Señor, hijo de David, ten compasión de mí.
Aunque las mies no han dado fruto y la higuera no ha florecido, aún mantengo la esperanza mía!
Mi hija está terriblemente atormentada por un demonio.
Porque se en quien he creído Tú no mientes, ni Te arrepientes Dios! Aunque la bruma me aceche por doquier, y el sol no levante resplandor sobre tu promesa, Aún mantengo la esperanza mía!
Jesús no contestó ni una sola palabra
Atiéndela, porque viene gritando detrás de nosotros.
Porque ha sido tu iniciativa, Nació de tu corazón, tú no fallas Dios! Aunque la distancia siga ensañándose con migo, y el silencio me duela y me confunda, Aún mantengo la esperanza mía!
He sido enviado a las ovejas descarriadas de Israel.
Porque se que para Ti todo es posible, Tú tienes la ultima palabra, Tú eres soberano Dios!
¡Señor, ayúdame!
No está bien quitarle el pan a los hijos para echárselo a los perritos.
Sí Señor Pero también los perritos comen las migajas que caen de la mesa
Mujer,¡Qué grande es tu fe!
Porque en Ti he puesto mi confianza, y Tú no permitirás que deje de dar fruto