UNA REALIDAD SOLA, PERO COMPLEJA EL QUÉ DE MISIÓN

SEIS ELEMENTOS DE MISIÓN Testimonio y anuncio La liturgia, la oración y la contemplación La Justicia, la Paz e Integridad de la Creación El diálogo tanto interreligioso como laico Inculturación Reconciliación

TESTIMONIO Y ANUNCIO Los Cristianos bautizados dan la mayor parte de testimonio en sus vidas diarias. El testimonio sucede a nivel comunal como una comunidad cristiana, una parroquia y una diócesis. El testimonio se mueve más allá de lo local a nivel de la Iglesia universal e institucional. Hay un testimonio común a Jesús por las Iglesias y confesiones cristianas. Para acompañar testimonio, Juan Pablo II habló de la proclamación, el anuncio explícito de Jesucristo como Señor y Salvador. Esta es la prioridad permanente de la misión. Proclamación debe ser una invitación que respete la libre opción de los oyentes. La Iglesia siempre propone, no impone nada. Es la palabra de Dios (no la del cristiano o misionero) que tiene el poder y la gracia de llamar a la gente a la conversión y a una nueva vida.

LITURGIA, ORACIÓN, Y CONTEMPLACIÓN Como es importante y fundamental para la vida cristiana, la liturgia no puede ser un fin en sí misma. Somos el Cuerpo de Cristo cuando salimos de la Iglesia. Misión no sólamente es desde "adentro" a "fuera", sino también a la inversa. Llevar los problemas del barrio y los del mundo a la liturgia impide que la comunidad se centra demasiado en sí mismo, y abre a los miembros a estar atentos, nutridos y retados por el movimiento de Dios en el mundo. En 1927, El Papa Pio XI les proclamó a Teresa de Lisieux y a Francisco Javier como los patrones misión. La vida cristiana y misión consisten en actividad y la oración. La oración y la contemplación pueden atraernos a ver y a encontrarnos con el mundo y con otros desde la perspectiva de Dios. Ellos nos ayudan a alinear nuestras vidas con la misión de Dios: el amor, la salvación y la justicia.

EN BUSQUEDA DE LA JUSTICIA, LA PAZ Y LA INTEGRIDAD DE CREACIÓN La misión de Dios llama a la iglesia a seguir trabajando por un mundo justo y pacífico y para cuidar como un regalo de Dios la creación. León XIII en su encíclica La Condición del Trabajo (1891) sostuvo que la Iglesia está llamada no sólo a socorrer a los necesitados, sino para hacerse frente a las estructuras injustas de lo social, de la económica y de los sistemas. Los obispos de EUA en su declaración Justicia económica para todos (1986) también ilustran este componente de misión. La paz no es sólo la ausencia de la violencia. Se requiere opciones positivos y activos. Dentro la familia humana, se extiende la preocupación por la justicia y la paz a una atención adecuada para el resto de la creación de Dios.

DIÁLOGO INTERRELIGIOSO Y SEGLAR Se basa el diálogo en la creencia de que la gracia y el amor de Dios está presente en todas las personas. Los cristianos pueden aprender algo acerca de Dios de los demás. Por un lado nos acercamos a los demás con respeto, al mismo tiempo, nos mantenemos fieles a nuestra propia fe cristiana. Hay cuatro tipos de diálogo: el diálogo de la vida, el diálogo de la acción, el diálogo de la experiencia religiosa, el diálogo del intercambio teológico. El diálogo exige humildad y apertura, así como la autenticidad e integridad.

INCULTURACIÓN En el encuentro con otros pueblos, la Iglesia debe implantarse de la misma manera que Cristo por su encarnación, se unió a las circunstancias particulares, sociales y culturales de los pueblos. Se introdujo La palabra inculturación para captar la interacción dinámica entre el Evangelio y la tradición de la Iglesia, por una parte, y por otra parte el contexto social y cultural en constante evolución. No hay una cultura cristiana único. Se deben reconocer, nutrir, y expresar las semillas de la Palabra de Dios en nuestras propias palabras.

RECONCILIACIÓN Se produce la reconciliación dentro de la Iglesia a cuatro niveles diferentes: a nivel personal, a nivel cultural, y a nivel político. Dios es el único que puede lograr la reconciliación en los corazones de las personas. Los cristianos deben ser constructores de puentes y mediadores en el proceso.

PREGUNTAS PARA REFLEXIÓN ¿Cual idea en este capítulo le parecía la más interesante? ¿Cuál de los seis elementos de misión se aplica mejor a su situación?