Juicio a las juntas militares G S O A L D M C I Juicio a las juntas militares

VIOLACIÓN DE LOS DERECHOS HUMANOS Durante la última dictadura militar, se cometieron delitos que atentaban contra los derechos humanos. Por ello, con la vuelta a la democracia, había organizaciones que investigaban las violaciones a los derechos, los centros clandestinos de detención y los represores. Así, surge la CONADEP, la Comisión Nacional sobre la Desaparición de Personas.

La conadep Esta institución tuvo que preparar un informe con las denuncias existentes, recolectó testimonios y buscó la colaboración de testigos eventuales. Los resultados de su investigación se sintetizaron en el informe “Nunca Más”.

Juicio a las juntas militares Con la vuelta a la democracia y Alfonsín como presidente, se impulsó el juicio contra las Juntas Militares. Hacia finales de 1986 y principios de 1987, Alfonsín sanciona las leyes de Punto Final y Obediencia Debida, según las cuales se estableció la paralización de los procesos judiciales contra los imputados y que quienes habían cometido delitos “cumpliendo órdenes” superiores eran inocentes aunque las pruebas dijeran lo opuesto.

Decretos de indulto

Reclamo por verdad y justicia A mediados de los 90, se sumaron declaraciones sobre los denominados “vuelos de la muerte”; además, de una presentación de Emilio Mignone (fundador del Centro de Estudios Legales y Sociales, una ONG orientada a la promoción y defensa de los Derechos Humanos) en la cual documentó y denunció los abusos cometidos por los militares argentinos durante la dictadura de 1976.

Crímenes de lesa humanidad El reclamo por la anulación de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final nunca cesó, por lo que en 2003, durante el gobierno de Nestor Kirchner, se logró su anulación; al mismo tiempo que se aprobaba una ley que otorgaba un rango Constitucional a la Convención sobre la imprescriptibilidad a los crímenes de guerra y lesa humanidad.

Camino hacia la justicia Gracias al movimiento por los Derechos Humanos impulsado principalmente por Abuelas de Plaza de Mayo; y luego con las políticas públicas de Néstor Kirchner, se llevaron (y se llevan) a cabo los juicios que condenan a los culpables de los crímenes de lesa humanidad cometidos en Argentina durante la última dictadura del país.