Es un juego de habilidad, en el que eres un caballero que tiene que rescatar a una princesa que esta encerrada en un castillo y el castillo esta lleno de trampas y guardianes que la custodian. Entonces el juego consiste en ir superando mapas cortos esquivando las trampas y enemigos hasta llegar a la salida de cada mapa. Hay un contador de tiempo y en función del tiempo que tardes en superar cada mapa obtienes más o menos puntos. Cada 3 mapas superados llegas a una pantalla en la que hay 3 puertas en la que tienes que elegir una. Estas puertas están dispuestas aleatoriamente y dependiendo de cual escojas te conducen o a un mapa de bonus o a uno de enemigos. En el mapa de bonus en el objetivo es, en 30 segundos, coger todos los diamantes que puedas que caen del techo. Hay 3 tipos de diamantes y cada uno vale diferentes puntos y caen a diferentes velocidades. En el bonus de enemigos, viajas por un río subido en un tronco, y en la orilla de enfrente, encima de otro tronco hay 3 cañones que te disparan y te quitan puntos con cada impacto. El objetivo de este mapa es esquivar los disparos moviéndote por encima del tronco durante 30 segundos y conseguir llegar a tierra con la máxima puntuación posible. En cuanto el tiempo de los bonus se agota, vuelves al juego normal de mapas. Cuando logras superar todos los mapas y llegar a donde se encuentra la princesa, en función de los puntos que tengas al final, la princesa reaccionará de un forma u otra, y podrá mandarte a paseo; darte las gracias; o casarse contigo y ser felices. Durante el EXE
Es en 3D, por lo que el jugador vive sensaciones intensas de realismo y profundidad en las escenas; En el bonus de diamantes estos caerían a diferentes profundides, la roca estaría en primer plano y el fondo de la cueva al fondo 2) Se juega con Kinect, los controles eres tu, esto hace que el jugador se meta en la piel del personaje, que junto con el 3D consigue que el jugador se sumerja por completo y quede envuelto en la atmósfera del juego; Los mapas se juegan con la mano Los diamantes se cogen con dos manos bajadas Las balas cañon se esquivan con la cabeza