EL QUITASOL Francisco de Goya

Datos basicos Goya Año 1777 Oleo sobre lienzo 104x152 cm Madrid: Museo del Prado

HISTORIA A mediados del siglo pasado el presente cartón fue llevado de la Real Fábrica de Tapices de Santa Bárbara al Palacio Real de Madrid, donde permaneció en los sótanos del oficio de tapicería. Ingresó junto con muchos más del mismo tipo en el Museo del Prado en 1870. Aparece por vez primera en la edición del catálogo del Museo de 1876. se considera una de las obras goyescas más conocidas. Pertenece a la serie concebida para decorar el comedor de los príncipes de Asturias en el Palacio de El Pardo y se debió pintar en agosto de 1777.

En la cuenta que presentó Goya a la Real Fábrica de Tapices de Santa Bárbara, pedía por El quitasol mil quinientos reales de vellón e indicaba: “representa una muchacha sentada en un ribazo, con un perrillo en el halda, a su lado un muchacho en pie haciéndole sombra con un quitasol”. Tanto en este cartón, como en El bebedor se advierte que Goya se libera del esquema compositivo que había seguido bajo la tutela de Bayeu y anuncia un nuevo tipo de organización de la imagen de conjunto. El procedimiento consistía básicamente en 1.situar las figuras del primer término dentro de un esquema piramidal 2. detrás, otras cortadas por un montículo 3. como fondo, un paisaje.

la sombrilla era un objeto de moda en la pintura de género del siglo XVIII. Presente casi siempre donde se encontraba una mujer y su cortejador al aire libre, fue tan común que llegó a convertirse en una forma de identificar la galantería. quizá por la frecuencia con que este tema fue representado en tantos lugares, de lienzos a muebles y de grabados a decoraciones, pintadas o en estuco, se ha analizado también lo que hay de extraordinario y original en El quitasol de Goya, que hace que esta obra destaque. Aunque la obra se ha estudiado en la etapa del rococó, y el paisaje y disposición de las figuras participan de esta corriente, se detecta un gran realismo del que carecen bastantes obras de esta epoca. la sensación de realidad se logra con la mirada que dirige la mujer al espectador, haciéndole creer que es la causa de su sonrisa; aparte de esta falta de precisión del espacio, la proximidad de las figuras y la forzada perspectiva y posición del quitasol.

La diagonal del rectangulo en el cuadro determina la perspectiva de la pared y la posicion del parasol. Hay diversos tonos, brillos y reflejos (ejemplo: cara rosada de la mujer con tonalidades verdosas por la transparencia del parasol) Por el contrario, el rostro del hombre está plenamente bañado de luz solar (fallo de las fábricas de tapices por la dificultad de trasladar los tonos de las pinturas a los hilos)

Escenas cotidianas de la vida popular con personajes idealizados (majos y majas ) que visten trajes folklóricos de gran viveza cromática. La atmósfera es alegre y luminosa, además se aprecian pequeños detalles.

Escenas cotidianas de la vida popular con personajes idealizados (majos y majas ) que visten trajes folklóricos de gran viveza cromática. La atmósfera es alegre y luminosa, además se aprecian pequeños detalles.