Hay días que amanecen con un color gris, a veces son más de uno. Incluso semanas en las que parece que no veremos el color del sol.
Hay muchos motivos para esos días, algunos contra los que no podemos luchar. Simplemente tenemos que conformarnos y dejar el tiempo pasar.
Una vez me dijeron que si los días no traen color pues entonces seremos nosotros los encargados de poner un poquito de alegría en el lienzo que es nuestra vida.
Me aseguraron que era fácil de conseguir. Con una cajita de colores (no hacen falta demasiados) podremos hacer que el día mas oscuro brille un poco más ante nuestros ojos.
Un poco de amarillo para dar luz y calor a los que nos rodean
algo de rojo que la pasión por las cosas que queremos siempre ayuda bastante
Azul que es el color de los sueños, eso si, el azul no debemos de regateárnoslo
Y por supuesto un toque verde que nos haga recordar que la esperanza nos ayudara a mezclar todos los colores que ya habíamos utilizado.
Hay personas que son verdaderos artistas y utilizaran mucho más colores: blancos, rosas, blancos, lilas y mil matices intermedios.
Pero bueno... yo solo quiero pintar un cuadro modesto que me ayude a ver el día de hoy un poco más alegre y para eso no son necesarios demasiados.
El verdadero milagro de esta obra es que no alegrara solo nuestro día, alegrara también el de las personas que nos rodeen porque tanto la tristeza como la alegría son altamente contagiosas y haremos que con nuestra sonrisa muchos más sonrían.
¿Entonces a que esperas? Si amaneció un cielo gris sin color saca tu pequeña caja de colores... prueba es gratis.
Ponte manos a la obra y COLOREA TU VIDACOLOREA TU VIDA