FORMACIÓN PARA FOREX TRADERS 4ª Parte Los peligros del Mercado de Divisas 08/11/2005

Introducción En el primer capítulo vimos una visión global de los orígenes y evolución del Mercado de Divisas, e introducimos algunas magnitudes fundamentales. Después entramos de lleno en el mercado Forex al describir cómo funciona en la actualidad. En el último capítulo analizamos de forma práctica el comportamiento clásico del mercado y del inversor realizando una simulación. Hoy, en esta última parte de cursos de formación, vamos a continuar con la visión introducida en el capítulo anterior para centrarnos en analizar los principales peligros e inconvenientes que el inversor puede encontrarse a la hora de operar en el Mercado de Divisas.

A la hora de analizar los riesgos que nos podemos encontrar en el Mercado de Divisas, será bueno hacer una distinción entre los riesgos específicos de este mercado y los riesgos que el comportamiento del inversor puede crear en contra de sus propios intereses. Ya hemos descrito como en la actualidad Forex se puede definir como el mercado más grande y eficiente del mundo; plantear riesgos de liquidez, manipulación, etc. Parece difícil, pero de todas formas analizaremos los posibles riesgos inherentes al mercado. El mayor peligro de operar en Forex no proviene del mercado en sí, sino del incumplimiento por parte del inversor de una serie de conductas que puede tener consecuencias muy graves. Una vez que conocemos el comportamiento del Forex, apreciaremos con facilidad como la gran mayoría de las situaciones de riesgo vienen propiciadas por el comportamiento del inversor, y rara vez es el mercado el causante.

1. Los riesgos del Mercado Como ya hemos dicho, el Forex es el más líquido del mundo, y ese es un primer motivo que justifica la reducción de muchos de los riesgos clásicos de este mercado. Otro factor de relevancia ha sido el enorme desarrollo de las aplicaciones informáticas durante los últimos años, hecho que ha ayudado a la reducción de riesgos operativos y en definitiva a la mayor eficiencia a la hora de negociar. De todas formas, siempre puede haber opiniones que discrepen al respecto. El hecho de ser un mercado global abierto las 24 horas puede dar mayor eficiencia al mercado para unos, pero otros lo pueden tomar como un factor de riesgo adicional. Para ello, lo mejor es definir a continuación algunos de los riesgos básicos y la ponderación que pueden tener en comparación con otros mercados.

Riesgo de liquidez En una sesión se pueden negociar en Forex volúmenes nominales mayores al resto de mercados organizados del mundo juntos, con lo que no existe riesgo de no encontrar contrapartida. Si negociamos algún par de divisas exótico, tendremos que tener en cuenta de antemano las horquillas de negociación y sus volúmenes habituales para no vernos sorprendidos. Riesgo de manipulación Hasta hace algunos años, algún agente individual muy poderoso sí podría mover el mercado a su favor. Baste como ejemplo el hundimiento de la Libra esterlina (entre otras divisas) en septiembre de Pero actualmente, debido al mayor número de agentes del mercado (con objetivos contrarios en muchos casos) hacen mucho más eficiente el mercado e imposibilitan que un solo agente pueda obtener un beneficio seguro.

Riesgo de intervención La entrada de un Banco Central a favor o en contra de una divisa sí es un factor muy a tener en cuenta por los inversores. Para los cruces principales, o major currencies en la actualidad los efectos de una intervención suelen ser limitados, aunque en el corto plazo producen movimientos bruscos en muy poco tiempo. Con las divisas de menor liquidez las situaciones de intervención sí provocan movimientos mucho más prolongados que conviene vigilar. Riesgo técnico u operativo Hasta hace años, la negociación era mucho más arcaica (corros, telefónicamente, etc.) y eso daba lugar a mayores riesgos operativos. Actualmente la negociación en Forex se realiza a través de sistemas informáticos, muy desarrollados especialmente en los últimos 5 años, y eso ha ayudado a que los inversores puedan acceder al mercado en iguales condiciones, sin importar el volumen que negocien.

Otros riesgos Ya hemos descrito las razones fundamentales que hacen de Forex un mercado de enorme eficiencia. Pero además de ello debemos tener muy en cuenta las propias características de este mercado, que, si no se conocen perfectamente pueden suponer un riesgo muy grande para el inversor. Se trata de un mercado fuertemente apalancado, y donde la gran mayoría de las operaciones que se realizan son de carácter intradiario, lo que a veces provoca que los movimientos puedan tener rangos más amplios en momentos puntuales, debido a la entrada masiva de estos inversores a favor o en contra de una divisa. Además, el mercado está muy pendiente ante cualquier noticia, dato o rumor que se pueda producir, y reacciona con muchísima rapidez con ellos, sin importar la hora o el lugar de origen de este.

En definitiva, y por la parte que corresponde al mercado, la evolución del Forex (muy especialmente durante la última década) ha hecho que estos riesgos analizados cada vez sean más pequeños, y en consecuencia tengan un menor impacto sobre el inversor. Son los riesgos en el comportamiento del inversor los que en la gran mayoría de los casos pueden provocar situaciones de peligro. Por la experiencia de los últimos años puedo asegurar que un porcentaje muy alto de las situaciones de riesgo vienen provocadas por la negligencia, confianza o falta de disciplina por parte del inversor. Pasemos ahora a valorar esta clase de riesgos.

2. Riesgos del inversor El Mercado de Divisas es muy especializado, de enorme rapidez y en el que se negocia con un alto nivel de apalancamiento. En cualquier mercado financiero debemos mantener unos criterios de disciplina; por las razones arriba expuestas, estas normas o criterios deben seguirse siempre. Con independencia de la estrategia y plazo a seguir por el inversor, siempre tenemos que tener claro de antemano nuestro método a seguir. La piedra angular, o componente más importante a la hora de negociar, debe ser el control de las pérdidas. Antes de abrir una posición, debemos conocer la pérdida máxima que estamos dispuestos a asumir (esto es importantísimo).

Una vez definida esta pérdida máxima, debemos estudiar el nivel donde tenemos que fijar una orden automática de Stop-loss. Si este nivel de Stop no es significativo, directamente no abriremos ninguna posición. Para definir este nivel como significativo debemos tener un nivel de salida donde tengamos bastante certeza de que nuestra estrategia utilizada no ha salido bien (aunque luego se pueda dar la vuelta). Si el nivel de Stop es significativo, podremos abrir posición, pero inmediatamente tendremos que poner nuestra orden de stop en el mercado. El hecho de no hacerlo es un factor que incrementa mucho el riesgo de nuestra inversión. Por el otro lado, para fijar el nivel de ganancias no hay que tan exhaustivos como con los niveles de pérdidas. Conviene que sea siempre una ganancia razonable (tiene poco sentido intentar ganar 10 y estar dispuesto a perder 50).

** En definitiva se trata simplemente de intentar tener previsto el mayor número de situaciones posible, y la forma de actuar en cada una de ellas. Si somos disciplinados y respetamos esta norma, tendremos mucho ganado para obtener beneficios en nuestra inversión. Por el contrario, si somos impulsivos y vamos cambiando de estrategia continuamente seremos presa fácil para este mercado. Como resumen, debemos quedarnos con la idea que el Mercado de Divisas funciona con alta eficiencia, y que es muy raro que sea el culpable de una situación de riesgo para nuestras carteras, porque somos nosotros, los propios inversores, los que en la gran mayoría de los casos nos ponemos en desventaja al no seguir estas reglas básicas de inversión.