¿QUÉ SON LAS PARÁBOLAS? Una parábola es un relato corto, con forma de historia sencilla, real o inventada, pero no fantasiosa, mediante el cual Jesús establece una comparación, “igual que sucede en tal caso, así sucede en tal otro”. Las parábolas son explicaciones del mensaje de Jesús.
CARACTERÍSTICAS DE LAS PARÁBOLAS Tienen forma de narración, una especie de cuento de tamaño variable. Son relatos de la vida diaria. No son asuntos complejos ni rebuscados. Los elementos que la constituyen están tomados de experiencias cotidiana, de Jesús y sus oyentes. Es un relato simbólico. Todos los símbolos están al servicio de la enseñanza que Jesús quiere transmitir a sus oyentes. Eran utilizadas por los rabinos u otras personas, no son exclusivas de Jesús.
ESTRUCTURA DE LAS PARÁBOLAS Se compone normalmente de tres partes. 1.La ocasión. 2. La narración 3. La aplicación espiritual. 444 completra co completar ccvcccaración que encierra una enseñanza que se desprende de su conclusión, es decir, se trata de un recurso didáctico, mediante el cual Jesús transmitía su mensaje con la intención de que todos lo comprendieran.
CLASIFICACIÓN DE LAS PARÁBOLAS Es frecuente clasificar las parábolas en tres grupos: Las parábolas del Reino Las parábolas de la misericordia Las parábolas de la urgencia y la reprobación
LAS PARÁBOLAS DEL REINO Son aquellas que nos hablan del Reino, entre ellas podemos destacar: Mateo 13, 3-9 Mateo 13, 24-30 Mateo 13, 31-32 Mateo 13, 33 Mateo 13, 44-46 Mateo 13, 47-50
Para poder entender las parábolas y así comprender mejor la predicación de Jesús, hay que tener en cuenta tres cosas: 1. Toda parábola tiene un mensaje central, incluso si es larga y llena de detalles. Por tanto, no hay que intentar ver el significado de cada detalle, sino preguntarse: «¿Qué idea principal me quiere comunicar esta parábola?» 2. Las parábolas del Evangelio intentan hacernos comprender algún aspecto o cualidad del Reino de Dios. Por eso tenemos que preguntarnos: «¿Qué me dice esta parábola acerca del Reino de Dios?» 3. Las parábolas pretenden provocar una reacción ante la llegada del Reino. Y por eso hemos de preguntarnos también: ¿Qué respuesta espera de mí?»