierra de nadie Mixta/Lienzo. 130 x 97 cms.

La flor se ahoga en su propio perfume Pintura/hule plástico/Lienzo. 130 x 97 cms.

El secuestro de la inocencia Mixta/Lienzo.130x97cms.

Soñé que soñaba Mixta/Lienzo.130x97cms.