Reflexiones de Jean Guitton sobre Dios, Jesús y la eternidad

Pero hace un siglo que pienso en este momento. Mañana estaré muerto. Pero hace un siglo que pienso en este momento. Desde hace noventa años me vengo diciendo: Guitton, tienes que saber con certeza antes de morir lo que hay después de la muerte. Así que he buscado la verdad sobre esta pregunta. La he buscado durante toda mi vida. Jean Guitton

Estoy contento de buscar la verdad realmente crítica. Hay que dudar, pero dudar bien. ¿Está usted seguro de dudar bien? Cree usted dudar de todo, pero no duda usted de esa duda misma. La duda realmente universal incluiría una duda misma sobre la duda. Estoy contento de buscar la verdad realmente crítica. Si nunca he perdido la fe es porque me parecía que traicionaba la razón crítica al abandonar la fe. En resumidas cuentas, he mantenido la fe por espíritu crítico. Jean Guitton

Poco a poco el hombre limita su religión a una práctica materialista e interesada. Se forma en la mente una idea de Dios como un gran distribuidor sobrenatural de ventajas materiales. Como una aspirina celestial. Desde que ha aumentado sus medios técnicos, el hombre pide a los medios técnicos muchas cosas que hasta entonces le pedía a Dios. De resultas, ya no se ocupa de Dios. Cree que ya no lo necesita. Jean Guitton

Un ser realmente religioso se preocupa menos del tiempo que de la eternidad. Ve el tiempo a la luz de la eternidad. Una vida religiosa auténtica no busca en la religión el interés material o el bienestar psicológico. No es una forma de egoísmo. Es una vida para Dios. Así, rezar a Dios es decirle: “Hágase tu voluntad”. Jean Guitton

Creo en Dios porque me cuesta creer en él Creo en Dios porque me cuesta creer en él. Si no me costara creer en él, pienso que no creería en él. Si Dios fuese fácil, estaría al alcance de la mano. No sería trascendente y no sería Dios. Pero si Dios es Dios, hay una desproporción entre él y nosotros. No es de extrañar que, para verlo, tengamos que ponernos de puntillas sobre la punta del espíritu. Jean Guitton

Cuando observo el mundo me parece ver unas características de contingencia: por ejemplo las grandes constantes físicas universales. ¿Por qué esos números y no otros? Encuentro más verosímil que un mundo como éste sea el resultado de una elección, y no el resultado de un desarrollo necesario. Me parece racional pensar simplemente que la materia está ordenada en función de la vida que ha de llegar. Jean Guitton

Los instintos de los pájaros migradores, la estructura de la corteza cerebral, el código genético… Todo esto es asombroso. Estos hechos excluyen la idea de que el mundo sale por una evolución necesaria y fatal. El carácter contingente y coordinado del mundo implica en su origen una libertad organizadora y una creación a partir de la nada, ex nihilo. Jean Guitton

El cristianismo ha introducido las ideas de persona y de libertad El cristianismo ha introducido las ideas de persona y de libertad. Ha roto la ley de hierro del destino antiguo. Ha abierto la totalidad cósmica y social hasta entonces cerrada sobre sí misma. Ha abierto el Destino a la trascendencia de Dios, Él mismo libre de todo destino. Pablo VI me decía que, sin Dios, los derechos del hombre desaparecerían.

La verdad del anuncio evangélico debe abordarse primero, desde el punto de vista racional, como la verdad de un hecho histórico. Porque no tendrá verdad religiosa si no tiene verdad histórica. A una verdad histórica sólo se puede llegar a través de los testimonios.

La resurrección de Jesús, que es el hecho central del que todo depende, es enteramente originario en la predicación cristiana. La resurrección es la única casilla sobre la cual vale la pena jugar. Si es verdadera todo el resto es verdad. La resurrección es un misterio que es un hecho y un hecho que es un misterio. Jean Guitton

Encuentro testimonios sinceros y verídicos de lo que pasó en Palestina en tiempos del gobernador Poncio Pilato; además, recibo al mismo tiempo el misterio de la fe y las razones por las que creer. Los milagros de Cristo revelan su divinidad y la atestiguan, como enseña el propio Jesús en el discurso sobre los testimonios. Jean Guitton

A partir del momento en que el milagro es un hecho, no es objeto de fe, sino un argumento de credibilidad. ¿Alguien me puede decir lo que puede reemplazar, como razón de creer, el espectáculo grandioso de todos los milagros, ya sea de Jesús en persona, ya sea de Jesús continuado en todos sus santos: curaciones, profecías, conversión moral y espiritual, santidad, etc?

La resurrección de Cristo, que es promesa de la nuestra, es a la vez el misterio central de la revelación del Amor, objeto de nuestra esperanza y el principal motivo de credibilidad de la fe. Es una fe profunda, que tiene por objeto un acontecimiento real y sobrenatural. Jean Guitton

Miramos el Amor sobre la Cruz. ¿Qué esperanza nos queda? Ésta es mi fe: un hombre era Amor. Nadie había hablado antes como él. Por fin se oía hablar en el mundo de Amor. Pero el mundo no quiere el Amor. El mundo está helado. Entonces se excluyó el Amor. Fue rechazado. Murió sobre el instrumento de suplicio. Miramos el Amor sobre la Cruz. ¿Qué esperanza nos queda? Divirtámonos, que mañana moriremos. Jean Guitton

Creo que es un hecho histórico, milagroso y misterioso. Los apóstoles, que fueron testigos de la aparición del Amor, estaban sumidos en el desconcierto. Ya no esperaban nada. Y los apóstoles me dicen que vieron a Cristo fuera de la tumba. No es una leyenda, no hay tiempo, los apóstoles hablan de ello desde los primeros días. Tampoco entra dentro del orden del mito. Creo que es un hecho histórico, milagroso y misterioso. Jean Guitton

Reflexiones de Jean Guitton sobre Dios, Jesús y la eternidad