La Buena noticia de Dios a los hombres Cuando se cumplió el tiempo, el Hijo de Dios se hizo hombre en el seno de una Virgen llamada María
Los romanos dominaban Israel.
El pueblo hebreo esperaba la venida del Mesías anunciado por los profetas.
Un día el arcángel Gabriel, enviado por Dios, entró en casa de una muchacha llamada María
El ángel le dijo: Alégrate, llena de gracia El ángel le dijo: Alégrate, llena de gracia. El Señor está contigo; tú eres la escogida entre todas las mujeres para ser Madre de Dios.
No temas, María, pues a los ojos de Dios has hallado gracia No temas, María, pues a los ojos de Dios has hallado gracia. Vas a concebir en tu seno y darás a luz un hijo a quien pondrás por nombre Jesús.
María dijo: He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra.
Madre mía, gracias por haber dicho que sí. FIN