Historia del teatro griego Por: Manuela paz De la risa al llanto … Historia del teatro griego Por: Manuela paz
En la historia del teatro, la festividad en honor a Dionisio, dios de la vendimia y el vino, tiene gran relevancia. En la antigua Grecia, al terminar la cosecha de las uvas, se homenajeaba al dios Dionisio, llamado Baco por los romanos, con bailes y alabanzas. Un conjunto de jóvenes se dirigía a su templo, cantando y danzando, encabezados por un corifeo o maestro del coro, que era quien mejor realizaba estas actividades.
Posteriormente, según menciona la Poética de Aristóteles, Tepsis, dramaturgo griego nacido en Icaria en el siglo VI a.C, fue el primero en introducir un actor a esta representación, que hasta el momento tenia solo recitaciones. Esto permitió introducir el diálogo entre el corifeo y el actor, dando origen a la actual concepción de obra teatral. Al culminar la festividad, se ofrecía en sacrificio un macho de las cabras, acto que recibió el nombre de “tragedia” ,puesto que el término significaba “festividad del macho cabrío”.
Durante el siglo V antes de nuestra era, Esquilo (Eleusis, 525 a. C Durante el siglo V antes de nuestra era, Esquilo (Eleusis, 525 a. C.- Gela, 456 a. C.) y Sófocles (Atenas, 495 a. C.-Atenas, 406 a. C.) agregaron personajes al corifeo y primer actor, junto a las características actuales de la tragedia, como el sufrimiento de los personajes que les permite alcanzar el conocimiento. Con ello, la tragedia adquirió mayor complejidad representativa y, con la creación de las obras dramáticas de ambos autores, dejó de ser una práctica suscrita solo a la religiosidad.
Dada la influencia del teatro en la vida de los griegos, se construyeron anfiteatros de piedra al aire libre para el disfrute de obras trágicas o satíricas.
Tragedia: La palabra tragedia viene del griego que significa cabra y oda, osea canción de la cabra, era un himno religioso que se cantaba cuando la cabra era degollada públicamente. Satírica: Discurso o composición literaria en prosa o verso en que se critican agudamente las costumbres o vicios de alguien con intención moralizadora, lúdica o meramente burlesca.