Fin del Estado Protector Dos posibles rutas se trazaron para dar solución a la falta de crecimiento a finales de los 60´s: orientar la política económica hacia una economía de exportación y, la otra, continuar con el apoyo fundamental a la economía interna reemplazando la inversión privada con el gasto e inversión pública. Los gobiernos de optaron por esta segunda opción encaminándose a un endeudamiento que resultó catastrófico cuando la fuente de ingresos decayó. En primera instancia el gobierno presidido por Luis Echeverría Álvarez recurrió al endeudamiento externo para solventar el gasto e inversión pública llegando a triplicar la deuda exterior para Durante el gobierno que encabezó José López Portillo el endeudamiento externo se conjuntó con la explotación de los yacimientos petroleros de la Sonda de Campeche recién descubiertos un par de años atrás. Es decir, la continuación del desarrollo de la economía nacional basado en el crecimiento de la producción para consumo interno se basó en la inversión de capital proveniente de préstamos del exterior y de la inversión del gobierno, además de la expansión del gasto público.  sigue  sigue

El incremento notable en el endeudamiento y la incapacidad productiva del sector privado puso fin a la política del “Crecimiento hacia adentro” iniciada en la década de los 30´s. El estancamiento del sector agrícola, la fragilidad del sistema financiero y la débil cadena productiva tuvieron altos costos para el crecimiento sostenido. El resultado fue una situación crítica: desaceleración del crecimiento económico, planta industrial dependiente a las importaciones y al crédito, inflación y déficit. En 1976 ocurrió una devaluación que además de necesaria, demostró todos los problemas de raíz que se traían. Después de la depreciación surgieron los efectos positivos como la competitividad y la llegada de capital, cortes al gasto público y la eliminación del encaje legal.  sigue  sigue

Se despidió por fin el sistema proteccionista. Ahora aumentó la inversión al sector exportador, sobre todo el no petrolero. La gran carga era la deuda, se renegoció para no aplazar los pagos, sino para disminuir los pagos. La nacionalización del banca en 1982 se tomó como medida de urgencia ante la extrema situación de deuda externa ya que muchos capitales nacionales salieron del país y ante la falta de capital fue necesario (desde la perspectiva del gobierno) controlar el flujo de inversiones, tasas de interés y del capital financiero en general.