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Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. Ser y hacer Soportar la tentación Dios no tienta Por lo cual, desechando toda inmundicia y abundancia de malicia, recibid con mansedumbre la palabra implantada, la cual puede salvar vuestras almas. El diablo es el que tienta Usa lo que deseamos Nos atrae y seduce El pecado es concebido Hay que nacer de nuevo El pecado produce muerte La dadiva de Dios es vida En mi corazón he guardado tus dichos, Para no pecar contra ti. Vivir una nueva vida Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios. Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón

Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. Ser y hacer Por lo cual, desechando toda inmundicia y abundancia de malicia, recibid con mansedumbre la palabra implantada, la cual puede salvar vuestras almas. Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida En mi corazón he guardado tus dichos, Para no pecar contra ti. Vivir una nueva vida Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios. Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón

Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. Por lo cual, desechando toda inmundicia y abundancia de malicia, recibid con mansedumbre la palabra implantada, la cual puede salvar vuestras almas. En mi corazón he guardado tus dichos, Para no pecar contra ti. Así que la fe es por el oír, y el oír, por la palabra de Dios. Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón

Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón

Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón

Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón

Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón

Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón

Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón

Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón

Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón

Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta? Respondiendo Pedro, le dijo: Aunque todos se escandalicen de ti, yo nunca me escandalizaré. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón

Ser y hacer Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta? Respondiendo Pedro, le dijo: Aunque todos se escandalicen de ti, yo nunca me escandalizaré. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos.

Ser y hacer Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta? Respondiendo Pedro, le dijo: Aunque todos se escandalicen de ti, yo nunca me escandalizaré.

Ser y hacer Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta? Respondiendo Pedro, le dijo: Aunque todos se escandalicen de ti, yo nunca me escandalizaré. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven y sígueme.

Ser y hacer Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta? Respondiendo Pedro, le dijo: Aunque todos se escandalicen de ti, yo nunca me escandalizaré. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven y sígueme.

Ser y hacer Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta? Respondiendo Pedro, le dijo: Aunque todos se escandalicen de ti, yo nunca me escandalizaré. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven y sígueme.

Ser y hacer Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta? Respondiendo Pedro, le dijo: Aunque todos se escandalicen de ti, yo nunca me escandalizaré. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven y sígueme. Oyendo el joven esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas posesiones.

Ser y hacer Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta? Respondiendo Pedro, le dijo: Aunque todos se escandalicen de ti, yo nunca me escandalizaré. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven y sígueme. Oyendo el joven esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas posesiones.

Ser y hacer Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta? Respondiendo Pedro, le dijo: Aunque todos se escandalicen de ti, yo nunca me escandalizaré. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven y sígueme. Oyendo el joven esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas posesiones.

Ser y hacer Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta? Respondiendo Pedro, le dijo: Aunque todos se escandalicen de ti, yo nunca me escandalizaré. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. Jesús le dijo: Si quieres ser perfecto, anda, vende lo que tienes, y dalo a los pobres, y tendrás tesoro en el cielo; y ven y sígueme. Oyendo el joven esta palabra, se fue triste, porque tenía muchas posesiones.

Ser y hacer Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta? Respondiendo Pedro, le dijo: Aunque todos se escandalicen de ti, yo nunca me escandalizaré. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. Pedro estaba sentado fuera en el patio; y se le acercó una criada, diciendo: Tú también estabas con Jesús el galileo.

Ser y hacer Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta? Respondiendo Pedro, le dijo: Aunque todos se escandalicen de ti, yo nunca me escandalizaré. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. Pedro estaba sentado fuera en el patio; y se le acercó una criada, diciendo: Tú también estabas con Jesús el galileo. Mas él negó delante de todos, diciendo: No sé lo que dices.

Ser y hacer Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta? Respondiendo Pedro, le dijo: Aunque todos se escandalicen de ti, yo nunca me escandalizaré. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. Pedro estaba sentado fuera en el patio; y se le acercó una criada, diciendo: Tú también estabas con Jesús el galileo. Mas él negó delante de todos, diciendo: No sé lo que dices.

Ser y hacer Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. El joven le dijo: Todo esto lo he guardado desde mi juventud. ¿Qué más me falta? Respondiendo Pedro, le dijo: Aunque todos se escandalicen de ti, yo nunca me escandalizaré. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. Pedro estaba sentado fuera en el patio; y se le acercó una criada, diciendo: Tú también estabas con Jesús el galileo. Mas él negó delante de todos, diciendo: No sé lo que dices. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón

Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. Pedro estaba sentado fuera en el patio; y se le acercó una criada, diciendo: Tú también estabas con Jesús el galileo. Mas él negó delante de todos, diciendo: No sé lo que dices. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón

Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No se contenten sólo con escuchar la palabra, pues así se engañan ustedes mismos. Llévenla a la práctica (NVI). Pero no basta con oír el mensaje; hay que ponerlo en práctica, pues de lo contrario se estarían engañando ustedes mismos (DHH). No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra

Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra

Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra

Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra

La ley de Jehová es perfecta, que convierte el alma; El testimonio de Jehová es fiel, que hace sabio al sencillo. Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra

La ley de Jehová es perfecta, que convierte el alma; El testimonio de Jehová es fiel, que hace sabio al sencillo. Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Y andaré en libertad, Porque busqué tus mandamientos.

La ley de Jehová es perfecta, que convierte el alma; El testimonio de Jehová es fiel, que hace sabio al sencillo. Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Y andaré en libertad, Porque busqué tus mandamientos.

La ley de Jehová es perfecta, que convierte el alma; El testimonio de Jehová es fiel, que hace sabio al sencillo. Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Y andaré en libertad, Porque busqué tus mandamientos.

Le respondieron: Linaje de Abraham somos, y jamás hemos sido esclavos de nadie. ¿Cómo dices tú: Seréis libres? Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Y andaré en libertad, Porque busqué tus mandamientos.

Le respondieron: Linaje de Abraham somos, y jamás hemos sido esclavos de nadie. ¿Cómo dices tú: Seréis libres? Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Y andaré en libertad, Porque busqué tus mandamientos. Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado.

Le respondieron: Linaje de Abraham somos, y jamás hemos sido esclavos de nadie. ¿Cómo dices tú: Seréis libres? Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Y andaré en libertad, Porque busqué tus mandamientos. Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado.

Le respondieron: Linaje de Abraham somos, y jamás hemos sido esclavos de nadie. ¿Cómo dices tú: Seréis libres? Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Y andaré en libertad, Porque busqué tus mandamientos. Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado.

Le respondieron: Linaje de Abraham somos, y jamás hemos sido esclavos de nadie. ¿Cómo dices tú: Seréis libres? Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Y andaré en libertad, Porque busqué tus mandamientos. Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado.

Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Y andaré en libertad, Porque busqué tus mandamientos. ¿No sabéis que si os sometéis a alguien como esclavos para obedecerle, sois esclavos de aquel a quien obedecéis, sea del pecado para muerte, o sea de la obediencia para justicia? Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado.

Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Y andaré en libertad, Porque busqué tus mandamientos. ¿No sabéis que si os sometéis a alguien como esclavos para obedecerle, sois esclavos de aquel a quien obedecéis, sea del pecado para muerte, o sea de la obediencia para justicia? Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado.

Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Y andaré en libertad, Porque busqué tus mandamientos. ¿No sabéis que si os sometéis a alguien como esclavos para obedecerle, sois esclavos de aquel a quien obedecéis, sea del pecado para muerte, o sea de la obediencia para justicia? Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado.

Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Y andaré en libertad, Porque busqué tus mandamientos. ¿No sabéis que si os sometéis a alguien como esclavos para obedecerle, sois esclavos de aquel a quien obedecéis, sea del pecado para muerte, o sea de la obediencia para justicia? Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado.

Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Y andaré en libertad, Porque busqué tus mandamientos. ¿No sabéis que si os sometéis a alguien como esclavos para obedecerle, sois esclavos de aquel a quien obedecéis, sea del pecado para muerte, o sea de la obediencia para justicia? Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado.

Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres. ¿No sabéis que si os sometéis a alguien como esclavos para obedecerle, sois esclavos de aquel a quien obedecéis, sea del pecado para muerte, o sea de la obediencia para justicia? Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado.

Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres. ¿No sabéis que si os sometéis a alguien como esclavos para obedecerle, sois esclavos de aquel a quien obedecéis, sea del pecado para muerte, o sea de la obediencia para justicia? Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado.

Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres. ¿No sabéis que si os sometéis a alguien como esclavos para obedecerle, sois esclavos de aquel a quien obedecéis, sea del pecado para muerte, o sea de la obediencia para justicia? Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado.

Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres. Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte. Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado.

Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres. Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte. Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado.

Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres. Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte. Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado.

Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres. Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte. Para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.

Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres. Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte. Para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.

Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres. Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte. Para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.

Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres. Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte. Para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.

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Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres. Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte. Para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.

Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres. Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte. Para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.

Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres. Porque la ley del Espíritu de vida en Cristo Jesús me ha librado de la ley del pecado y de la muerte. Para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.

Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres. Si alguno se cree religioso entre vosotros, y no refrena su lengua, sino que engaña su corazón, la religión del tal es vana. Para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.

Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres. Si alguno se cree religioso entre vosotros, y no refrena su lengua, sino que engaña su corazón, la religión del tal es vana. Para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.

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Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres. Si alguno se cree religioso entre vosotros, y no refrena su lengua, sino que engaña su corazón, la religión del tal es vana. Para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.

Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres. Si alguno se cree religioso entre vosotros, y no refrena su lengua, sino que engaña su corazón, la religión del tal es vana. Para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.

La religión pura y sin mácula delante de Dios el Padre es esta: Visitar a los huérfanos y a las viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin mancha del mundo. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres. Si alguno se cree religioso entre vosotros, y no refrena su lengua, sino que engaña su corazón, la religión del tal es vana. Para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.

La religión pura y sin mácula delante de Dios el Padre es esta: Visitar a los huérfanos y a las viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin mancha del mundo. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres. Si alguno se cree religioso entre vosotros, y no refrena su lengua, sino que engaña su corazón, la religión del tal es vana. Para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.

La religión pura y sin mácula delante de Dios el Padre es esta: Visitar a los huérfanos y a las viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin mancha del mundo. Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres. Si alguno se cree religioso entre vosotros, y no refrena su lengua, sino que engaña su corazón, la religión del tal es vana. Para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.

Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solo oidores, engañándoos a vosotros mismos. No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Así que, si el Hijo os libertare, seréis verdaderamente libres. Si alguno se cree religioso entre vosotros, y no refrena su lengua, sino que engaña su corazón, la religión del tal es vana. Para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. La religión pura y sin mácula delante de Dios el Padre es esta: Visitar a los huérfanos y a las viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin mancha del mundo.

Por medio de las cuales nos ha dado preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de la concupiscencia No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Si alguno se cree religioso entre vosotros, y no refrena su lengua, sino que engaña su corazón, la religión del tal es vana. Para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.

La religión pura y sin mácula delante de Dios el Padre es esta: Visitar a los huérfanos y a las viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin mancha del mundo. Por medio de las cuales nos ha dado preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de la concupiscencia No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Si alguno se cree religioso entre vosotros, y no refrena su lengua, sino que engaña su corazón, la religión del tal es vana. Para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu.

La religión pura y sin mácula delante de Dios el Padre es esta: Visitar a los huérfanos y a las viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin mancha del mundo. Por medio de las cuales nos ha dado preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de la concupiscencia No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Si alguno se cree religioso entre vosotros, y no refrena su lengua, sino que engaña su corazón, la religión del tal es vana. Para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Religión pura

La religión pura y sin mácula delante de Dios el Padre es esta: Visitar a los huérfanos y a las viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin mancha del mundo. Por medio de las cuales nos ha dado preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de la concupiscencia No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Si alguno se cree religioso entre vosotros, y no refrena su lengua, sino que engaña su corazón, la religión del tal es vana. Para que la justicia de la ley se cumpliese en nosotros, que no andamos conforme a la carne, sino conforme al Espíritu. Religión pura

La religión pura y sin mácula delante de Dios el Padre es esta: Visitar a los huérfanos y a las viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin mancha del mundo. Por medio de las cuales nos ha dado preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de la concupiscencia No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Entonces el Rey dirá a los de su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo. Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fui forastero, y me recogisteis; estuve desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí. Religión pura

La religión pura y sin mácula delante de Dios el Padre es esta: Visitar a los huérfanos y a las viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin mancha del mundo. Por medio de las cuales nos ha dado preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de la concupiscencia No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Entonces el Rey dirá a los de su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo. Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fui forastero, y me recogisteis; estuve desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí. Religión pura

La religión pura y sin mácula delante de Dios el Padre es esta: Visitar a los huérfanos y a las viudas en sus tribulaciones, y guardarse sin mancha del mundo. Por medio de las cuales nos ha dado preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de la concupiscencia No nos engañemos Ser y hacer Hay que nacer de nuevo La dadiva de Dios es vida Vivir una nueva vida Implantar la palabra de Dios en nuestro corazón Hacedores de la palabra Entonces el Rey dirá a los de su derecha: Venid, benditos de mi Padre, heredad el reino preparado para vosotros desde la fundación del mundo. Porque tuve hambre, y me disteis de comer; tuve sed, y me disteis de beber; fui forastero, y me recogisteis; estuve desnudo, y me cubristeis; enfermo, y me visitasteis; en la cárcel, y vinisteis a mí. Religión pura Vida Eterna