La Red

1. ¿Qué representa la red en esta parábola? Mateo 13:47

2. ¿Quiénes serán atraídos hacia la red ? Mateo 13:47 "EL REINO de los cielos es semejante a la red, que echada en la mar, coge de todas suertes de peces: la cual estando llena, la sacaron a la orilla; y sentados, cogieron lo bueno en vasos, y lo malo echaron fuera. Así será al fin del siglo: saldrán los ángeles y apartarán a los malos de entre los justos y los echarán en el horno del fuego: allí será el lloro y el crujir de dientes".

3. ¿Cuándo ocurre la separación de lo bueno y lo malo? El echar la red es la predicación del Evangelio. Esto reúne en la iglesia tanto a buenos como a malos. Cuando se complete la misión del Evangelio, el juicio realizará la obra de separación. Cristo vio cómo la existencia de los falsos hermanos en la iglesia haría que se hablase mal del camino de la verdad. El mundo injuriaría el Evangelio a causa de las vidas inconsecuentes de los falsos cristianos.

4. ¿Qué declaración en esta versículo demuestra que no todos los que claman ser cristianos serán salvos? Mateo 13:49-50 Tanto la parábola de la cizaña como la de la red enseñan claramente que no hay un tiempo en el cual todos los malos se volverán a Dios. El trigo y la cizaña crecen juntos hasta la cosecha. Los buenos y los malos peces son llevados juntamente a la orilla para efectuar una separación final.

5. ¿Cuándo ocurre la separación de los impíos y los justos? Mateo 13:49 Además, estas parábolas enseñan que no habrá más tiempo de gracia después del juicio. Una vez concluida la obra del Evangelio, sigue inmediatamente la separación de los buenos y los malos, y el destino de cada clase de personas queda fijado para siempre.

6. ¿Cómo se siente Dios con respecto a la destrucción de los impíos 6. ¿Cómo se siente Dios con respecto a la destrucción de los impíos? Ezequiel 33:11 Dios no desea la destrucción de nadie. Durante el tiempo de gracia, su Espíritu está induciendo a los hombres a que acepten el don de vida. Son únicamente aquellos que rechazan sus ruegos los que serán dejados para perecer. Dios ha declarado que el pecado debe ser destruido por ser un mal ruinoso para el universo. Los que se adhieren al pecado perecerán cuando éste sea destruido.

Estoy agradecido porque Dios ha provisto la red del evangelio para la redención de la humanidad. Reconozco que la red traerá una mezcla de cizaña y trigo dentro de la iglesia y que la separación ocurrirá en la Segunda venida de Cristo.