XIII Domingo Ordinario 26 de Junio XIII Domingo Ordinario 26 de Junio.

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2 XIII Domingo Ordinario 26 de Junio XIII Domingo Ordinario 26 de Junio

3 1 Por favor apague su celular apague su celular

4 Lectura del primer libro de los Reyes 1 Reyes 19, 16b. 19-21

5 En aquellos tiempos, el Señor le dijo a Elías: "Unge a Eliseo, el hijo de Safat, originario de Abel-Mejolá, para que sea profeta en lugar tuyo". Elías partió luego y encontró a

6 Eliseo,, hijo de Safat, que estaba arando. Delante de él trabajaban doce yuntas de bueyes y él trabajaba con la última. Elías pasó junto a él

7 y le echó encima su manto. Entonces Eliseo abandonó sus bueyes, corrió detrás de Elías y le dijo: "Déjame dar a mis padres el beso de despedida y te seguiré". Elías le contestó:

8 "Ve y vuelve, porque bien sabes lo que ha hecho el Señor contigo". Se fue Eliseo, se llevó los dos bueyes de la yunta, los sacrificó, asó la carne en

9 la hoguera que hizo con la madera del arado y la repartió a su gente para que se la comieran. Luego se levantó, siguió a Elías y se puso a su servicio.

10 Te alabamos SEÑOR Palabra de Dios

11 SALMO 15

12 R.) Enséñanos, Señor, el camino de la vida.

13 Ordinario Protégeme, Dios mío, pues eres mi refugio. Yo siempre he dicho que tú eres mi Señor. El Señor es la parte que me ha tocado en herencia: mi vida está en sus manos. / R

14 R.) Enséñanos, Señor, el camino de la vida.

15 Bendeciré al Señor, que me aconseja, hasta de noche me instruye internamente. Tengo siempre presente al Señor y con él a mi lado, jamás tropezaré. / R

16 R.) Enséñanos, Señor, el camino de la vida.

17 Por eso se me alegran el corazón y el alma y mi cuerpo vivirá tranquilo, porque tú no me abandonarás a la muerte ni dejarás que sufra yo la corrupción. / R

18 R.) Enséñanos, Señor, el camino de la vida.

19 Enséñame el camino de la vida, sáciame de gozo en tu presencia y de alegría perpetua junto a ti. / R

20 R.) Enséñanos, Señor, el camino de la vida.

21 ( Gal 5, 1. 13-18 ) Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Gálatas

22 Hermanos: Cristo nos ha liberado para que seamos libres. Conserven, pues, la libertad y no se sometan de nuevo al yugo de la esclavitud. Su vocación, hermanos, es la

23 libertad. Pero cuiden de no tomarla como pretexto para satisfacer su egoísmo; antes bien, háganse servidores los unos de los otros por amor.

24 Porque toda la ley se resume en un solo precepto: Amarás a tu prójimo como a ti mismo. Pues si ustedes se muerden y devoran mutuamente, acabarán por destruirse

25 Los exhorto, pues, a que vivan de acuerdo con las exigencias del Espíritu; así no se dejarán arrastrar por el desorden egoísta del hombre. Este desorden está en contra del

26 Espíritu de Dios, y el Espíritu está en contra de ese desorden. Y esta oposición es tan radical, que les impide a ustedes hacer lo que querrían hacer. Pero si los guía el

27 Espíritu, ya no están ustedes bajo el dominio de la ley.

28 Palabra de Dios. Te alabamos, Señor.

29 Habla, Señor, que tu siervo te escucha. Tú tienes palabras de vida eterna. Habla, Señor, que tu siervo te escucha. Tú tienes palabras de vida eterna. Aleluya, Aleluya R. Aleluya, Aleluya.

30 Lectura del santo Evangelio según San Lucas (Lc 9, 51-62) A Gloria a ti, Señor

31 Ordinario Cuando ya se acercaba el tiempo en que tenía que salir de este mundo, Jesús tomó la firme determinación de emprender el viaje a Jerusalén. Envió mensajeros por delante y

32 Ordinario ellos fueron a una aldea de Samaria para conseguirle alojamiento; pero los samaritanos no quisieron recibirlo, porque supieron que iba a Jerusalén.

33 Ante esta negativa, sus discípulos Santiago y Juan le dijeron: "Señor, ¿quieres que hagamos bajar fuego del cielo para que acabe con ellos?" Pero Jesús se volvió hacia

34 Ordinario ellos y los reprendió. Después se fueron a otra aldea. Mientras iban de camino, alguien le dijo a Jesús: "Te seguiré a dondequiera que vayas". Jesús le respondió:

35 Ordinario "Las zorras. tienen madrigueras y los pájaros, nidos; pero el Hijo del hombre no tiene en dónde reclinar la cabeza". A otro, Jesús le dijo: "Sígueme".

36 Ordinario Pero él le respondió: "Señor, déjame ir primero a enterrar a mi padre". Jesús le replicó: "Deja que los muertos entierren a sus muertos. Tú ve y anuncia el Reino de Dios".

37 Ordinario Otro le dijo: "Te seguiré, Señor; pero déjame primero despedirme de mi familia". Jesús le contestó: "El que empuña el arado y mira hacia

38 Ordinario atrás, no sirve para el Reino de Dios".

39 Palabra del Señor A Gloria a ti Señor Jesús Palabra del Señor A Gloria a ti Señor Jesús

40 Oraciones de los Fieles

41 S :Dejándonos conducir por el Espíritu, elevemos a Dios nuestro Padre una oración que recoja las necesidades y los sufrimientos de todos sus hijos. Digámosle:

42 Te rogamos óyenos

43 Oremos por todos los misioneros llamados a anunciar su mensaje de salvación en medio de contrariedades y oposiciones, para que permanezcan firmes y sean testigos de la misericordia,

44 Roguemos al Señor: Te rogamos óyenos

45 Oremos por los gobernantes y legisladores que trabajan por la paz y la fraternidad entre los pueblos, para que todos apoyemos sus iniciativas y obremos en favor de los demás,

46 Roguemos al Señor: Te rogamos óyenos

47 Oremos por las personas que han recibido una vocación especial en la Iglesia, para que por la mediación de Ntra Sra de Coromoto, sean signo de la presencia de Cristo en medio de sus hermanos,

48 Roguemos al Señor: Te rogamos óyenos

49 Oremos por aquellos que no han sabido valorar el don de la libertad que nos trajo Cristo y caen en la esclavitud de los vicios y las adicciones, para que rompan sus cadenas y caminen libres buscando la verdad,

50 Roguemos al Señor: Te rogamos óyenos

51 Oremos por las familias y las comunidades para que, iluminados por la Palabra y alimentados por la Eucaristía, puedan hacer con la fuerza del Espíritu todo el bien que necesita nuestra sociedad

52 Roguemos al Señor: Te rogamos óyenos

53 S :Derrama, Padre, una bendición copiosa sobre estas intenciones de oración para poder ser fieles seguidores de tu Hijo, Jesucristo, que vive y reina por los siglos de los siglos.

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