Por : Cassandra Mireya Briceño Tut Hospitalidad Turística 205 CONALEP Playa del Carmen 297 EL LIBRO DE LA SELVA

Bagheera, la pantera, un día encontró a un bebe humano abandonado en un canasto. Al verlo desprotegido, decidió llevarlo con una pareja de lobos que acababa de tener cachorritos.

Mama loba accedió a adoptarlo. El cachorro humano se convirtió en el favorito de la manada. Lo llamaron Mowgli. Pero un día cuando Mowgli tenia 10 años, se corrió el rumor de que shere khan, el tigre que odiaba a los hombres, andaba merodeando por los alrededores. Y que seguramente había regresado a matar a Mowgli.

Así que la manada se reunió, y todos decidieron que lo mejor para Mowgli era que regresara a donde pertenecía: Bagheera fue el encargado de llevarlo sano y salvo hasta allí.

Pronto Mowgli conoció a un simpático oso llamado baloo, y le pregunto que si podía quedarse con el y acompañarlo a recorrer la selva. Baloo acepto y pronto ambos se convirtieron en inseparables amigos. Pero un día, mientras los 2 jugaban en el rio, un grupo de monos secuestro a Mowgli.

Lo llevaron con louie, el rey mono. “ Enséñame El secreto del fuego, así Podre ser humano como tu!” le dijo a Mowgli. A Cambio, te daré protección para que puedas sobrevivir en la selva” agrego. Mientras, Bagheera y baloo, planeaban el rescate.

Después de un enfrentamiento, lograron rescatar a Mowgli. “Se que tu quieres a Mowgli como a un hijo” le dijo a Bagheera a Baloo, “pero debes entender que lo mejor para el es regresar a la aldea de los hombres” Finalmente, el oso accedió a llevar a Mowgli con los suyos. Pero Mowgli los había escuchado, y como no deseaba abandonar la jungla, decido huir.

Pero al escapar, se encontró con shere khan. “No te tengo miedo”, le dijo Mowgli. De pronto se desato una tormenta y cayo un rayo que provoco un pequeño fuego. Como Mowgli sabia que el fuego era lo único que le daba temor al malvado tigre, ato una rama encendida en la cola del animal, que huyo despavorido.

Al a salvo y junto a sus amigos, Mowgli caminaba tranquilo cuando escucho un nuevo y maravilloso sonido. Era el dulce canto de una niña que vivía en la aldea de los hombres. Mowgli no podía apartar sus ojos de ella. “¡Síguela, Mowgli!”, le dijo Bagheera. “¡Ve con ella!”

Al final Mowgli regreso a la aldea y todos en la manada abrían dicho que seria lo mejor para el.