La Eucaristía es la memoria actualizada de la Última Cena, y de la muerte y resurrección de Cristo. La Eucaristía es el memorial del sacrificio de Cristo en la cruz, por eso se le denomina sacrificio eucarístico. Por medio de este sacramento entramos en comunión con Jesús, nos alimentamos de su cuerpo ofrecido al Padre en la cruz por nosotros, por eso se llama también sacramento de la Comunión y banquete eucarístico. Al aceptar este sacramento, cada cristiano da testimonio de la entrega generosa de Cristo por los demás, viviendo diariamente con alegría la común unión con Él. Esta presentación expone las tres partes fundamentales de la misa: liturgia de la Palabra, liturgia eucarística y comunión… con ejemplos de vida. La recomendamos para el alumnado de Quinto Año de Educación Básica.
Vivimos por la Eucaristía Autor: P. Raúl Zúñiga Dibujos: Guerrino Pera Producciones EDEC y edebé
Ante ti se presenta el hermoso y desafiante camino de tu vida…
Tiene muchas cosas hermosas… Pero, muchas veces es cuesta arriba, y detrás de una curva puede hallarse una cruz.
Te acompañan tus amigos, tus padres, tus educadores; personas que te quieren y animan a caminar.
Eso sí… ¡No se puede subir en coche! Si quieres llegar a la cumbre, hay que esforzarse, sudar y ser constante.
Jesús no quiere que caminemos solos por la senda de la vida. Él es guía, compañero, y alimento a la vez.
Quiere compartir la vida con nosotros, igual como compartimos en una comida con nuestros amigos. Por eso, se hizo alimento de Vida para fortalecer nuestra vida.
Al terminar la Cena Pascual, Jesús tomó pan y vino, diciéndoles: Tomen y coman, porque esto es mi cuerpo, que va a ser sacrificado por ustedes. Tomen y beban, esta es mi sangre que va a ser derramada por ustedes y por la humanidad.
Desde aquella noche, la Iglesia vive de la Eucaristía Desde aquella noche, la Iglesia vive de la Eucaristía. Ninguno de nosotros puede vivir sin alimentarse de ella.
La Iglesia a lo largo de más de dos mil años ha ido floreciendo y dando abundantes frutos de vida en todo el mundo. ¡La Eucaristía es el sol que la hace fructificar!
Liturgia de la Palabra. En la lectura del Antiguo Testamento nos habla Dios Padre. En la epístola escuchamos la enseñanza de un Apóstol. Y en el Evangelio es Jesús quien nos habla.
Jesús es el buen Maestro, que nos guía para no perdernos en el camino de la vida.
Es el sembrador, que esparce la buena semilla en nuestro corazón, para que produzca mucho fruto.
Meditamos su Palabra, para desentrañar toda su riqueza. La trabajamos, para poder vivirla en todas las dimensiones de nuestra existencia.
Miramos los desafíos a la luz de la Palabra, y buscamos soluciones para enfrentarlos. ¡Es hermoso escalar hacia lo alto guiados por Jesús!
Liturgia eucarística. La liturgia eucarística es la memoria actualizada de: la Última Cena, la muerte y la resurrección de Jesús.
En el pan partido y la sangre derramada, se hace presente Cristo ofreciéndose al Padre por nosotros. El sacerdote representa a Cristo resucitado, que celebra la Última Cena con nosotros.
La Iglesia se inició con el alimento de la Eucaristía. Y se sigue construyendo hoy, mediante este mismo sacramento.
La Iglesia hoy sigue adelante, porque los cristianos compartimos la Eucaristía.
Gracias a la Eucaristía, entre todos forjamos un mundo mejor.
Mediante la Eucaristía, logramos que Cristo siga naciendo hasta en los últimos rincones del mundo.
La comunión es la culminación de la participación en la Eucaristía.
En ella, Jesús se entrega a cada uno de nosotros, para que nos transformemos a su imagen y tengamos plenitud de vida.
La comunión implica el compromiso de entregarnos a los demás, especialmente a los más necesitados. Así entramos en comunión con el Cuerpo sufriente de Cristo.
No estamos solos para superar nuestros desafíos… Nos apoyamos en los hermanos y ¡en Cristo!
Gracias a la Eucaristía… Somos testigos de una vida más luminosa. Somos una gran familia que le canta a la vida.
No le tememos a las altas cumbres!
- ¡Yo estaré con ustedes, todos los días, hasta el fin del mundo!
Fin