“El Movimiento de Cursillos de Cristiandad Casa y Escuela de Comunión” “Secretariado Diocesano de La Serena” Talca, Octubre de 2005

“hacer de la Iglesia casa y escuela de la comunión” SS Juan Pablo II al concluir el gran jubileo del año 2000 nos pide en su Carta Apostólica “Novo Millennio Ineunte” “hacer de la Iglesia casa y escuela de la comunión”

“llevar a cabo nuestro apostolado en constante sintonía eclesial, En la 3ª ultreya mundial de Roma nos instó a “llevar a cabo nuestro apostolado en constante sintonía eclesial, para que se manifieste “la fuerza de la comunión” que es el estilo y el contenido mismo del pueblo de Dios”

Sed testigos audaces de la “diaconía de la verdad”, trabajando incansablemente con la “fuerza de la comunión”.

a nuestra inspiración original y una más firme comunión eclesial” “renovada fidelidad a nuestra inspiración original y una más firme comunión eclesial”

es una vocación a la comunión y participación en el ser “El llamado que Dios nos hace es una vocación a la comunión y participación en el ser y misión de la iglesia, y tiene tres aspectos que el Movimiento trata no sólo de respetar, sino de fomentar, ayudando a descubrirlos y realizarlos (IIFF Nº 130)

La participación está en el origen de la comunión. Fundamento Doctrinal cum + muneris “aquel que participa de un encargo” La participación está en el origen de la comunión. El amor del Padre se nos revela por medio del Hijo y el Espíritu Santo que nos hace participar en el misterio de la COMUNION TRINITARIA

“No me habéis elegido vosotros a mí, sino que yo os he elegido a vosotros, y os he destinado a que vayáis y deis fruto, y vuestro fruto permanezca" (Jn 15,16)

“que os améis los unos a los otros Para alcanzar la plena comunión en Cristo Debemos hacer vida el mandamiento que Cristo nos dejó: “que os améis los unos a los otros como yo os he amado" (Jn 15, 12).

Solo unidos a Cristo somos capaces de dar frutos de este amor Como los sarmientos que sólo unidos A la vid darán frutos Estamos llamados a formar Iglesia-Comunión, la Iglesia-Comunidad de amor, la Iglesia–Misterio de amor.

“Comunión Trinitaria” Fuente de este amor“ Yo en ellos y tú en mí, para que sean perfectamente uno, y el mundo conozca que tú me has enviado y que los has amado a ellos como me has amado a mí" (Jn,17,23)

La Eucaristía es la fuente y la Máxima expresión del amor de Dios renovamos la comunión en la Eucaristía que es fuente y cumbre de nuestra vida y de nuestra misión como cristianos.

¿Qué nos aleja de la Comunión?

Pensar que es uniformidad Pensar que es sólo cooperación Falta de dialogo Falta de perdón Falta de compromiso Falta de comunicación No formar verdadera comunidad Falta de conocimiento de nuestro carisma

¿Cómo permanecer en comunión?

y la manifestación de aquel amor que se derrama en nosotros La comunión es el fruto y la manifestación de aquel amor que se derrama en nosotros a través del Espíritu Santo

Juan Pablo II nos señala un itinerario espiritual Descubrir a Dios dentro de nosotros y en los demás. ningún ser humano me es ajeno. cada hermano es un regalo de Dios. profundo espíritu solidario

-Promover una espiritualidad de la comunión -Descubrir el misterio de Trinidad que habita en nosotros y en nuestros hermanos. -Aceptar sin reservas a Cristo. -Humildad. -Perdón. -Dialogo fraterno

Estamos llamados a ser: -servidores de la verdad -Testigos de auténtica comunidad -Testigos fieles de quién nos envía

“Cristo cuenta conmigo y yo cuento con su gracia”

“Yo estoy con ustedes todos los días hasta que se termine este mundo”

“No nos desalentemos ante los retos de la sociedad secularizada y seamos capaces de dar testimonio con confianza plena de nuestra fe y esperanza”. Benedicto XVI

“De colores”