Lecciones en la epístola de San Juan Capitulo 2

Introducción Nuestra relación con Dios 1Jn 1:3 lo que hemos visto y oído, eso os anunciamos, para que también vosotros tengáis comunión con nosotros; y nuestra comunión verdaderamente es con el Padre, y con su Hijo Jesucristo. Las bendiciones de vivir en esta comunión

Ayuda al que conoce a Dios 1Jn 2:1 Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis; y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo. 1Jn 2:2 Y él es la propiciación por nuestros pecados; y no solamente por los nuestros, sino también por los de todo el mundo. 1.  paraklētos Llamado a nuestro lado, uno que nos ayuda, intercede , asiste legalmente Cristo exaltado en su trono a la diestra del Padre, intercediendo por nosotros.

El Espíritu Santo nos asiste en la tierra   1Jn 2:20 Pero vosotros tenéis la unción del Santo, y conocéis todas las cosas. 1Co 2:12 Y nosotros no hemos recibido el espíritu del mundo, sino el Espíritu que proviene de Dios, para que sepamos lo que Dios nos ha concedido, El Espíritu Santo nos guía a toda verdad

2. El es el Hilasmos - el cordero expiatorio. La propiciación - el que paga el daño, el que lleva la culpa La satisfacción o reparación hecha por un daño. Cuando ofendemos pagamos la deuda Cuando dañamos se nos demanda pagamos la deuda Satisfacer al ofendido. Dios ha sido ofendido por nuestro pecado Y Jesús, satisface esa ofensa con su propia vida. Su muerte redentora es suficiente ante los ojos de Dios Padre, para vivir en paz delante de el.

Actitud del que conoce a Dios Obediencia e imitación de Jesús 1Jn 2:3 Y en esto sabemos que nosotros le conocemos, si guardamos sus mandamientos. Jn 2:6 El que dice que permanece en él, debe andar como él anduvo.   amor por mi prójimo 1Jn 2:10 El que ama a su hermano, permanece en la luz, y en él no hay tropiezo. 1Jn 2:11 Pero el que aborrece a su hermano está en tinieblas, y anda en tinieblas, y no sabe a dónde va, porque las tinieblas le han cegado los ojos.

falta de apego a las cosas del mundo. 1Jn 2:15 No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él.

La confesión del que conoce a Dios 1Jn 2:22 ¿Quién es el mentiroso, sino el que niega que Jesús es el Cristo? Este es anticristo, el que niega al Padre y al Hijo. 1Jn 2:23 Todo aquel que niega al Hijo, tampoco tiene al Padre. El que confiesa al Hijo, tiene también al Padre. Los anticristos, se negaban a honrar a Jesús Cerintio- Dios descendió en el bautismo y se fue antes de la muerte. Los judíos no creyeron que el era el Cristo El escogido para reinar sobre toda nación. Ungido es sinónimo de rey. La acción de ungir, que era la ceremonia para la coronación del rey, Luego vino a ser sinónimo de rey. El ungido- es el rey. El ungido de Jehová., es el rey que Dios ha escogido, la esperanza de Israel, la esperanza del hombre.

Salmo 2:2 Se levantarán los reyes de la tierra, Y príncipes consultarán unidos ,Contra Jehová y contra su ungido, diciendo: Salmo 2:3 Rompamos sus ligaduras, Salmo 2:6 Pero yo he puesto mi rey Sobre Sion, mi santo monte. Salmo 2:7 Yo publicaré el decreto; Jehová me ha dicho: Mi hijo eres tú; Yo te engendré hoy. Salmo 2:11 Servid a Jehová con temor, Y alegraos con temblor. Salmo 2:12 Honrad al Hijo, para que no se enoje, y perezcáis en el camino;

Honrarle- es confesarle y es doblar nuestras rodillas ante El Fil 2:9 Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre, Fil 2:10 para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; Fil 2:11 y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre.

1Jn 5:20 Pero sabemos que el Hijo de Dios ha venido, y nos ha dado entendimiento para conocer al que es verdadero; y estamos en el verdadero, en su Hijo Jesucristo. Este es el verdadero Dios, y la vida eterna Rom 9:5 de quienes son los patriarcas, y de los cuales, según la carne, vino Cristo, el cual es Dios sobre todas las cosas, bendito por los siglos. Amén.