Hipólito Hernández Valle, pbro.

Desgasta y agotaOprime y desequilibraSacude y rompe la seguridadOscurece la menteQuiebra la armonía

Pretender reprimirlo para que no salga a flote: Es como desangrarse dejando la vida en el camino Cerrar los ojos y decir que no existe: Quita las posibilidades de vivir con dignidad Volverle la espalada o huir de él: Convierte a las personas en seres cobardes Querer darle una explicación: Resulta inútil

Causa temor en quien lo padece Causa temor en quien sufre sus consecuencias Nos sorprende, roba la paz y la serenidad Destruye la estabilidad y equilibrio de vida Viene acompañado de angustia y turbación Hay aturdimiento e indecisión Trae la duda y la impotencia

Ver en él la derrota total y el fracaso irremediable. “No hay nada que hacer” Entrar en un volcán de desesperación e impaciencia. “Esto no puede sucederme a mí”

La de aquellos a quienes les da lo mismo tener conflictos que no tenerlos. No se preocupan por nada. No reaccionan. Esperan que el tiempo o un milagro resuelvan la situación. Darle la cara al conflicto sin perder la serenidad, pero poniendo en juego sus capacidades, sus talentos, su creatividad y su espíritu de lucha.

El conflicto es como un choque o un golpe fuerte que sufren unas realidades cuando se enfrentan con otras. Puede darse entre objetos (una silla y una mesa), entre elementos de la naturaleza (frío y calor), entre individuos, grupos sociales o naciones, así como dentro y fuera de la persona. Ese enfrentamiento normalmente produce un fuerte sacudimiento, hace perder el equilibrio, quita la tranquilidad y pone a las personas en estado de alerta para no dejarse destruir. El conflicto es como un choque o un golpe fuerte que sufren unas realidades cuando se enfrentan con otras. Puede darse entre objetos (una silla y una mesa), entre elementos de la naturaleza (frío y calor), entre individuos, grupos sociales o naciones, así como dentro y fuera de la persona. Ese enfrentamiento normalmente produce un fuerte sacudimiento, hace perder el equilibrio, quita la tranquilidad y pone a las personas en estado de alerta para no dejarse destruir.

Negativo Fuerza destructora que impide el desarrollo y progreso de las personas; las encierra en un callejón sin salida y no les permite emplear sus talentos y energías en algo de provecho. Positivo Manifiesta la vocación de la persona, el combate y la lucha, por medio de las cuales responde a los numerosos retos que se le presentan para poder sobrevivir y realizarse como ser humano.

Lo que somosLo que queremos ser Nuestros proyectosNuestros fracasos Los ideales que tenemosLa modestia de lo cotidiano YoNosotros Interioridad personalLa comunicación Nuestras capacidadesLos escasos resultados TiempoLa eternidad

El conflicto es al mismo tiempo, una vocación, una experiencia y un reto. Nadie puede escaparse de él, pero también nadie puede dejarse destruir por él. ¿Es el conflicto una bendición o maldición, una debilidad o fortaleza, una amenaza u oportunidad? Todo va a depender de la forma que nos situemos frente a él.

Programa “El arte de ser familia” Domingos. 2:00 pm Programa “Iglesia Doméstica” Lunes. 8:30 am Pronto…. muy pronto…