Jn 2, 1-11
El relato no es una narración de lo sucedido en una boda Solo Juan lo narra, y ya sabemos que para Juan, lo importante es el mensaje espiritual, no los sucesos.
Lo que nos cuenta Juan es teología Como todo el evangelio de Juan, es fruto de una minuciosa y seguramente larga elaboración.
Todo ocurre en el marco de una boda, la fiesta humana por excelencia,
El símbolo más expresivo del amor, la mejor imagen de la tradición bíblica para evocar la comunión definitiva de Dios con el ser humano. Todo ocurre en el marco de una boda, la fiesta humana por excelencia,
La boda lleva inseparablemente unida la idea de banquete; símbolo de tiempos mesiánicos.
La salvaci ó n de Jesucristo ha de ser vivida y ofrecida por sus seguidores como una fiesta que da plenitud a las fiestas humanas.
Cuando éstas quedan vacías, « sin vino » y sin capacidad de llenar nuestro deseo de felicidad total.
El vino era un elemento inseparable del banquete. En el AT, era signo del amor de Dios a su pueblo. La abundancia de vino era la mejor señal del favor de Dios.
La Madre estaba allí. El verbo utilizado significa, en griego y en latín, "estar de pie", firme y plantado, destacando la importancia de la presencia. María representa al Israel fiel que espera en el Mesías.
El vino es símbolo del amor entre el esposo y la esposa El vino-amor establece una relación inmediata e íntima.
El vino-amor como don del Espíritu, es el que purifica, lo único que puede salvar definitivamente. El vino-amor como don del Espíritu, es el que purifica, lo único que puede salvar definitivamente.
En esa "transformación del agua en vino"
Se nos propone la clave para captar el tipo de transformación salvadora que opera Jesús y el que en su nombre han de ofrecer sus seguidores.
En esa "transformación del agua en vino" Se nos propone la clave para captar el tipo de transformación salvadora que opera Jesús y el que en su nombre han de ofrecer sus seguidores.
¿Quién querrá escuchar hoy lo que ya no se presenta como noticia gozosa?
Si solo conocen una "religión aguada" y no pueden saborear algo de la alegr í a festiva que Jesús contagiaba, muchos seguirán alejándose.
Que nadie te enga ñ e. El mejor vino está sin escanciar, está escondido en el centro de ti.
Música: Kiss the Rain (Yiruma) Texto de: Fray Marcos y J.A. Pagola.