La Iglesia y su renovación a la luz de Lumen gentium Asamblea Sinodal Arquidiócesis de la Santísima Concepción 22 de Marzo 2014

Renovación y conversión de la Iglesia El Vaticano II (LG, nn. 8,15). La purificación de la memoria (Jubileo año 2000). Aparecida (nn. 14. 100. 175. 226. 245. 278. 365-372 (“conversión pastoral”). Papa Francisco (Evangelii gaudium, 14. 25-32: conversión misionera. 182. ) Las exigencias de nuestro tiempo

El contexto de la Iglesia hoy: cesura entre modernidad y catolicismo Filosofía Moral Política Ciencias Autonomía - Libertad Economía Arte Religión Comunicaciones

¿No es esa misma cesura el gran signo de los tiempos? ¿Cómo la distancia entre Iglesia y sociedad moderna plural representa uno de los principales desafíos a la fe y a la Iglesia?

¿Cómo responder ante esta cesura entre cristianismo y (post) modernidad? Rechazo global Adaptación Diálogo crítico Cercanía y encuentro Conversión

Pasos para el diálogo y encuentro Concilio Vaticano II: 1962-1965 Dei Verbum: Palabra de Dios / Comprensión de la Revelación / Dios nos invita a su amistad; Lumen gentium: comprensión de la Iglesia como ícono de la trinidad / signo e instrumento de comunión; Gaudium et spes: gozos y esperanzas…; Iglesia y mundo, un mutuo aprendizaje; etc. Sacrosanctum concilium: el culto – la liturgia en la Iglesia

Antecedentes generales Convocado por el Papa Juan XXIII Se desarrolla entre los años 1962 y 1965 El Papa invitaba a vivir un “nuevo Pentecostés”: Dejarse habitar por el Espíritu Santo; Dejarse renovar y transformar por Él, Poder responder mejor a los desafíos que le presentaba la nueva situación histórica

La constitución dogmática sobre la Iglesia, Lumen gentium Introducción Capitulo I: El misterio de la Iglesia Capítulo II: El Pueblo de Dios Capítulo III: Constitución jerárquica de la Iglesia y particularmente del episcopado Capítulo IV: Los laicos Capítulo V: Universal vocación a la santidad en la Iglesia Capítulo VI: De los religiosos Capítulo VII: Índole escatológica de la Iglesia peregrinante y su unión con la Iglesia celestial Capítulo VIII: La Bienaventurada Virgen María, “Madre de Dios” en el misterio de Cristo y de la Iglesia

Frutos de la Lumen gentium en la Iglesia hoy La Iglesia es como un sacramento, signo e instrumento de la comunión de los hombres con Dios y de la comunión de todo el género humano El carácter sacramental: “signo visible de una gracia invisible” Nexo entre hechos y palabras Comunión como gracia y misión ¿Comprendemos y vivimos la Iglesia en referencia a la comunión de los hombres con Dios y a la comunión de todo el género humano? ¿Qué nos ayuda y que nos aleja de ello? La constitución de la Iglesia Correlativa a la comprensión del ser de la Iglesia Los momentos constitutivos de la Iglesia Presencia de esos momentos en la existencia de la Iglesia ¿Cómo experimentamos que hoy la Iglesia vuelve a nacer por la fuerza del Espíritu? ¿Cuáles son los signos de renovación de la Iglesia?

Frutos de la Lumen gentium en la Iglesia hoy La Iglesia como Pueblo de Dios “En todo tiempo y en todo pueblo es grato a Dios quien le teme y practica la justicia (cf. Hch 10,35). Sin embargo, fue voluntad de Dios el santificar y salvar a los hombres, no aisladamente, sin conexión alguna de unos con otros, sino constituyendo un pueblo, que le confesara en verdad y le sirviera santamente…” (n.9). Este pueblo mesiánico tiene por cabeza a Cristo La condición de este pueblo es la dignidad y la libertad de los hijos de Dios Tiene por ley el nuevo mandato de amar como el mismo Cristo nos amó a nosotros. Y tiene en último lugar, como fin, el dilatar más y más el reino de Dios Pueblo sacerdotal, profético y real [sacerdocio común y ministerial, n.10]. La auténtica catolicidad [nn. 13 y ss]: unidad – diversidad

Frutos de la Lumen gentium en la Iglesia hoy La Iglesia como Pueblo de Dios: algunas preguntas ¿Queremos vivir la santidad y la salvación como pueblo, o preferimos hacerlo aisladamente, sin conexión alguna de unos con otros? ¿Se aprecia en nuestras comunidades que Cristo es Cabeza de la Iglesia, o, más bien, es “Pablo o Apolo” (1Cor 3,4)? ¿Se manifiesta en la Iglesia la dignidad y libertad que todos hemos recibido de Dios? ¿Cómo? ¿Cómo se manifiesta hoy que la Iglesia es misionera, que existe para evangelizar, para expandir el reino? ¿En qué se expresa que somos “católicos”?

Frutos de la Lumen gentium en la Iglesia hoy El auténtico camino de santidad Un vocación universal (de estado a camino) (LG, n.40) La necesaria crítica a la hipocresía La necesaria crítica a los intentos de dominación La necesaria crítica a la manipulación ideológica ¿Reconocemos y valoramos la acción santificadora del Espíritu en las “fronteras”, en los “márgenes”?

Frutos de la Lumen gentium en la Iglesia hoy Un discipulado misionero (Aparecida - Francisco) Relevancia del “hoy”: no al utopismo – no al restauracionismo. En tensión – movimiento hacia las periferias Porque Cristo es Luz de los pueblos, la Iglesia “desea ardientemente iluminar a todos los hombres, anunciando el Evangelio a toda criatura con la claridad de Cristo, que resplandece sobre la faz de la Iglesia” (LG, n.1). (Francisco 5,2). Dos categorías pastorales: cercanía y encuentro (Francisco 5,3) ¿Nuestros “hechos y palabras” nos acercan a los hombres y mujeres de nuestro tiempo? ¿Cuáles sí, cuáles no?

Preguntas para ahondar en nuestro proceso de conversión “Ninguna comunidad debe excusarse de entrar decididamente, con todas sus fuerzas, en los procesos constantes de renovación misionera, y de abandonar las estructuras caducas que ya no favorezcan la transmisión de la fe” (Aparecida, 365). ¿Hemos entrado en un proceso decidido de renovación misionera? ¿Qué escusas tenemos para no hacerlo? ¿Qué estructuras debemos abandonar porque no favorecen la transmisión de la fe? En una eclesiología de Pueblo de Dios es determinante el funcionamiento de los Consejos: ¿Son los Consejos Diocesanos y los Parroquiales de Pastoral y de Asuntos Económicos espacios reales para la participación laical en la consulta, organización y planificación pastoral? (Francisco). Los agentes de pastoral y los fieles en general ¿se sienten parte de la Iglesia, se identifican con ella y la acercan a los bautizados distantes y alejados?

Preguntas para ahondar en nuestro proceso de conversión «La conversión espiritual, la intensidad del amor a Dios y al prójimo, el celo por la justicia y la paz, el sentido evangélico de los pobres y de la pobreza, son requeridos a todos». Temo que también estas palabras sólo sean objeto de algunos comentarios sin una verdadera incidencia práctica. No obstante, confío en la apertura y las buenas disposiciones de los cristianos, y os pido que busquéis comunitariamente nuevos caminos para acoger esta renovada propuesta” (Francisco, Evangelii gaudium, n.201). ¿Qué nuevos caminos proponemos para no quedarnos sólo en “comentarios”?

Conclusión Dos textos bíblicos claves para una auténtica conversión misionera Marcos 1,15 Hechos 10, 37-38