Ya en la Edad Media, Edimburgo comenzó siendo un pequeño fuerte que, en el siglo XVII, los ingleses capturaron y le dieron el nombre de Eiden's burgh ―burgh es una palabra que antiguamente significaba fuerte―. No fue hasta el siglo X cuando los escoceses recuperaron esta zona de Escocia. A finales del siglo XII, Malcolm III construyó el castillo en Castle Rock y comenzó a florecer una pequeña aldea a su alrededor. Sobre el año 1500, la población de Edimburgo rozaba las personas. En esa época, se comenzó la construcción de la Flodden Wall, la muralla que rodeaba la ciudad, con la intención de protegerla de los ingleses. En 1767, comenzó la planificación de la New Town, Ciudad Nueva. Tras un concurso público, el proyecto de grandes calles paralelas, plazas y jardines de James Craig salió elegido. La unión entre Inglaterra y Escocia, firmada en 1707, dejó de hacer necesarias las murallas. La Ciudad Nueva se terminó a principios del siglo XIX y comenzaron a llegar inmigrantes irlandeses. La población en 1850 superaba las personas. Hoy, Edimburgo no solo es una ciudad preciosa, sino también con una calidad de vida altísima.

Comenzamos el recorrido por esta hermosa ciudad por donde comenzó la misma: El Castillo de Edimburgo, que es una antigua fortaleza erigida sobre una roca de origen volcánico, ubicada en el centro de la ciudad que es, sin lugar a dudas, uno de los lugares más emblemáticos de la misma. El castillo se alza imponente sobre la colina de Castle Hill. Tres de sus lados se encuentran protegidos por abruptos acantilados, y el acceso al castillo queda limitado a una calle de pronunciada pendiente en el lado este del mismo.

Se accede al castillo por un portal ante la batería, que conduce a un camino que sube por la derecha hasta el patio en el centro de la fortaleza.

Interior del Castillo de Edimburgo

Cementerio de las mascotas de los soldados del castilloMons Meg Este enorme cañón de asedio del siglo XV es muestra de la potencia de fuego que poseía la imponente fortaleza durante el reinado de Jacobo II de Escocia. Fue utilizado durante la guerra contra los ingleses. Todos los días a la una del mediodía, excepto los domingos, ocurre un acontecimiento muy especial en el castillo, que reúne a todos los visitantes para observar una curiosa tradición que se lleva a cabo desde A la una, con una impresionante puntualidad británica, el General de Artillería acude a disparar un moderno cañón, que hoy perpetúa la tradición, pero que funciona sobre todo para los turistas. En sus comienzos, el disparo del cañón indicaba la hora a los marineros y a la gente del pueblo, para que pudieran sincronizar sus relojes, si los tenían.

La Ciudad vieja, Old Town, es patrimonio de la humanidad declarado por la UNESCO. Ha conservado su planta medieval y muchos edificios de la época de la reforma. Un extremo está cerrado por el castillo y la arteria principal, la Royal Mile, con estrechos callejones, a menudo de no más de dos metros de ancho, llevan colina abajo a ambos lados de la espina principal siguiendo un modelo de espina de pez. Grandes cuadrados marcan donde se encontraban los mercados o rodean los principales edificios públicos como la Catedral de san Giles y los Tribunales Supremos.

La Ciudad vieja, Old Town

La Royal Mile, Milla Real, en la Ciudad Vieja, es la calle más famosa de Edimburgo. Está llena de tiendas de regalos, pubs y restaurantes… Caminar por ella es adentrarnos con la imaginación de cómo era esta ciudad en los tiempos medievales porque la mayoría de sus construcciones, muy bien conservadas por cierto, son de esa época. La catedral de San Giles en la Royal Mile La Royal Mile

Si la fidelidad tuviese nombre, para los ciudadanos escoceses se llamaría Bobby, en honor al perro que permaneció junto a la tumba de su amo durante 14 años, hasta la llegada de su propia muerte el 14 de enero de Un año más tarde, Lady Burdett Coutts hizo construir una estatua y una fuente en el lado sur del Puente George IV para homenajearlo.

Separando la Ciudad Vieja de la Ciudad Nueva, están los Jardines de Princes Street, que son el parque urbano más importante del centro de Edimburgo. Los jardines tienen unas dimensiones de más de m 2, y la superficie que ahora ocupan fue durante siglos el lago más importante de Edimburgo: el Nor Loch, inicialmente una marisma, que fue utilizado como defensa natural de la ciudad para complementar la labor defensiva del castillo. Los jardines Princess Street se inauguraron en 1820 tras drenar el lago.

Jardines de Princess Street

Jardines de Princes Street

Inaugurado en 1846, el Monumento a Scott es una construcción de estilo gótico que se erigió en honor al escritor escocés Sir Walter Scott. Sus 61 m de altura lo convierten en el monumento más grande creado en honor a un escritor. Situado en Princes Street, la calle principal de la ciudad Nueva, y de espalda a los jardines de Princes Street, posee un color ennegrecido que le aporta un aspecto siniestramente bello. La enorme aguja gótica está decorada con 64 personajes de las novelas creadas por el querido escritor. Como contrapunto a la oscura construcción, en la parte baja del monumento se puede ver una estatua de Sir Walter Scott realizada en mármol blanco que brilla con luz propia.

La Ciudad Nueva, que de nueva no tiene nada, ya que fue construida entre 1765 y alrededor de 1850, conserva gran parte de la arquitectura del período neoclásico original. Su calle más famosa es Princes Street, la calle de los Príncipes, llena de tiendas, que mira al castillo de Edimburgo, la Ciudad Vieja y los Jardines Princes. Junto con la Ciudad Vieja, es Patrimonio de la Humanidad declarado por la UNESCO en 1995.

Ciudad Nueva

Dean Village es hoy un apacible barrio situado a orillas del río Leith. Antiguamente, era una localidad fundada en el siglo XII por los frailes de la Abadía de Holyrood, fue un lugar próspero durante más de 800 años. En la zona, había once fábricas que trabajaban con los molinos de agua situados en torno al río Leith. El comercio de Dean Village sufrió una notable disminución hasta llegar al punto de convertirse en un lugar pobre y decadente alrededor de Diez años después, al percatarse de que se trataba de un lugar apacible muy cerca del centro de la ciudad, comenzaron la rehabilitación de la zona para convertirla en uno de los barrios más deseados y caros.

Dean Village

Calton Hill es una colina situada al este de la Ciudad Nueva de Edimburgo, justo donde acaba Princes Street. En esta colina se encuentran diversos monumentos que hacen que Calton Hill reciba el apodo de la Atenas del norte.

Calton Hill

Las vistas desde la colina son hermosas, y nos dan una visión 360 ⁰ de la ciudad.

Audio: Scottish Pipes and Drums «Albannach» Fotografía: Propia y de Internet Diseño: Eliza